miércoles, 26 de marzo de 2025

Qué dicen las encuestas a siete meses de las elecciones (nota publicada en CBA24N)

Dentro de 7 meses, el domingo 26 de octubre, están previstas las elecciones de medio término de 2025. ¿Cómo se perfila hoy el panorama preelectoral? Según la última encuesta nacional de Consultora Delfos, en marzo la aprobación de la gestión del presidente Javier Milei cayó 13 puntos porcentuales, de 50% a 37% (gráfico arriba). En ese mismo porcentaje se ubicó la intención de voto a favor del oficialismo en un escenario abierto de competencia entre todos los sellos, lo que implica una ventaja de 5,7 puntos porcentuales de La Libertad Avanza (LLA) sobre Unión por la Patria (UP, con 32%), estadísticamente significativa dado el error muestral de +/-1,8%.  

En la misma línea, la última encuesta nacional de Zuban Córdoba también reportó casi 37% para LLA vs casi 33% para UP (gráfico abajo). En este caso, la brecha se achica a 4,2 pp, estadísticamente no significativa dado el error muestral de +/-2,45%. Ambas mediciones coinciden además en ubicar a los demás sellos por debajo de los dos dígitos, lo que perfila una fuerte polarización para una elección de medio término. 

La última encuesta nacional de Aresco también perfila una situación polarizada: casi 40% para LLA vs casi 35% para UP (gráfico abajo), con una ventaja de 5,1 pp para el oficialismo en la tendencia (sin proyección de indecisos). Nuevamente, ninguna de las terceras fuerzas se arrima al 10% de intención de voto.  

De las últimas encuestas nacionales realizadas en marzo, la que presenta el panorama más competitivo es la de la Universidad de San Andrés (Udesa): 27% para LLA vs 24% para el peronismo (que a nivel nacional se referencia en el frente anclado en el kirchnerismo y aliados). La ventaja de 3 pp resulta estadísticamente no significativa para un error muestral de +/-3,15%, lo que perfila un empate técnico en un escenario donde 1 de cada 4 electores no se define (gráfico abajo).

En síntesis, las últimas encuestas nacionales coinciden en lo siguiente: 1) el escenario es polarizado entre LLA y UP, muy lejos de los “tres tercios” relativos que se vieron en las primarias de agosto de 2023 2) en un escenario de competencia abierta entre sellos, la ventaja de LLA sobre UP es menor a 10 pp, es decir, por debajo de los 11,2 pp que Milei obtuvo sobre Sergio Massa en el ballotage de aquel año 3) esto perfila una disputa competitiva, que resulta consistente con las tendencias que arrojaron las últimas mediciones realizadas en distritos clave. Así, según la más reciente encuesta realizada por Analogías en marzo en la provincia de Buenos Aires (PBA), UP aventaja a LLA por 5,8 pp: 33,3% vs 27,5% (gráfico abajo). 

Con apenas matices en los porcentajes, la última medición de Consultora Circuitos de marzo en PBA arrojó 39,1% para UP vs 30,1% para LLA, una brecha de 9 pp (gráfico abajo).

En Córdoba, el segundo distrito de mayor peso electoral a nivel país después de PBA, el sello LLA corre desde atrás por falta de un candidato lo suficientemente instalado: según la encuesta realizada por la consultora Opiniones y Tendencias en nuestra provincia en marzo, el libertario Agustín Laje aparece relegado (18,5%, gráfico abajo) en la disputa en empate técnico entre el radical cambiemita Rodrigo de Loredo (25,3%) y el ex gobernador Juan Schiaretti (23,4%).

Párrafo aparte para Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), donde antes de la elección nacional de octubre se realizará la de legisladores porteños: al igual que en Córdoba, allí el sello LLA tiene déficit de candidaturas. El más instalado según la última encuesta de Federico González & Asociados (FGA) es el recientemente expulsado del oficialismo Ramiro Marra, que aventaja al vocero presidencial Manuel Adorni por 13,1% a 9,9% (gráfico abajo). Ambos aparecen detrás de Leandro Santoro de UP, que ronda el 28% de intención de voto. 

La última medición de CEOP en CABA también ubica a Santoro al frente (32,1%), a Fernán Quirós del PRO como escolta (21,4%) y tercero a Adorni (13%, gráfico abajo). En síntesis, según las encuestas realizadas en marzo en estas tres plazas clave, hoy LLA corre la carrera preelectoral desde atrás. 



jueves, 20 de marzo de 2025

Análisis de coyuntura publicado en el diario digital Guau

 

MALOS NÚMEROS

La imagen de Javier Milei en caída libre entre el impacto del “LibraGate” y la falta de empatía

Un reciente estudio de la Consultora Delfos revela una fuerte caída en la imagen positiva del presidente Javier Milei, con una pérdida de 17 puntos porcentuales en comparación con el mes de febrero. Este descenso refleja la creciente preocupación de la opinión pública frente a las decisiones del gobierno, que ahora se enfrenta a varios escándalos.
miércoles 19 de marzo de 2025


Un reciente estudio de la Consultora Delfos revela una fuerte caída en la imagen positiva del presidente Javier Milei, con una pérdida de 17 puntos porcentuales en comparación con el mes de febrero. Este descenso refleja la creciente preocupación de la opinión pública frente a las decisiones del gobierno, que ahora se enfrenta a varios escándalos y desafíos.

