viernes, 9 de noviembre de 2018

A 35 años del regreso de la democracia: satisfacción con el sistema e imagen del gobierno

En la entrada anterior sobre este tema planteábamos una diferencia clave entre el Brasil que dio espacio al surgimiento de Jair Bolsonaro y Argentina: mientras según el Latinobarómetro 2017 sólo 13% de los brasileños decía estar muy satisfecho o más bien satisfecho con la democracia, en Argentina esa proporción era casi 3 veces más grande: 38%. Como este viernes 9/11 se presentó el Latinobarómetro 2018, es pertinente un repaso y actualización de datos, importantes de cara a dilucidar las chances que puede tener un “outsider” (no necesariamente con el perfil de Bolsonaro) en las elecciones presidenciales del 2019. Podemos considerar aquí dos niveles de análisis: el regional, por un lado, y por otro las tendencias en Argentina. Veamos:

El estudio se basa en 20.204 entrevistas cara a cara en 18 países entre el 15 de junio y 2 de agosto 2018, con muestras representativas de la población nacional de cada país de entre 1.000 y 1.200 casos, con un margen de error de alrededor de +- 3% por país. A nivel regional, la alarma se enciende con este dato: "2018 es el peor año para la región desde que Latinobarómetro empezara a medirla. No hay ningún indicador que tenga una evolución positiva y muchos llegan a un mínimo histórico. La percepción de retroceso es la más alta en 23 años", apunta el informe. Así, el apoyo a la democracia en la región sigue bajando de manera sistemática año a año: el indicador descendió 5 puntos porcentuales respecto a 2017 ubicándose en 48%, vale decir 15 pp menos que en 1997 (ver datos arriba; click para agrandar). Según Marta Lagos, directora ejecutiva del estudio, el 2018 ha sido un “annus horribilis” para la región en materia de democracia. “En esta nueva América Latina no son necesarios los golpes de Estado, se llega al autoritarismo por la vía de las elecciones”, alertó. 

El debilitamiento del sistema democrático se refleja en algunos datos de la última encuesta, como la caída del apoyo a la idea de que la democracia es el mejor sistema de gobierno: esa idea disminuye 5 pp entre 2017 y 2018 (pasa de 70% a 65%), acumulando así una caída de 14 pp desde 2013. En conjunto, el apoyo a la democracia en Latinoamérica se encuentra en su nivel más bajo desde el 2001, al tiempo que se advierte un avance de la indiferencia (o tolerancia) ante regímenes autoritarios. Se ve una caída del porcentaje de ciudadanos que considera que una “democracia es preferible”, situado en 2018 en un 48% (pendiente que comenzó luego del techo del 61% que se alcanzó en 2010) y en el aumento del grupo de personas “indiferentes” a si hay un gobierno autoritario o democrático (que pasó de 16% a 28% en el mismo período). Vale decir, la transferencia es lineal entre posiciones: caída de 13 pp y suba de 12 pp entre puntas. Parte de esta crisis podría ser atribuida al deterioro en la percepción que tiene la población latinoamericana sobre el progreso en los países de la región: valorada en -8, es la peor registrada en los 23 años de existencia de la organización Latinobarómetro. Tres notables excepciones: Bolivia (donde un 44 % percibe progreso), Chile y República Dominicana (ambos con 33%). Según Lagos, directora de la organización no gubernamental radicada en Chile, la percepción sobre la “situación económica personal futura” se mantiene en un 45% (3 pp más que en 2016, pero 2 pp por debajo de 2017). Aludiendo a la “diabetes democrática” que vive la región desde hace años, la ejecutiva resaltó que “hay demasiadas alertas de que aquí hay algo que efectivamente (…) está cada día peor”. 

Pasando a la lectura de las tendencias en Argentina, hay algunas luces amarillas: la confianza en la democracia y en el presidente en Argentina están actualmente en niveles similares a los de la megacrisis de 2001. En el caso del apoyo a la democracia en nuestro país, en un año cayó 10 puntos porcentuales. La caída de Brasil es similar: 9 pp, de 43% a 34%, dato que también ayuda a entender el fenómeno Bolsonaro. Con todo, Argentina sigue entre los países con niveles de apoyo más alto: con 58%, es superada por Costa Rica (63%) Uruguay (61%) y empata con Chile (ver datos abajo; click para agrandar). 



La caída en la aprobación del gobierno argentino es un poco mayor: 13 pp, de 36% a 23%. En este caso, se invierte la tendencia y Argentina está más cerca de las posiciones inferiores del ránking que de las superiores. Lideran Costa Rica y República Dominicana (53%) y disputan la posición de escoltas Bolivia (47%) Ecuador (46%) y  Chile (45%). Previsiblemente, el peor resultado lo tiene el Brasil de Temer (6%), otro registro que ayuda a entender el fenómeno Bolsonaro (ver datos abajo; click para agrandar). Finalmente, en cuanto a la situación económica personal futura, el país con peores expectativas es Argentina (33%) seguida por Nicaragua (36%), que este año se sumió en una profunda crisis.


2 comentarios:

  1. Muy bueno el informe, gracias y lo comparto. Carlos F

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  2. ¡Gracias x la lectura y x compartirla en redes, Carlos!

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