lunes, 29 de abril de 2019

Resultados en Santa Fe y tendencias nacionales a fines de abril



Con 97% escrutado en Santa Fe, Antonio Bonfatti alcanzaba 31,1% de los votos, Omar Perotti 28,2%, José Corral 19,7% y María Bielsa 14,5% (ver datos arriba; click para agrandar). El promedio de tres encuestas previas arrojaba 26,8,% para Bonfatti (el resultado mejora 4,3 puntos porcentuales), 22,5% para Perotti (mejora en 5,7 pp), 21,2% para Corral (empeora en 1,5 pp) y 16,3% para Bielsa (empeora en 1,8 pp). Comparativamente, la mejor elección fue la de Perotti, que además tiene chances superar a Bonfatti la elección de gobernador en junio si logra retener el caudal de Bielsa (dado que el acumulado del peronismo da 42,7%, 11,6 pp por arriba del socialismo). Nuevamente, como viene siendo tendencia desde principios de 2019, mala elección distrital para Cambiemos, que aparece tercero y lejos de la pelea por la gobernación santafesina. 


Adicionalmente, la sucesión de reveses distritales articula con tendencias nacionales que a fines de abril siguen mostrando a Cambiemos por detrás de Unidad Ciudadana/CFK. Según la consultora Circuitos, la ex presidenta alcanza 33,8% de intención de voto, contra 24,4% del actual presidente. La ventaja es de 9,4 puntos porcentuales, estadísticamente significativa. De acuerdo a este estudio, Sergio Massa supera a Roberto Lavagna 12,1% a 9,8%, aunque en este caso la diferencia es de 2,3 pp y estadísticamente no significativa (implica un empate técnico). Del Caño ronda el 5%, dentro del caudal histórico de la izquierda (ver datos arriba; click para agrandar). El estudio se basa en un relevamiento telefónico sobre una muestra 1.844 casos en ciudades de más de 10 mil habitantes de 14 provincias, realizado entre el 17 y 21 abril, con un  margen de error es de +/- 2,3%. Asimismo, también en línea con las mediciones más recientes, Circuitos arroja una ventaja de 7,6 pp a favor de CFK en instancia de ballotage (ver datos abajo; click para agrandar).




Como venimos insistiendo, estas tendencias electorales son emergentes de un malestar socioeconómico que viene desgastando al oficialismo y mejorando las chances de la alternativa opositora más nítida. Cuando pasamos de medir intención de voto a diagnosticar el consumo doméstico, esto queda en evidencia: por efecto del ajuste, el 96% de los argentinos redujo su consumo, según la consultora Kantar. Ya en marzo pasado, el índice de expectativas de la consultora había caído por octavo mes consecutivo para ubicarse en el nivel más bajo de los últimos 15 años; es decir, la percepción de la población sobre la situación económica y laboral en el país continuó deteriorándose en los últimos 6 meses, contra el remanido relato del gobierno de que "lo peor ya pasó" (ver datos abajo, click para agrandar). 




Así, en el el primer trimestre de 2019 el Índice General de Expectativas Económicas (IGEE) acumuló una caída de 8 puntos y 2 de cada 3 argentinos (64%) redujeron algún consumo o suspendieron algún servicio, cuando en septiembre de 2018, tras el pico del dólar a $ 42, lo había hecho un 55%. De ese modo, el ajuste en los presupuestos familiares continuó en los últimos 6 meses. Por ejemplo, los adicionales de TV por cable o el plan de celular son los servicios que están más sujetos a revisión. La consultora Kantar identifica un segundo conjunto de gastos en los que predomina la necesidad de moderación del consumo. El informe refleja que el 86% de los argentinos disminuyó su consumo o dejo de hacer alguna de las siguientes actividades: “compra de ropa/calzados”, “salir a comer/tomar algo”, “ir al cine/teatro”, “hacer remodelaciones en el hogar”. Asimismo, existen gastos que directamente se restringieron o suspendieron. Se trata de compras atadas al valor del dólar o que representan una alta erogación en el presupuesto familiar, principalmente bienes durables (autos, electrodomésticos, electrónica) y viajes al exterior. Referido a este grupo, el informe señala que 9 de cada 10 argentinos (90%) hace menos o dejó de hacer alguna de estas actividades: viajar al exterior, comprar tecnología, compras online en el exterior. El porcentaje es aún mayor que en septiembre (84%), cuando la crisis ya impactaba con fuerza. Finalmente, los servicios que la gente más trata de preservar del ajuste son los relacionados con cobertura en salud y los seguros. En síntesis, mientras la gestión de gobierno de Cambiemos siga generando malestar socioeconómico como principal efecto, es poco probable que el desgaste del oficialismo ceda y que dejen de reforzarse las chances de CFK de cara a la elección presidencial. De hecho, si sumamos el dato de Circuitos a la serie de mediciones nacionales agregadas para actualizar el promedio del bimestre marzo-abril, el resultado da 34,4% para CFK y 27% para Macri, una ventaja de 7,4 pp. 

sábado, 27 de abril de 2019

Palpitando Santa Fe y tendencias nacionales

Una nueva disparada del dólar, con récord de riesgo país incluido, coronaron el  cierre de otra semana aciaga para el gobierno, que no encuentra respiro en ningún frente. Al mismo tiempo, siguen sumándose encuestas que convergen todas en un mismo punto: mostrar a Mauricio Macri por detrás de CFK y ya no en empate técnico, sino por diferencias estadísticamente significativas, en el orden de los 7 puntos porcentuales o incluso más. En el caso del más reciente estudio de la consultora Analía del Franco, la ex presidenta llega a 35,4% de intención de voto vs 27,2% de Macri; 8,2 pp de diferencia, una brecha similar a la que obtuvo el FPV sobre Cambiemos en la PASO de 2015: 8,55 pp (38,67% vs 30,12%). Aun sumados los tres precandidatos de Alternativa Federal (Sergio Massa, Roberto Lavagna y Juan Urtubey) quedan algo por detrás de Macri (1,2 pp), lo que a priori podría dejarlos fuera del ballotage, salvo que fidelizaran con altísima eficacia el voto de ese espacio y sumaran electores entre las primarias y la primera vuelta (ver datos al lado, click para agrandar). AF sólo tiene chances de pasar a la instancia decisiva si CFK no juega (escenario 2). 