Del critpogate y la Corte, pasando por la economía y la inundación en Bahía Blanca son algunos de los puntos donde se asienta la caída que llegó al 55% de imagen negativa.

Norman Berra, analista de opinión públicaatribuyó este descenso a una combinación de factores. El primer golpe provino del escándalo del “LibraGate”, seguido por "un mal inicio y una mala apertura de sesiones por parte del presidente, donde en redes la gente terminó hablando más del escándalo entre Manes y Caputo que del discurso presidencial". A esto se suma la "falta de empatía del gobierno luego del desastre en Bahía Blanca", acumulando varias semanas negativas para el gobierno.

La medición realizada por Delfos a mediados de marzo, considerando todos estos elementos coyunturales, registró una caída de 17 puntos en la imagen positiva del presidente, que hasta febrero se mantenía en un 50% a nivel nacional. Actualmente, se ubica en un 33%, mientras que la imagen negativa se disparó del 43% al 55%, lo que significa una transferencia neta de positivos a negativos y un incremento neto de la negatividad. Asimismo, la aprobación de gestión cayó del 50% al 37%, con la negatividad subiendo del 47% al 59%.

Berra en diálogo con FM Espacios de Formosa destacó que la imagen actual del presidente es la peor desde junio del año pasado, incluso superando un momento complicado en octubre. "El apoyo al gobierno está volviendo al núcleo duro del 30-33% que lo votó en primera vuelta", apuntó 

La consultora registró una caída fuerte en provincia de Buenos Aires –uno de los cuatro distritos donde el presidente perdió las elecciones–, lo cual Berra considera lógico. La falta de empatía del gobierno nacional demostrada tras la tragedia de Bahía Blanca, sumada al hecho de ser una provincia gobernada por la oposición, también habría tenido un fuerte impacto negativo en la imagen del presidente en ese territorio.

Link a nota completa 


Caída generalizada de la imagen de Javier Milei en las últimas encuestas nacionales (nota publicada en CBA 24N)

La espiral descendente en la imagen presidencial que se abrió en la segunda mitad de febrero con el estallido del Criptogate se profundizó en lo que va de marzo: según la última encuesta nacional realizada por Consultora Delfos, la valoración positiva de Javier Milei cayó 2 puntos porcentuales (pp), de 45% a 43%, mientras que la negativa trepó 2 pp (de 50% a 52%) y la regular se mantuvo en 5% (gráfico arriba). Así, su calificación favorable se ubicó cerca del piso de la serie evolutiva desde agosto pasado, al tiempo que el malestar acumulado subió al 57%. El informe destaca: “La crisis por el Caso Libra envolvió a Javier Milei en un hecho sospechado de corrupción, principal demanda social hoy a su gobierno y uno de los ejes centrales de su discurso político a la hora de criticar al kirchnerismo. La designación del juez federal Ariel Lijo por decreto para integrar la Corte Suprema de Justicia también rompió con la idea de ´republicanismo´ que él enarboló como discurso anti K, pasando a ejercitar una conducta propia de ´la casta´. Incluso en esta línea, también las desafortunadas apariciones que protagonizó Santiago Caputo le pusieron rostro a un estilo político de gobierno fuertemente rechazado por los argentinos”.

Mientras que Delfos mide la imagen presidencial en tres niveles (positiva, regular y negativa), otras consultoras lo hacen de manera polarizada. Es el caso de Equipo Mide, que registró entre febrero y marzo una caída de la imagen positiva de 4 pp que se trasladaron de manera lineal a la negativa, dejando así un saldo desfavorable de 8 pp, con pico de negatividad y piso de positividad en la serie evolutiva desde el inicio de su gobierno (gráfico arriba). 

Consultora CB también mide la imagen del presidente de manera binaria (gráfico arriba): reportó una caída de la positiva de 3,2 pp (de 49,3% a 46,1%) que se transfirieron linealmente a la negatividad (pasó de 48,1% a 51,4%), de lo cual resultó un saldo desfavorable de 5,3 pp. 

