martes, 18 de febrero de 2025

Análisis del escándalo cripto en Puntal AM (video)

 


El impacto del criptogate en la imagen de Milei, según las últimas mediciones (nota publicada en CBA24N)

El pasado viernes 14 de febrero, un tuit del presidente Javier Milei en su red social preferida (la ex Twitter, rebautizada como X por Elon Musk) fue el puntapié inicial de lo que hasta ahora es el mayor escándalo político de su gestión. ¿Qué dicen las mediciones más recientes sobre el impacto del “Criptogate” o “Libragate”?  Consultora Delfos cerró su última encuesta nacional el domingo 16 de febrero, al mismo tiempo que se conocían las noticias al respecto. El informe destaca: “Se trata de un tema que pone por primera vez a Javier Milei frente a la otra demanda social que le marcan los argentinos al presidente: la batalla contra la corrupción (…) habrá que seguir de cerca cómo afecta a Milei este escándalo de las criptomonedas que lo pone en un lugar contradictorio con la agenda social. Hasta el cierre de esta medición, el tema ingresó marginalmente entre las demandas (con 1%) y en los motivos de calificación negativa de la gestión Milei (con 2%), dentro de un contexto en el que la imagen negativa del presidente como dirigente creció 5 puntos porcentuales y volvió a los niveles de diciembre pasado (50%)”. Asimismo, su valoración favorable cayó 3 puntos porcentuales (de 48% a 45%; gráfico arriba), mientras que la regular pasó de 4% a 5%, lo cual resulta en un malestar acumulado de 55%.

En tanto, CB Consultora cerró su última encuesta el sábado 16, al día siguiente del tuit: a diferencia de Delfos, midió de manera polarizada, positiva vs negativa (sin regular). El resultado fue 49,3% vs 48,1% (gráfico arriba). Respecto a la anterior medición de CB, la calificación favorable cedió 2,5 pp, mientras que la desfavorable subió 1,4 pp. Con apenas matices, aunque se trata de variaciones intermensuales en el límite de la significatividad estadística ambas marcan una tendencia negativa a pocas horas de que estallara el tema, lo que sugiere un potencial desfavorable de mayor impacto por estas horas.

Precisamente en esa línea van las primeras mediciones de sentimiento social en redes: según Ad Hoc, que monitoreó hasta el lunes 17 de febrero, 63% de las menciones a Milei durante el fin de semana fueron negativas y duplicaron a las positivas (31%). Como se advierte, el presidente sólo mantuvo el acompañamiento de un núcleo duro que se ubica en el mismo orden de magnitud del caudal que obtuvo en las primarias y la primera vuelta de octubre de 2023 (en torno al 30%), y muy por debajo del 55,6% que lo consagró presidente en el ballotage. Asimismo, la negatividad superó al anterior pico desfavorable registrado luego de su discurso en Davos (gráfico arriba). 

El mismo informe agrega que además el gobierno perdió el control del encuadre (framing) del tema en una arena que se precia de dominar, la digital en redes sociales: en el top 5 de menciones se ubicaron “Juicio político”, “MileiEstafador” y “Ponzi”, en referencia al esquema de estafa piramidal descrito por el economista de ese apellido (gráfico arriba).

A su turno, el reporte de conversación digital de Enter Comunicación arrojó 49% de negatividad, más que duplicando a la positividad (18%); por otro lado, 21% del sentimiento social fue neutro y 12% indiferente (gráfico arriba).

Tal como en el informe de Ad Hoc, “MileiEstafador” sobresalió entre las menciones, al punto de alcanzar la 4ª posición a nivel mundial, lo que marca el carácter global del escándalo (gráfico arriba).


En la misma línea, el monitoreo digital de redes sociales de Scidata reportó a “Estafa” al tope de las menciones asociadas a Milei durante el fin de semana, con 16% (además de “Estafador”, con 3,1%), mientras que “Escándalo” (5,6%) y “Delito” (4,2%) también se posicionaron en el top 10 (gráfico arriba).  