Si sumamos esta encuesta a la serie evolutiva de mediciones de marzo-abril, CFK alcanza 34,4% vs 27,2% de Macri; 7,2 pp de diferencia, estadísticamente significativa, que coinciden con la estimación de Torino Economics (7 pp). Por otro lado, este domingo 28 de abril se celebran las primarias a gobernador en Santa Fe. Según un estudio de la consultora Raúl Aragon y Asociados, el ex gobernador socialista Antonio Bonfatti encabeza la intención de voto en la provincia con un 29,5%, en empate técnico con peronista Omar Perotti (27,7%. Tercera lugar se ubica la también peronista María Eugenia Bielsa (19,1%), quien a su vez está en empate técnico con el candidato de Cambiemos, el radical Corral (18,2%; ver datos arriba; click para agrandar). La sumatoria lineal de ambos candidatos justicialistas da 46,8%, lo que da una idea el potencial de ese frente de cara a la elección general de junio. 



En tanto, según la consultora Tendencias, Bonfatti está en empate técnico con Corral (26,4% vs 26,1%), mientras que Perotti se ubica tercero con 20,2% y Bielsa cuarta con 12,3%. Aún así, la sumatoria lineal de ambos precandidatos justicialistas alcanza 32,5%, lo que podría darle a ese espacio chances de disputar la gobernación. A su turno, según Proyección, Bonfatti alcanza 24,5% de intención de voto, contra 19,5% de Perotti, 19,2% de Corral y 17,6% de Bielsa (ver datos abajo; click para agrandar). 



Si hacemos un promedio de los tres estudios, el resultado es 26,8,% para Bonfatti, 22,5% para Perotti, 21,2% para Corral y 16,3% para Bielsa. El escenario asoma muy competitivo, dado que las diferencias entre los tres primeros no son estadísticamente significativas. Sin embargo, aunque individualmente el candidato de Cambiemos está disputando el segundo lugar, como espacio queda tercero en las tres mediciones, por detrás del socialismo y de la suma de los dos precandidatos justicialistas. De concretarse esta tendencia, sumaría un nuevo resultado adverso para el gobierno nacional a la serie de elecciones provinciales realizadas hasta el momento, donde ninguno de los candidatos referenciados en Cambiemos ha tenido una buena performance. Si bien las tendencias distritales no son predictoras de las nacionales, en el caso de Santa Fe las encuestas de cara a la elección presidencial ya vienen mostrando a Macri corriendo por detrás de CFK la "horse race", como puede verse en los datos de Aragón (ver gráfico abajo; click para agrandar). Recordemos que esa provincia pesa 8% del total nacional, por lo que las primarias de este domingo son un test en el distrito más gravitante de todos los que han votado hasta ahora. 




lunes, 22 de abril de 2019

Tendencias nacionales en abril (3)


Conforme se consolida el escenario que muestra a CFK con ventaja en el orden de los 7 puntos porcentuales sobre Mauricio Macri (por 34% a 27% en el promedio de estudios realizados entre marzo y abril), cobra interés otro punto clave: si despierta mayor rechazo la continuidad en el gobierno de Cambiemos o la posibilidad de un retorno al poder por parte del kirchnerismo. Recordemos que en la campaña anterior Macri también comenzó la "horse race" corriendo de atrás, y aun así pudo imponerse en la instancia de ballotage (si bien por una diferencia magra, unos 678 mil votos y 2,68 puntos porcentuales). Si ambos rechazos (el de la continuidad de Macri y el del regreso del kirchnerismo) pesaran de manera similar, cabría esperar una nueva definición ajustada para este año. En cambio, si la continuidad de Macri generara un temor mayor a su opuesto, cabría esperar una ventaja más clara de la principal alternativa opositora, tal como se advierte en el gráfico de Isonomía que tantas repercusiones generó este finde largo, según el cual CFK hoy le saca a Macri una luz de 9 pp (ver datos arriba; click para agrandar).


En la pasada elección de Brasil, el antipetismo latente despertó a partir del crecimiento de Fernando Haddad y la movilización de repudio a Jair Bolsonaro: articulado durante años de manera sistemática por los principales medios de comunicación de ese país, activó cadenas de rechazo a través de las redes sociales que beneficiaron al ex militar, principal canalizador de ese repudio. Eso, a la postre, decantó en un escenario de polarización asimétrica, que ya en la primera vuelta electoral permitía anticipar el triunfo del actual presidente. Si bien es cierto que en Argentina también es muy fuerte (y fogoneado mediáticamente) el sentimiento anti-K, el problema para Cambiemos es que ese efecto ya lo capitalizó en 2015 y 2017, mientras que ahora su propia gestión de gobierno está generando un nuevo consenso negativo, tal como se desprende de diversas mediciones recientes. Por un lado, según la consultora Taquion, la reelección de Macri genera menos esperanza (20,1%) que la posibilidad de que CFK gane las elecciones (30%). Por otro, la reelección de Macri también genera más temor (48,4%) que una victoria de la ex presidenta (34,4%; ver datos arriba, click para agrandar).