En tanto, la encuesta de Opina Argentina arrojó una caída de 6 pp en la imagen positiva que se trasladaron linealmente a la negativa (gráfico arriba), dejando un saldo desfavorable de 4 pp. Aquí,  la serie evolutiva muestra que la valoración de Milei volvió a niveles similares a octubre pasado, borrando la mejora que había registrado en los siguientes 4 meses a la anterior crisis del oficialismo. El informe destaca que “se observa un deterioro pronunciado en las credenciales de imagen tanto de Javier Milei como de otras figuras del oficialismo. El rechazo al presidente alcanza el nivel más alto desde octubre del año pasado”.

De las encuestas realizadas en lo que va de marzo, sólo la de Pulso Research (gráfico arriba) arrojó relativa paridad entre la imagen positiva de Milei (46,4%) y la negativa (47,2%). Aquí la valoración favorable cayó 5,1 pp, de lo que resultó una brecha adversa de 0,8 pp. A su turno, según el Índice de Sustentabilidad General de la consultora Mercados y Estrategia que promedia los valores indexados de 27 variables y atributos que incluyen imagen personal, valoración de gestión y afinidad ideológica, el presidente está en el piso de la serie histórica, con un ISG de 2,95 (gráfico abajo).   

En síntesis: 1) en estas seis encuestas nacionales realizadas en lo que va de marzo, la valoración presidencial muestra caídas 2) con matices en las cifras, en todos los casos su imagen queda con saldos netos negativos 3) el deterioro se da un panorama en el que las consecuencias del ajuste económico hacen mella en las economías domésticas de los argentinos 4) eso deja a Milei en contradicción con aspectos que hacen a la génesis de su discurso político y debilitan el andamiaje sobre el que construyó sus consensos sociales. 

Análisis de coyuntura en el programa Posta - Así son las cosas, por Canal C (video)


 

viernes, 14 de marzo de 2025

Se instaló el temor a perder el empleo: qué dicen las últimas encuestas (nota publicada en CBA24N)

Según la encuesta nacional realizada en febrero pasado por Consultora Delfos, casi 3 de cada 10 adultos con trabajo en nuestro país tienen miedo de perderlo (gráfico arriba). Las formas en las que se distribuye ese temor arrojan varios datos clave: en primer término, es mayor entre las mujeres (30%) que entre los hombres (25%); el clivaje de género es central en la actual coyuntura, dado que la “batalla cultural” del actual gobierno se basa en poner en discusión esa agenda. Así, no resulta sorprendente que ellas perciban mayor riesgo de pérdida de su trabajo en el marco de la política económica que lleva adelante la gestión Milei. Por segmentos etarios, entre 19 y 65 años el temor a perder el trabajo alcanza 29%, lo cual indica que la coyuntura impacta de manera simétrica en los tres niveles de trabajadores activos. Sólo aparecen matices en cuanto al ns/nc, que puede ser un indicador relativo (“proxy”) de incertidumbre al respecto: alcanza 33% entre menores de 30 años y ronda el 10% en los adultos de 30 a 49 años y de 50 a 65. En cambio, el temor cae entre los mayores de 65 años, dado que allí muchos adultos ya no están en actividad. Por región, el pico de temor a perder el trabajo se registra en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), con 38%, 10 puntos porcentuales por encima del promedio nacional. Le sigue el noroeste argentino (NOA) con 35%. En cambio, el temor a perder el empleo baja en Provincia de Buenos Aires (22%) y el noreste argentino (NEA) con 24%, ambos por debajo de la media nacional. Es probable que el pico en CABA tenga relación con el ajuste que lleva adelante el gobierno en el Estado nacional, que en su primer año de gestión redujo unos 51 mil puestos en el sector público. Dado que la mayoría de los organismos nacionales tiene sede en la Capital Federal, eso puede estar generando un impacto más sensible en esa región.  

El temor no es casual: la última encuesta permanente de hogares (EPH) del Indec que relevó la situación ocupacional arrojó que entre el tercer trimestre de 2023 (cerca del cierre de la gestión del Frente de Todos) y el tercer trimestre de 2024 (es decir, los primeros 10 meses del gobierno de Javier Milei) la tasa de desocupación creció de 5,4% a 6,4%.  Como dato contextual, la más reciente encuesta de Manpower arrojó que los empleadores argentinos anticipan una Expectativa Neta de Empleo (ENE) para el primer trimestre de 2025 de -1% (gráfico arriba), lo que implica una baja de 5 puntos en la comparación trimestral.  

Esto es consistente con los temores de pérdida del trabajo y ubica a Argentina con la peor performance entre todos los países relevados por Manpower a nivel global (gráfico arriba). Nuevamente, los datos “blandos” de las encuestas se corresponden con los datos duros de empleo: en el primer año de gestión de Milei se destruyeron 185 mil puestos, 51 mil en el sector público y 119 mil en el privado (gráfico abajo). Por otro lado, el personal de casas particulares se redujo en 15 mil empleos.  