Según ese informe, en apenas 48 horas la negatividad se disparó un 14% en las redes, “para hundir los promedios en la peor categoría de charla mencionando al jefe de Estado: la categoría de sentimiento ´pésimo´. En tanto, en los medios de comunicación, el sentimiento de las publicaciones que también venían agravándose durante febrero, se negativizó aún más dejando los promedios muchos más consolidados en la categoría de sentimiento "pésimo" detectado en la cobertura mediática mencionando a Milei” (gráficos arriba y abajo). 

En síntesis, aunque habrá que esperar nuevas mediciones para calibrar el costo político del escándalo en la imagen presidencial, el análisis de estos primeros cinco informes permite extraer las siguientes conclusiones: 1) tanto las encuestas nacionales como los monitoreos de redes sociales marcan un impacto negativo en la valoración de Milei a pocas horas del estallido del asunto 2) los matices entre las encuestas (donde el impacto es menor) y el sentimiento social digital (donde el efecto resulta mucho más visible hasta el momento) tiene que ver con lo que distingue a cada herramienta en términos de recolección de datos, ya que las primeras apuntan a medir de manera representativa el universo de electores, mientras que las segundas miden el ecosistema de redes sociales donde nació el issue 3) el escándalo es un daño autoinfligido por el presidente en una arena, la digital, que en general le resultaba relativamente favorable, con lo cual (aunque tenía  antecedentes preocupantes en la materia) se perfila de manera similar a un “cisne negro”. 

viernes, 14 de febrero de 2025

Cómo arrancó la carrera preelectoral en Buenos Aires y en CABA, según las encuestas (nota publicada en CBA24N)

El pasado miércoles 12 de febrero, la Cámara de Diputados de la Nación le dio media sanción a Ficha limpia, el proyecto que impide candidaturas a quienes tengan condenas por corrupción en segunda instancia. Aunque el trámite en el Senado por ahora no parece allanado, si fuera aprobada en ese recinto la iniciativa le impediría competir a Cristina Fernández de Kirchner, la candidata más fuerte en la estratégica provincia de Buenos Aires, según la última encuesta de la consultora de Imagen y Gestión Política (CIGP), con 35% de intención de voto, 6 puntos porcentuales por encima de Unión por la Patria (UP) en el escenario en el que sólo se miden fuerzas políticas. No se trata de un dato menor, porque con CFK en la grilla se perfila un escenario de empate técnico entre La Libertad Avanza (LLA) y UP (aun en el caso de que se sumaran linealmente el 32,25% de José Luis Espert y el magro de 7,5% de Karina Milei), mientras que en el escenario de marcas hay una ventaja de 8 pp para el sello libertario.  

El dato confirma la centralidad política de CFK como opositora y también que su figura mide más que la marca en esa provincia que, por su peso electoral (37% del padrón) siempre se perfila como “la madre de todas las batallas”, con el plus de que además allí gobierna Axel Kicillof (neto opositor al presidente Javier Milei) y de que el peronismo incluso logró ganar el ballotage presidencial en 2023. Sucede lo contrario con los potenciales precandidatos de LLA; tanto Espert como la hermana del presidente no logran potenciar el sello, que ronda el 34% tanto en el informe de CIGP como en la encuesta que también realizó en enero pasado la consultora Pulso Research (gráfico arriba). A principios de ese mes, la ventaja de LLA sobre UP fue de casi 13 pp, mayor a la reportada por CIGP a fines de enero; en ambos casos, el PRO ronda el 10% de intención de voto como marca, lo que muestra el estado de debilidad de esa fuerza. Al peronismo no K no le va mejor y tampoco logra capitalizar la coyuntura, dado que ronda el 6% de intención de voto en ambos estudios. Sólo Guillermo Moreno como referente logra una performance mejor (8,5% en CIGP), aunque es incierto si jugaría dentro de lo que se conoce como “peronismo federal”. 