Con matices en los guarismos, la más reciente medición nacional de la consultora Synopsis confirma que hoy el rechazo que genera Macri es mayor al que origina CFK (en 5,2 pp). Según la consultora, "en un escenario caracterizado por esa particular situación de que los dos principales candidatos tienen imágenes negativas superiores al 50%, resulta de interés observar el escenario por el reverso: ver quién NO quiere el electorado que gane la elección. Posiblemente la consistencia de esos niveles de rechazo no sean similares (uno más reciente, otro más antiguo), y los desafíos para ablandar ese rechazo de acá a las elecciones sean diferentes, pero en todo caso, el rechazo a lo opuesto se consolida entre ambos electorados. Al haber un 17,3 dispuesto a cambiar su voto para evitar el triunfo NO deseado, y un 31,4 que lo pensaría en función de a quién tenga que votar, la información que proporcionará al electorado las Primarias, bien podrían disparar un reposicionamiento de buena parte del electorado. Esta particularidad que encontramos en el escenario (altos niveles de rechazo de los dos principales candidatos y alta predisposición del electorado al voto estratégico), le agregan un rango de incertidumbre a la dinámica electoral, sin antecedentes en la historia reciente".





En 2015, el temor a la continuidad del kirchnerismo (fundado en la ventaja de 8 pp obtenida por Scioli en la PASO) generó que entre las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) de agosto y la primera vuelta electoral se sumaran unos dos millones de electores a Cambiemos, con lo cual Macri logró achicar la brecha de 8 pp que el FPV había sacado en agosto a menos de 3 pp, estableciendo así la posibilidad de revertir el resultado en ballotage. Hoy, el promedio de encuestas vuelve a mostrar al kirchnerismo con una ventaja en el mismo orden de magnitud que en agosto de 2015 (7 pp), pero el desgaste de Cambiemos en el poder y el temor asociado a su continuidad en el gobierno limita fuerte la posibilidad de que Macri pueda volver a apelar al consenso negativo en torno al kirchnerismo, toda vez que ese consenso hoy es equivalente (o incluso menor) al generado por el propio oficialismo. 

viernes, 19 de abril de 2019

Tendencias nacionales en abril (2)

Con cada mes que pasa, el mix de aceleración inflacionaria (ver al lado la tasa de inflación reportada por el Indec comparada con la proporción de electores argentinos que menciona a ese como el principal problema del país, según Ipsos; click para agrandar) y recesión profundiza el malestar socioeconómico, principal efecto de la gestión Cambiemos. Esto mina las chances electorales del oficialismo y consolida las de la principal alternativa opositora (ver datos abajo; click para agrandar). Así, las chances de victoria de CFK se ubican 4 puntos porcentuales por encima de las de Mauricio Macri (44% a 40%, según RTD; ver datos abajo, click para agradar), mientras que tomando el promedio que venimos actualizando en este blog de las encuestas realizadas entre marzo y abril la distancia entre la ex presidenta y el actual presidente se ubica en 6,3 pp. Un resultado similar surge del último informe de Torino Economics, que estimó una ventaja a favor de Cristina Fernández de 7 puntos porcentuales. La firma obtuvo ese guarismo al ponderar los resultados de las encuestas disponibles y corregir los datos en dos niveles: 1) por sesgo (qué tan favorables o no han sido los sondeos anteriores de las encuestadoras con el gobierno de turno) 2) por precisión (qué tan cerca estuvieron de predecir los resultados reales pasados).  



Con matices en los porcentajes, todas las encuestas recientes muestran a CFK por encima de Macri. En el posteo anterior citamos los datos de la consultora Synopsis. Otras de las mediciones conocidas en esta semanas fue la realizada por Rouvier & Asociados: según un sondeo realizado entre el 1 y 7 de abril pasados sobre una muestra nacional de 1.200 casos con un margen de error de +/- 2,8%, en un escenario de primera vuelta con Roberto Lavagna y Sergio Massa compitiendo por separado, Cristina Fernández puntea con 33,4% de intención de voto, seguida de Macri con 24,9%. La distancia entre ambos es de 8,5 pp y estadísticamente significativa, dejando atrás el empate técnico que veímos en otras mediciones (ver datos abajo; click para agrandar). Aun corriendo por detrás, Macri lograría el pase a ballotage, dado que Lavagna apenas alcanza 12% y una brecha de apenas 3,3 pp sobre Massa (una diferencia estadísticamente no significativa). 



Por su parte, el consultor Raúl Aragón hizo una medición de PASO (Primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias) sobre una muestra de 2.500 casos nacionales recolectados del 28 de marzo al 9 de abril, con un margen de error de +/- 1,9%. Aunque con un porcentaje menor, confirma a CFK en punta (28,5%) y a Macri segundo (23%). La brecha a favor de la ex presidenta sobre Macri es de 5,5 pp, estadísticamente significativa para el error reportado por la consultora. En la "interna" de Alternativa Federal (AF), al revés de lo que veíamos en el estudio de Rouvier, en este caso aparece adelante Massa (11,6%), escoltado Lavagna (9,5%) y Urtubey (9,3%). Individualmente, ninguna de las tres figuras de AF tiene chances de entrar al ballotage: aunque la suma lineal de ellos alcanza 30,4%, parte de ese caudal podría diluirse en la primera vuelta se si acelera una polarización CFK vs Macri. 



El Centro de Estudios de Opinión Pública (CEOP), consultora dirigida por Roberto Bacman, también relevó un escenario de PASO. Sobre una muestra nacional de  1.111 personas (proporcionada por edad, sexo y nivel socioeconómico) encuestada de manera telefónica, CFK encabeza la intención de voto de cara a las primarias: 36,1% vs 27,5% de Macri, una brecha de 8,6 pp estadísticamente significativa. El tercer lugar aparece disputado entre Lavagna (9,6%) y Massa (8,3%); la diferencia de 0,7 pp entre ambos no es estadísticamente significativa. Nuevamente, las figuras de Alternativa Federal aparecen muy lejos de la disputa por la primera minoría electoral, acotada a CFK y Macri; aunque se sume linealmente su intención de voto (17,9%), Lavagna y Massa quedan 9,6 pp detrás del presidente. Así, actualizando el promedio de encuestas nacionales entre marzo y abril, tenemos 34,1% para CFK y 27,8% para Macri. 



