lunes, 21 de enero de 2013

Ejes del debate electoral para 2013 (3)


5. Un quinto punto de debate pasa por las estrategias y el modo en que oficialismo y oposición podrían encarar las campañas. En este caso, los analistas especulan sobre la posibilidad de alianzas o frentes y algunos trazan líneas de continuidad con las tendencias percibidas en 2011 y 2012 y otros hablan de cambios en los posicionamientos relativos. Veamos:

Carlos Fara (Fara y Asociados): “El oficialismo encarará este año electoral con un cambio de alianza política de la Presidenta, que marcha hacia el armado de una coalición de centroizquierda, en la que el peronismo ya no sea la columna vertebral, sino un socio más. Quiere alejarse de las estructuras previsionales como gobernadores, intendentes, sindicatos. En cambio, ascenderán figuras por fuera del peronismo, como Sabbatella, que consolidan una coalición más progresista”. –

Manuel Mora y Araujo (de Ipsos-Mora y Araujo): “Mirando encuestas se puede hablar de 20 o 25 por ciento de piso de votos del oficialismo, pero yo creo que es un poco más. Yo lo pondría en 35. Si alguien dudaba de que el Gobierno tenía capacidad de movilizar a mucha gente, bueno... la tiene, no la perdió. Lo vimos en diciembre. Capacidad de movilizar organizadamente. Ni un ápice más que los cacerolazos. Después hay que ver qué pasa. La estrategia razonable para el oficialismo es tratar de nacionalizar la elección todo lo posible, jugando la figura de la Presidenta por encima de los candidatos locales, y procurar que en Buenos Aires no se genere una excesiva dispersión de la oferta peronista que le puede quitar votos al Frente para la Victoria. La oposición sigue envuelta en sus indefiniciones, pero el hecho de tratarse de una elección legislativa de medio término, donde se vota por distrito, compensa esa debilidad. Aun con el actual panorama de oposición muy fragmentada, el electorado opositor va a ir produciendo tendencias locales cuya eventual agregación se producirá después, con vistas a 2015”.

Artemio López (consultora Equis): “(Mauricio) Macri se va a desmoronar y también va a perder posiciones el FAP. Igual, los medios lo van a ver como que Cristina perdió el 54%. Clarín va a titular: Gran derrota del oficialismo a pesar de haber duplicado los diputados. Las preferencias se mantienen. Hoy hacés una elección y la primera minoría está 30 puntos arriba de la segunda. Hubo cambios ahí: (Hermes) Binner perdió con Macri en escena ya que el FAP había cosechado votantes del PRO en Capital. Igual Macri igual ha priorizado su enfrentamiento con el Gobierno Nacional y su gestión será castigada este año en las urnas”.

A modo de síntesis y cierre (provisorio) de este tema podemos, sobre las diversas líneas de interpretación expuestas, “rebobinar” y agregar nuestro propio enfoque: las encuestas en estas semanas confirman la ventaja del “signo oficialista” en la provincia de Buenos Aires (sin candidato definido aún), con alrededor de un  40% de la intención de voto y una amplia diferencia respecto a las fuerzas de la oposición, la más competitiva de las cuales no supera el 15% (lo que, provisoriamente, confirmaría la tesis de Artemio López). Esta brecha amplia en el distrito de mayor peso electoral le permitiría al oficialismo compensar resultados relativos más adversos en Capital Federal, Santa Fe, Córdoba y Mendoza, donde competirían varias de las figuras a priori más fuertes de la oposición (tesis de varios consultores).

Con todo, es difícil prever si el cuadro resultante decantaría en un escenario favorable o desfavorable a una reforma constitucional (con re-re), no sólo porque el oficialismo necesitaría números de una contundencia que hoy es difícil de vislumbrar, sino porque depende también de lograr (como logró Menem en su momento) un interlocutor con fuerza dentro de la oposición para abordar la discusión de la reforma. Este actor no aparece hoy en el escenario político (como hemos planteado en entradas anteriores), con el agravante de que el único elemento que aglutina a la oposición de cara a las legislativas es el rechazo a priori la re-re (lo que dificulta cualquier acuerdo a posteriori de las elecciones).

2 comentarios:

  1. ¿Quien fue el interlocutor de Menem para la re re?

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  2. Hola Fede, gracias por participar! Fue el ex presidente Raúl Alfonsín (ya fallecido), como líder de la UCR. Saludos!

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