 

Otra vidriera clave en el turno electoral de este año será la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, (CABA), donde gobierna el PRO de la mano de Jorge Macri. Junto con PBA, ese distrito expresa también el problemático vínculo entre el sello amarillo y el libertario, pues el primero apuesta a retener su bastión, mientras que LLA lo desafía. Según la última encuesta de consultora Circuitos realizada a principios de febrero, se perfila un empate técnico entre LLA (27,5%) y el PRO (casi 25%). UP cierra el podio, con 19,4%, mientras que los demás sellos no llegan individualmente a los dos dígitos (gráfico arriba).

Con los matices del caso, en CABA también se perfila una figura que podría potenciar el sello UP: es Leonardo Santoro, que según Circuitos roza el 25% de intención de voto, en un contexto donde LLA no tiene un candidato claro (el que más venía midiendo, Ramiro Marra, fue expulsado recientemente), mientras que Waldo Wolff del PRO alcanza 20,6% y el ex jefe de gobierno Horacio Rodríguez Larreta ronda el 9% (gráfico arriba). Así, en el caso de que no hubiera lista conjunta entre LLA y el PRO en ese distrito, la elección podría ser muy pareja.  

Finalmente, el escenario más competitivo que midió la consultora Federico González & Asociados (FGA) a fines de enero confirmó el potencial de Santoro: también rondó el 25% y se ubicó a 5 pp de la sumatoria lineal de Patricia Bullrich, Manuel Adorni y Karina Milei como precandidatos libertarios. En tanto, el PRO/JXC acumuló 16,1% con las figuras de Mauricio Macri, María Eugenia Vidal y Diego Guelar (gráfico arriba). En síntesis: 1) actualmente, en PBA la figura más competitiva de UP es CFK, con chances de disputar la primacía en el distrito que se potenciarían si no se concretara una alianza entre LLA y PRO 2) sin embargo, en caso de quedar ella excluida de la competencia, el sello libertario podría imponerse sin necesidad de una lista conjunta con el sello amarillo 3) en CABA, la figura más instalada también es la de un opositor de UP, Santoro 4) sin Marra, LLA no cuenta con una figura fuerte, pero la marca tiene potencial como para disputarle la primacía al PRO en ese distrito 5) tanto en PBA como en CABA, Karina Milei no es la figura libertaria más competitiva.   

jueves, 6 de febrero de 2025

Cómo arrancó la carrera preelectoral en las últimas encuestas (nota publicada en CBA24N)

Este año se celebrarán las elecciones de medio término, en dos turnos si se sostienen las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) o en uno solo si esa instancia se suspende, como se debatirá en el Congreso en estas semanas. ¿Qué dicen las últimas encuestas nacionales? En enero, Consultora Delfos midió tres escenarios: en el primero, La Libertad Avanza (LLA) muestra un leve retroceso de 3 puntos porcentuales (pp) respecto a octubre de 2024 y alcanza 37,1% de intención de voto; la merma no resulta estadísticamente significativa dado el error muestral de +/-2,1%. En sentido contrario, el PRO recupera 3 pp en el mismo lapso y pasa de 6,3% a 9,3%. Unión por la Patria (UP) se mantiene estable en torno al 30%, mientras que una lista radical, una de Hacemos por Argentina y una de la izquierda se ubican por debajo del 5% (gráfico arriba). 

En el segundo escenario, una alianza entre LLA y el PRO trepa a 43,4%, el mismo guarismo obtenido en diciembre pasado y 2,2 pp por debajo del 45,6% de octubre 2024. UP mejora levemente y se ubica en torno al 32%, mientras que el radicalismo, HxA y la izquierda siguen por debajo del 5% (gráfico abajo). 