lunes, 15 de abril de 2019

Resultados en Entre Ríos, Córdoba y tendencias nacionales en abril (1)

Con el 99,69% de las mesas escrutadas, el gobernador de Entre Ríos Gustavo Bordet obtuvo el 58,15% de los votos en las primarias de ayer y se impuso por casi 25 puntos porcentuales sobre el candidato de Cambiemos, Atilio Benedetti, que alcanzó el 33,65%. Otras cuatro fuerzas minoritarias se repartieron el casi 9% restante, con lo que se trata de otra elección distrital desfavorable para Cambiemos en el tránsito hacia las nacionales. Nuevamente, un oficialismo local supera el 50% de los votos (de las elecciones realizadas hasta ahora, sólo el reelecto gobernador neuquino tuvo una performance menor a ese umbral). Si bien se trata de una primaria, Bordet amaga con mejorar su elección anterior del 2015; esta vez logró una lista de unidad (PJ pcial+kirchnerismo+massismo). Hace 4 años, se impuso con el 43,70% , con Alfredo De Angeli a menos de 8 pp (36,06%) y con el massista Adrián Fuertes dividiendo el voto panperonista (15,8%).




Ayer también hubo elecciones 127 municipios cordobeses, la mayoría de ellos en manos de la UCR y el PRO. El adelanto implica que el 12 de mayo, cuando se vote gobernador y legisladores provinciales, la mayoría de los municipios serán los que están en manos de UPC, con lo cual habrá tracción electoral recíproca a favor del oficialismo. De esos 127 municipios, Hacemos por Córdoba/UPC recuperó 28 (se los arrebató a la UCR u otras fuerzas) y sólo perdió 1 de los que puso en juego, lo que preanuncia una ola a favor de Hacemos por Córdoba que incluso podría arrebatarle la ciudad capital a Cambiemos el 12 de mayo. Según un reciente estudio de la consultora Explanans realizado en la ciudad de Córdoba, Martín Llaryora aventaja a Luis Juez por casi 28% a 20% de intención de voto (ver datos arriba; click para agrandar). Según un estudio más reciente, de Gustavo Córdoba & Asociados, Llaryora llega a 38,2%, Juez al 17,2%, De Loredo al 17,1%, Riutort al 8,2% y Vilches al 5,1% (ver datos abajo; click para agrandar). En el promedio de 4 estudios publicados, el candidato de Hacemos por Córdoba ronda el 32%, contra 21% del candidato de Córdoba Cambia y 14% del candidato radical Rodrigo de Loredo.



Una clave de la elección será la tracción que ejerza el gobernador: en el estudio de Explanans, Juan Schiaretti llega a 43,4% de intención de voto, contra casi 16% del actual intendente Ramón Mestre y casi 11% de Mario Negri (ver datos abajo, click para agrandar); en tanto, en el promedio de mediciones publicadas, el gobernador alcanza 47% de intención de voto, con lo cual esa ventaja ha desplazado gran parte del interés de los analistas a la elección de intendente de Córdoba ciudad. 



A los reveses distritales que enfrenta Cambiemos en lo que va del calendario electoral 2019 se agrega la creciente ventaja de CFK en las encuestas nacionales. Según la medición más reciente de la consultora Synopsis, basada en una muestra de 2.372 casos recolectados entre el 4 y 6 de abril con un margen de error de +/- 2%, la ex presidenta cruzó el umbral del 35% de intención de voto. El estudia rota tres escenarios de primera vuelta, modificando en cada caso el precandidato de Alternativa Federal: 1) con Roberto Lavagna, 2) con Sergio Massa y 3) con Juan Manuel Urtubey. El escenario 1 da así: Cristina Fernández 35,9%, Mauricio Macri 28,8%, Roberto Lavagna 16,5% y Nicolás del Caño 3%. Completan "a otro candidato" 7,5% y 8,2% de indecisos. Aquí, la brecha a favor de CFK es de 7,1 pp, estadísticamente significativa (ver datos al inicio de posteo; click para agrandar). En el escenario 2, Cristina alcanza 37,5%, Macri 30,8%, Massa 10,7% y Nicolás del Caño 2%. Completan "a otro candidato" 11,7% y 7,3% de indecisos. La brecha es de 6,7 pp, estadísticamente significativa (ver datos abajo; click para agrandar)



En el escenario 3, Cristina alcanza 39,8%, Macri 31,2%, Urtubey 7,9% y Nicolás del Caño 2,4%. Completan "a otro candidato" 10,8% y 7,9% de indecisos. La brecha aquí es de 8,6 pp, estadísticamente significativa (ver datos abajo; click para agrandar). Vale decir que CFK alcanza un promedio de 37,7% de intención de voto, un guarismo que está en el orden de magnitud de lo obtenido por Daniel Scioli en la PASO de 2015 (38,67%), y lo mismo sucede con Macri, que alcanza un promedio de 30,26% (Cambiemos llegó al 30,12% en aquella elección). 




Los datos implican que, por primera vez en la serie evolutiva, CFK rompe el empate técnico con el actual presidente. Al mismo tiempo, considerando la preferencia por oficialismo vs oposición, Cambiemos está en el piso de la serie evolutiva de Synopsis (ver datos abajo; click para agrandar). Si sumamos este estudio para actualizar la serie de las últimas 17 mediciones nacionales, el promedio da 31,8% para CFK y 27,2% para Macri (ventaja de 4,6 pp); si acotamos el promedio a las 8 encuestas realizadas entre marzo y abril, la ex presidenta se estira hasta 34,7% y Macri 28,8%; la brecha de casi 6 pp sugiere que la distancia entre ambos se va agrandando. 



viernes, 12 de abril de 2019

Efectos socioeconómicos de la gestión Cambiemos: movilidad social descendente (1)