Otras encuestas nacionales recientes que relevaron estas variables arrojaron resultados aún peores: según la última medición de Consultora de Imagen y Gestión Política (CIGP), casi 57% de los empleados teme por su estabilidad laboral este año (gráfico abajo).  

Finalmente, un reciente relevamiento de la consultora Opinion Lab reportó que el miedo a perder el empleo alcanza el 40%; al igual que en el estudio de Delfos, el informe muestra mayor temor relativo entre las mujeres (gráfico abajo).

En síntesis, más allá de los matices en las cifras y porcentajes, todos estos estudios coinciden en marcar una sensación de vulnerabilidad laboral que profundiza el sendero de malestar social que se instaló con fuerza desde febrero. Si el gobierno nacional persiste en una agenda socioeconómica acotada a la reducción de la inflación, su discurso, relativo y narrativa quedarán cada vez más desacoplados respecto a las demandas de una opinión pública que está cambiando.   

viernes, 7 de marzo de 2025

Negatividad y pérdida del manejo de la agenda: qué dicen las últimas mediciones en redes sobre Milei (nota publicada en CBA24N)

 

En nuestras notas de las últimas semanas en este espacio vimos que el Criptogate generó en las encuestas un impacto negativo en variables como la imagen presidencial, la valoración de la gestión y la aprobación del gobierno. Otros efectos pos estallido del escándalo son una creciente negatividad de la conversación en redes sociales, pérdida del interés y del manejo de la agenda por parte del oficialismo en la arena digital que siempre se jactó de dominar. Las últimas mediciones realizadas luego del discurso de Javier Milei el 1 de marzo confirman la persistencia de esos problemas: según la escucha social realizada por Enter Comunicación, las menciones este año cayeron casi 42% entre el 1M/2024 y el 1M/2025 (gráfico arriba).

El informe de Scidata reportó caídas aún mayores del interés: 51,3% en redes y casi 60% en los medios de comunicación (gráfico arriba). En tanto, según el monitoreo de volumen de conversación digital de Ad Hoc (que midió un período de 24 horas posteriores al discurso presidencial), la caída fue de casi 28% respecto al año pasado (gráfico abajo). 

Más allá de los matices en las cifras, los tres informes coinciden en marcar la pérdida de interés en el discurso presidencial, dadas las caídas en la conversación en redes de un año a otro en torno al mismo evento comunicacional. Sin embargo, son peores los resultados en materia de sentimiento digital: Enter Comunicación registró 78% de negatividad, apenas 13% de positividad y sólo 9% de neutralidad (gráfico abajo).

Haciendo zoom en el episodio Caputo vs Manes, la negatividad llegó a 69% vs una positividad de 20% y una neutralidad de 11% (gráfico abajo). Planificado o no, el asunto tampoco le sirvió al gobierno para cambiar la tendencia de la conversación digital, al contrario: según el informe, “el altercado entre Santiago Caputo y Facundo Manes le restó protagonismo a Milei y desvió la conversación sobre el contenido de su discurso. En Youtube, los distintos videos sobre el cruce entre Caputo y Manes superaron hasta en un 74% a las views totales del discurso del presidente”. 

En la misma línea, Scidata apunta que el sentimiento de la conversación pública sobre el discurso presidencial ante la Asamblea Legislativa marca diferencias interanuales notables e inquietantes: “En redes sociales, mientras que durante el 1° de marzo de 2024 la charla de los argentinos se había ubicado en la categoría de sentimiento `malo´, un año después el sentimiento pasó a ser `pésimo`”.

En los medios de comunicación la caída fue aún peor: mientras que en 2024 el sentimiento de la cobertura mediática se había ubicado en la categoría "regular bueno", en 2025 el sentimiento se desmoronó a "pésimo".

Scidata subraya que las métricas que surgieron tras los respectivos discursos de Axel Kicillof ante la Legislatura de la provincia de Buenos Aires y de Jorge Macri ante el cuerpo legislativo de la Ciudad de Buenos Aires permiten hacer una comparación que pone mayor contraste entre los resultados logrados por los tres mandatarios (gráfico abajo): los datos confirman la magnitud de los problemas de performance digital del presidente.


Finalmente, según Ad Hoc la negatividad alcanzó 52% vs una positividad de apenas 33% y 15% de neutralidad (gráfico abajo). Así, las tres mediciones coinciden, con apenas matices en las cifras, en marcar una negatividad digital dominante. 

En síntesis: 1)  la pendiente desfavorable que abrió el Criptogate se sostiene pos 1M, con saldos en rojo para el gobierno nacional en términos de protagonismo, sentimiento social y framing (encuadre) 2) el oficialismo perdió el dominio de la agenda y la conversación digital en redes transcurre de manera predominante con enfoques que le resultan adversos 3) eso configura un panorama al que los libertarios no están habituados.