En el tercero, con una UCR integrada al oficialismo, el panorama apenas varía: una coalición de LLA ampliada ronda el 42% y UP se sostiene en torno al 31%, mientras que la izquierda y Hacemos siguen por debajo del 5%. El informe destaca que estas tendencias se dan en un contexto de polarización resiliente. “La funcionalidad del escenario actual para un oficialismo que apunta a plebiscitar su gestión en las elecciones de medio término se expresa en la intención de voto: de la polarización simétrica en términos de aprobación de gestión se pasa a una polarización asimétrica que ubica a LLA como primera minoría electoral en torno o por encima del 40% y a Unión por la Patria rondando el 30%, con los demás sellos diluidos en el marco de una dinámica en la cual la intensidad deja poco espacio para los matices y la moderación”.  


Otra de las consultoras que relevó datos a nivel nacional durante enero fue Pulso Research; en su informe, LLA alcanza 30,2% de intención de voto vs casi 16% del peronismo kirchnerista; ambos sellos presentan retrocesos respecto de diciembre pasado, estadísticamente no significativos dado un error muestral de +/-3,5%. Los demás no llegan a los 2 dígitos: 7% para el peronismo federal, 5% el PRO, 4% la izquierda y 3,6% la UCR (gráfico arriba). A diferencia de Delfos, esa consultora reporta alto nivel de indecisos, con 26,1% de ns/nc, lo que puede influir en los relativos bajos niveles que presentan LLA y UP en esta medición.  

En tanto, Synopsis reportó en su última medición casi 37% para LLA vs casi 24% para el kirchnerismo; nuevamente, las terceras fuerzas no llegan al 10% de intención de voto. El PJ no K alcanza 8,1%, el PRO 6%, la izquierda 4,5% y la UCR 4,2%, con 11% de indecisos (gráfico arriba). En este caso, el guarismo kirchnerista resulta más consistente con el núcleo duro que mostró en las elecciones de 2023, cuando UP sumó 27,3% de los votos en las PASO de agosto, mientras que el libertario se ubica por encima del casi 30% que obtuvo en esa misma instancia. 

A su turno, la consultora Opinion Lab midió dos escenarios. En el primero, LLA alcanza 37% vs 16% del kirchnerismo, mientras que el peronismo no K llega a 11%. Los demás sellos se ubican por debajo del 10%: 6% el PRO, y el radicalismo y la izquierda empatan en 5%, con 13% de ns/nc (gráfico arriba).  

En el segundo escenario, el peronismo no K y la izquierda salen de la competencia: LLA apenas varía (pasa de 37% a 38%), mientras que el panperonismo de CFK, Axel Kicillof y Sergio Massa trepa 10 pp hasta 26% y los demás sellos siguen por debajo del 10%: 7% el PRO vinculado a Mauricio Macri y 4% el radicalismo asociado al perfil opositor de Martín Lousteau, con 11% de ns/nc (gráfico arriba). 

De las últimas mediciones nacionales, sólo una se desvía notoriamente: según Isasi/ Burdman, el peronismo disputa el segundo lugar con el PRO y el kirchnerismo (la brecha sobre ellos, de entre 2 y 3 pp, no resulta estadísticamente significativa). En cambio, la intención de voto del oficialismo está alineada con las demás encuestas. En síntesis: 1) más allá de los matices entre estudios, por ahora todos convergen en mostrar ventaja para LLA 2) en cuatro de las cinco encuestas que relevaron durante enero, el sello UP o el panperonismo K es la fuerza opositora con mayor intención de voto 3) en tres mediciones, las terceras fuerzas no llegan al 10% de intención de voto, lo que perfila a priori un escenario de polarización asimétrica favorable al oficialismo y con dificultades para los sellos que busquen posicionarse como una alternativa opositora moderada, dialoguista o de “tercera vía”, lo que afecta claramente a Hacemos y a una lista radical “crítica” de LLA 4) el PRO enfrenta el mayor riesgo relativo, dado que este año pone en juego muchas bancas que logró en la elección de medio término de 2021 y las tendencias lo muestran diluido a favor de LLA 5) la izquierda ronda entre el 3% y el 5% de intención de voto.