El nivel socioeconómico a fines de 2018 muestra una nueva caída de la clase media en el país: en los tres años de gestión de Cambiemos, 6 puntos porcentuales de la clase media cayeron a la baja. En comparación con el año 2015, la clase media (C3 en la nomenclatura de la Asociación Argentina de Marketing, AAM) se redujo del 30% al 25% a fines del 2018, mientras que la media alta (C2) cedió un punto, de 15% a 14%. Esos seis puntos porcentuales hicieron crecer a la clase media baja o baja superior (D1) del 31% que tenía en 2015 hasta un 37% al cierre del año pasado. En tanto, la clase alta (ABC1) se mantuvo en 5%. En ese marco, la sumatoria de las clases baja inferior y marginal (D2+E) pasó del 50% por ciento al 56%. Los datos surgen de amplias encuestas nacionales realizadas por la consultora Delfos de manera domiciliaria sobre muestras de 8.510 casos en 2015, 2016 y 2018 (con un error muestral de +-1,6%) y 5.990 casos en 2017 (+- 2,1%), respectivamente (ver datos arriba; click para agrandar). 




La robustez casuística de las muestras confiere significatividad estadística a la variación de 6 puntos porcentuales en sentido descendente respecto al 2015. La principal conclusión que se desprende de los relevamientos es que en estos tres años se profundizó el quiebre de la tendencia a la movilidad social ascendente que era visible hasta el 2015. Recordemos que la comparación entre el año 2006 (cuando la Asociación Argentina de Marketing renovó el índice de nivel socioeconómico, NSE) y el año 2015 arrojaba un neto crecimiento de la clase media y un descenso de la clase baja: ese evolutivo mostraba a la media típica (C3) creciendo del 24% que registraba en 2006 hasta el 30% a fines de 2015, mientras que la sumatoria de las clases baja y marginal (D2 + E) pasó del 24% por ciento en 2006 al 19% en 2015. 

Observando cómo evolucionó la clase alta top (ABC1), se aprecia que apenas varió en el mismo lapso (pasó del 6% en 2006 al 5% en 2015, y en 2018 se mantuvo en el mismo valor). A su turno, la media alta pasó del 14% en 2006 al 15% en 2015, guarismo que bajó al 14% en 2018, mientras que la clase media típica creció del 24% que registraba en 2006 hasta el 30%  a fines de 2015, pero en 2017 y 2018 retrocedió hasta el 25%. En ese marco, la media baja pasó del 32% en 2006 al 31% en 2015, pero en 2018 avanzó hasta el 37% (ver datos arriba; click para agrandar).  Esto implica que, luego de un período de 9 años en que la pirámide del NSE a nivel nacional mostró un proceso de movilidad social ascendente (con crecimiento de la clase media y reducción de la pobreza, es decir, menor polarización social relativa) el 2018 arrojó un descenso de los niveles medios hacia la clase baja superior. Eso muestra un deterioro relativo de la situación, aunque a tenor de estos datos todavía aún no se traduce en un crecimiento de los segmentos bajo inferior y marginal (que siguen en 19%, idéntico guarismo que en 2015). 

Considerando los datos de segmentación económica, la clase media estricta se corresponde con el segmento C3; así, hoy menos de tres de cada 10 argentinos (2,5) pertenecen a la clase media típica. Si se contemplan criterios sociológicos, la referencia se amplía: aunque el segmento C2 está por encima de la media típica por variables económicas y poder de consumo, tiene comportamientos similares a esa clase en términos sociales, educativos y socioculturales. Visto con ese matiz, la “clase media” abarcaría al 39% del total, pero viene en retroceso, ya que alcanzaba al 45% hasta el año 2015. Finalmente, si se considera también a la clase media baja, que sin ser clase media típica tiende a identificarse con ella (en rigor, la tiene como “aspiracional”), resultaría un acumulado del 76 por ciento, guarismo que casi coincide con el 80% de argentinos que se definen y sienten como de clase media (una autopercepción que excede las definiciones estrictas de estadística aplicada). 

miércoles, 10 de abril de 2019

Punto de inflexión al cierre del primer trimestre y dilemas de Alternativa Federal

En el posteo anterior planteábamos que al sumar la encuesta de Federico González a la serie previa (con reemplazo de la anterior del mismo consultor), el promedio con 16 encuestas nacionales quedaba en 31,5% para CFK y 27% para Macri, una brecha de 4,5 pp a favor de la ex presidenta. Sin embargo, si acotábamos la serie evolutiva a las últimas 10 mediciones (dejando atrás enero de 2019 para hacer foco en febrero-marzo), la media de Cristina Fernández es de 33% y la de Macri 27,4% , con lo cual la brecha se estira a 5,6 pp. Esto insinúa que sobre el cierre del primer trimestre del año se acentuó el desgaste oficialista y se consolidó Unidad Ciudadana como alternativa opositora, al punto de superar ya a Cambiemos en la mayoría de los sondeos (si bien por una diferencia que todavía es estadísticamente no significativa). Consistente con este dato, la consultora RTD en abril ya asigna mayor chance de victoria a la ex presidenta (46%) que a la reelección del presidente (42%); la probabilidad de una victoria del peronismo no K es de apenas el 12% (ver datos al lado; click para agrandar). Esto se corresponde con el escenario de polarización en el que coinciden la mayoría de las mediciones, dejando afuera a Alternativa Federal de la disputa por la primera minoría electoral. 



Asimismo, como venimos marcando, el problema de AF es la dispersión de su caudal entre varios precandidatos, sin que haya consenso en las mediciones respecto a que uno se despegue nítidamente de los demás. Según RTD, si se analiza la permeabilidad electoral de las figuras de ese espacio, Roberto Lavagna tiene un potencial electoral del 36% y Sergio Massa del 31%; esa diferencia de 5 puntos porcentuales no es estadísticamente significativa, por lo cual en principio Massa no tendría por qué bajarse de la PASO, como pretende Lavagna (para ser ungido como candidato único). En cambio, ambos sí se despegan claramente de Juan Urtubey (con un potencial máximo del 23%) y Miguel Pichetto (9%; ver datos arriba, click para agrandar).



Respecto a cómo la participación de Lavagna incide en el escenario, según la encuesta de Federico González que citamos en el posteo anterior, cuando el ex ministro está en la grilla alcanza 10,1% de intención de voto, vs 12,2% de Massa (empate técnico entre ambos). En ese escenario, CFK llega a 29,1% y Macri a 25,4%, una ventaja de 3,7 pp para la ex presidenta (aunque estadísticamente no significativa). Cuando Lavagna no compite, Massa sube a 14,2%, CFK a 30,6% y Macri a 26,2%; la brecha entre CFK y Macri crece a 4,4 pp, lo que insinúa que a la ex presidenta le conviene que el ex ministro no juegue, si bien la diferencia entre ambos escenarios sigue siendo estadísticamente no significativa (ver datos arriba; click para agrandar). 



Cuando se mide el escenario en el que CFK no compite, Massa sube a 14,3% y Lavagna a 12,1%, mientras que el kirchnerista más competitivo es Axel Kicillof (casi 12%). Con todo, la suma de Kicillof, Daniel Scioli y Felipe Solá queda a casi 9 pp de lo que medía la ex presidenta, lo cual pone en evidencia la dificultad para transferir el caudal de ella hacia figuras alternativas. Con el kirchnerismo en torno al 20% en lugar del 30%, Alternativa Federal gana competitividad: la suma de sus cuatro figuras alcanza 34,5% (ver datos arriba; click para agrandar). Este dato sería un motivo para que la ex presidenta confirme su participación; por otro lado, Massa y Lavagna siguen en empate técnico, con lo cual no se resuelve el dilema central de ese espacio. 

lunes, 8 de abril de 2019

Resultados en Río Negro y tendencias nacionales a fines de marzo (4)


Con el 93,56% de las mesas escrutadas en Río Negro, Carreras (JSRN) conseguía ayer un 52,49% y Soria (FPV) un 35,08%. Tercero lejos quedó Cambiemos, con la radical Lorena Matzen (5,67%). Así, el resultado fue casi una réplica de la elección de 2015, cuando el gobernador Alberto Weretilneck alcanzó el 52,8% y el FPV 33,94%. La última encuesta que citamos en este blog tuvo una buena aproximación al resultado, pues daba 53,95% a JSRN (se desvió en apenas +1,46 pp), 32,90% al FPV (se desvió en apenas -1,14 pp) y 3,77% a Cambiemos (se desvió en -1,99 pp). El promedio "pulpo Paul" que ensayamos a falta de encuestas recientes estuvo lejos, dado que en el mismo incidieron elecciones primarias nacionales que, como conjeturamos, presentan tendencias y comportamientos distintos a la de gobernador (de hecho, la de 2017 se polarizó al punto que Weretilneck prefirió bajar la lista antes que salir tercero) y una encuesta cerrada varios meses antes del comicio. Una de las encuestas que no vimos antes del posteo también tenía una buena proyección del resultado (ver datos abajo; click para agrandar), mientras que el resultado lineal se quedaba un poco corto con la performance del oficialismo (ver datos más abajo; click para agrandar). Claramente, si hubiéramos podido incorporar estas mediciones recientes, el pálpito del pulpito hubiera sido más ajustado al resultado final. 



Así como dijimos que el voto a gobernador no es predictor de la tendencia nacional, también hay que se prudente al ponderar las repercusiones de cara a armado político-preelectoral en ciernes, con la PASO de agosto en el horizonte. Es un hecho que el FPV viene de dos elecciones (PASO y general 2017) en las que superó el 40% de los votos, y de hecho en esta elección de gobernador logró mejorar su performance respecto a la de 2015, si bien de forma magra (+1,14 pp). Esto sugiere que su caudal de cara a las PASO de este año puede estar, en el peor de los casos, en la zona entre el 35% y el 40%, y si la elección se polariza como sucedió en octubre de 2017 puede acercarse al 50%. Cambiemos viene de lograr un 32% en aquella elección, y en la de gobernador su candidata apenas rozó el 6%; de cara a la PASO presidencial es más probable que su caudal se acerque al 30%, pero la tendencia le resulta desfavorable. Para más datos, es la segunda elección provincial (luego de Neuquén) en la cual su lista queda tercera y lejos de la pelea mayor, por lo cual el gobierno nacional no tiene nada para festejar. En el caso de San Juan, su sello ni siquiera estuvo presente. 




Tampoco tiene el oficialismo motivos para festejar en el repaso de encuestas nacionales. Al estudio de Opinaia que vimos en un posteo reciente se agrega la última medición de Federico González y Asociados. Se trata de un relevamiento nacional sobre una muestra de 1.000 casos entre el 28 y 30 de marzo, con un margen de error de +/- 3,16%. Incluye cuatro escenarios de PASO, siempre con Sergio Massa y Mauricio Macri, pero en algunos de ellos sin CFK o sin Roberto Lavagna. En los escenarios con CFK, ella aventaja a Mauricio Macri por alrededor de 4 puntos porcentuales: 29,1% vs. 25,4%, es decir 3,7 pp en el escenario con mayor cantidad de precandidatos, y 30,6% vs. 26,2% con uno más acotado, es decir, 4,4 pp (ver datos al inicio del posteo, click para agrandar).




Como espacio, Unidad Ciudadana trepa al 32,4% y hasta 34,7%, según el caso (sumando CFK+Scioli). Así, la distancia entre UC y Cambiemos tiende ampliarse, al igual que vimos en las encuestas más recientes. Como espacio, Alternativa Federal supera a Macri, pero por sí solo ninguno de sus precandidatos se acerca al 20%, con lo cual es incierta la posibilidad de que AF pase al ballotage. En tanto, al analizar los escenarios sin CFK, se advierte que en caso de que no se presente CFK y en su lugar lo hiciera Axel Kicillof, el espacio k quedaría relegado a un tercer lugar, detrás de Alternativa Federal (primero) y Cambiemos (segundo), si bien por una diferencia estadísticamente no significativa respecto a este  (4 pp). Básicamente, AF depende no sólo de su ordenamiento interno (Lavagna se muestra reacio a competir en las PASO) sino también de la decisión de la ex presidenta respecto a si compite o no. De acuerdo al informe, si ella declinara participar, "Sergio Massa se posicionaría como el candidato con mayor probabilidad de enfrentar a Mauricio Macri en un balotaje, aventajando ligeramente a Roberto Lavagna (en caso de que éste decidiera presentarse)"En la misma línea, apunta que "Alternativa Federal se afianza como un espacio opositor competitivo, aunque aún no presenta un líder indiscutido, en la medida que Sergio Massa y Roberto Lavagna exhiben intenciones de voto parejas. En consonancia con lo anterior, cabe destacar que aunque Roberto Lavagna aparece ligeramente rezagado respecto de Sergio Massa (dos puntos por debajo) su candidatura confiere espesor y competitividad al espacio, especialmente en ausencia de CFK".



Si sumamos la encuesta de Federico González a la serie previa (con reemplazo de la anterior del mismo consultor), el promedio con 16 encuestas queda en 31,5% para CFK y 27% para Macri, una brecha de 4,5 pp. Si acotamos la serie evolutiva a las últimas 10 mediciones, la media de Cristina Fernández es de 33% y la de Macri 27,4% , con lo cual la brecha se estira a 5,6 pp. Este resultado es muy similar al que el consultor Hugo Haime reportaba ya a fines de febrero (ver datos abajo; click para agrandar), lo cual insinúa que sobre el cierre del primer trimestre del año se acentuó el desgaste oficialista y se consolidó Unidad Ciudadana como alternativa opositora, al punto de superar ya a Cambiemos en la mayoría de los sondeos (si bien por una diferencia que todavía es estadísticamente no significativa). 





viernes, 5 de abril de 2019

Palpitando Río Negro: el pulpo Paul entra en acción



Este domingo 7 de abril Chubut celebra elecciones primarias para gobernador (el domingo pasado fueron las de San Juan), mientras que Río Negro elige gobernador. Con una llamativa ausencia de encuestas publicadas (lo que, en el caso del segundo distrito mencionado, puede asociarse a limitaciones legales), echaremos mano a la figura literaria del pulpo Paul, aquel octópodo (ver datos arriba; click para agrandar) que fue empleado como oráculo para predecir los resultados de la selección alemana de fútbol en competiciones internacionales (la Eurocopa 2008 y el Mundial de Fútbol 2010, donde también fue empleado para predecir otros encuentros, con el notable palmarés de haber acertando los ocho cruces que se le propusieron). Por ello, más que "palpitando Río Negro", este posteo debería llamarse "pulpitando Río Negro", en homenaje al molusco. Sin embargo, antes de ejercer de oráculos, repasaremos un poco de información contextual de antecedente. 



El gobernador de Río Negro es Alberto Weretilneck, líder de Juntos Somos Río, quien fue electo vice de Carlos Soria, asesinado al mes de asumir por su esposa. El vice completó el mandato de Soria y en 2015, ya al frente de la boleta, ganó con el 52,8% frente al Miguel Pichetto, por entonces candidato del FPV (hoy, senador nacional y precandidato de Alternativa Federal). El gobernador aspiraba a ser reelecto, pero la Corte Suprema dictaminó a favor de quienes plantearon que ya había tenido dos mandatos y lo inhabilitó hace pocas semanas (el 22 de marzo pasado). De apuro, ungió como delfín a quien lo escoltaba como vice, Arabela Carreras. Así, uno de los ejes de la elección de este domingo es si Weretilneck ha logrado transferir su capital político a Carreras en este proceso accidentado. Es decir, en parte, la elección se trata de herencias políticas: Weretilneck como heredero de Soria en su primer mandato, y ahora Carreras como heredera del actual gobernador. 




El principal rival de JSRN es Martín Soria/FPV, intendente de General Roca, una de las ciudades de mayor peso electoral en esa provincia. Es hijo de Carlos Soria, lo que hace más interesante la disputa, dado que aquí también hay una herencia política en juego. La cercanía de Soria con CFK queda puesta en evidencia en el uso del sello FPV, una constante desde 2015. La hermana de Martín, María Emilia, ganó la elección legislativa de 2017 con un contundente 49,29%, frente al 32,02% de Cambiemos; en la primaria, el FPV había alcanzado 41,27% y Cambiemos 19,54%; al quedar tercero con 18,48%, JSRN bajó su lista en octubre, lo que polarizó y nacionalizó la elección. Ahora, en cambio, el oficialismo provincial vuelve a jugar fuerte para conservar el poder. 




Aunque no se han publicado encuestas recientes, en medios nacionales se han citado estudios realizados para el oficialismo que le dan una ventaja de 10 puntos porcentuales a Carreras sobre Soria, pero con más de un 15% de indecisos, lo que en principio plantea un escenario abierto. Una de las que circuló en redes sociales estira la ventaja a 21 puntos porcentuales (53,95% vs 32,90%; ver datos arriba, click para agrandar). En sentido contrario, un sondeo del encuestador Fernando Lanza de hace unos meses ubicaba al FPV con 44,6% de preferencias, escoltado por el oficialista JSRN con el 21%, Cambiemos con 8,4%, RÍO (de Magdalena Odarda, ahora aliada del FPV) 6,4%, en blanco 3,4% y no sabe/no contesta 14%. Ese estudio se basó en una muestra de 1.800 casos en Viedma, Cipolletti, General Roca y Bariloche, las cuatro principales ciudades rionegrinas. Lo que sí parece claro es que Cambiemos, al igual que en Neuquén, volvería a quedar relegado al tercer lugar, y que el gobierno nacional preferiría que esa posición distante de la pelea principal beneficie a Carreras del JSRN antes que enfrentar una victoria del aliado de CFK. A falta de encuestas recientes que nos permitan ajustar un pronóstico, el pulpo Paul que llevamos dentro plantea dos escenarios posibles: 1) un promedio de las dos últimas elecciones donde jugaron las tres fuerzas (aunque la segunda no es de gobernador, lo que claramente puede introducir un sesgo) arroja 37,6% para el FPV, 35,6% para JSRN y 16,4% para Cambiemos; es decir, empate técnico (la diferencia de 2 puntos porcentuales a favor de Soria no es estadísticamente significativa). En el segundo escenario, construimos una serie con las mismas dos elecciones pero le agregamos las dos encuestas mencionadas: en este caso, tenemos 38,2% para el FPV, 36,6% para JSRN y 11,2% para Cambiemos. Es decir, ventaja de 1,6 pp a favor de Soria. Nuevamente, un empate técnico, y es sabido que estos escenarios suelen esconder un triunfo oficialista (dada la ventaja sistémica con la que suelen contar los gobiernos provinciales). Veremos este domingo qué tal fue nuestro "púlpito". 

Efectos socioeconómicos de gestión y campaña electoral de cara a las PASO

Con frecuencia se plantea que Cambiemos tratará de hacer girar la campaña 2019 en torno a la "grieta" política para eludir los efectos socioeconómicos de su gestión, que vienen creando malestar. Se trata de un desafío no menor, dada la centralidad de esos temas en la agenda, como vimos en un posteo reciente acerca de los principales problemas percibidos por los electores argentinos según diversas encuestas nacionales. Para más datos, esos problemas (inflación, pobreza, desempleo) tiene un gran impacto en la situación doméstica y el metro cuadrado de los electores, afectando a la economía familiar: según una reciente encuesta de la consultora Delfos, realizada sobre una muestra provincial de 1.800 casos con un error muestral de +-2,3%, 1 de cada 3 cordobeses percibe de manera negativa su situación económica personal y familiar, en tanto que casi la mitad la califica como regular; es decir, apenas 16% la califica como buena, contra un malestar que en sus dos niveles de intensidad alcanza el 83% (ver datos al lado; click para agrandar). 



El evolutivo de este dato desde octubre de 2018 muestra que el optimismo se mantiene estancado por debajo del 20%, mientras que el pesimismo oscila en torno al 33% y el primer nivel de malestar (regular) llega a picos del 54% y a pisos del 49%, por lo que ronda el 52% como valor medio; en cualquier caso, el malestar total alcanza o rebasa el 80%. Cuando se analiza el mismo dato por niveles socioeconómicos, el deterioro también surge nítidamente: la respuesta "buena" no llega al 30% ni siquiera en la clase social más favorecida, la alta (en la cual el malestar acumulado trepa al 72%). En la media, el malestar acumulado alcanza el 82% (con menos del 20% de respuestas positivas), mientras que en la baja el malestar total llega a un tope del 92%, con menos del 10% de respuestas positivas (ver datos abajo; click para agrandar).  


Recordemos que hasta el turno electoral del 2017, la provincia de Córdoba acompañó con su voto a la lista de Cambiemos con guarismos de casi el 50% en la legislativa de medio término de ese año, con más del 50% en la primera vuelta presidencial del 2015 y con más del 70% en el ballotage del mismo año, por lo cual estos datos son clave. Otro problema para el oficialismo es el desplome de las expectativas: en Córdoba, 1 de cada 3 cordobeses espera un empeoramiento de su situación económica personal/familiar (dimensión micro), casi un 30% espera seguir igual (con inercia negativa de la situación percibida) y casi la misma proporción espera una mejoría: vale decir, la negatividad alcanza a 60% (ver datos abajo; click para agrandar).



El cruce por niveles socioeconómicos arroja que los matices por clase social son mínimos: en las tres clases (alta, baja y media) el optimismo es del 30% o menos, en tanto que el malestar en sus dos niveles oscila alrededor del 60% (ver datos abajo; click para agrandar).



Con apenas matices, a nivel nacional también se advierte que casi el 60% considera que la situación económica del país (dimensión macro) va a empeorar en los próximos meses, versus apenas el 17,3% que considera que va a ser mejor (ver datos abajo; click para agrandar), según la más reciente encuesta de la consultora Management & Fit.



La serie evolutiva a nivel país muestra que la percepción está muy cerca del pico de pesimismo registrado en noviembre pasado (ver datos abajo; click para agrandar). Según la consultora, “hay proporcionalmente más mujeres y más mayores de 40 años que consideran que la situación estará mejor. Mientras que los menores de 40 años y los de nivel educativo medio opinan en mayor proporción que estará peor”.



Management & Fit también indagó cómo creen los argentinos que estará la situación económica personal en los próximos meses y los guarismos obtenidos son similares a los de la anterior variable; apenas el 17,4% considera que estará mejor, contra casi el 49% que estima que estará peor. Sobre este punto, la consultora indicó que “hay proporcionalmente más mayores de 40 años y de nivel educativo medio que consideran que su situación económica estaría igual a los próximos meses”.


En síntesis, el análisis de datos de un distrito clave como Córdoba y de las tendencias a nivel país sugiere que la agenda económica será un tema muy difícil de eludir de la campaña electoral nacional. Si bien el gobierno nacional viene contando con un sistema de medios hegemónico que procura instalar una agenda que le resulte relativamente favorable (el más claro ejemplo es su cobertura del issue "corrrupción", recargada sobre el gobierno anterior) el metro cuadrado de los electores cada vez se desplaza más hacia la agenda socioeconómica, con lo que se va neutralizando cada vez más esa cobertura mediática sesgada. Recordemos un hallazgo ya clásico de la teoría de la comunicación: la capacidad de influir de los medios varía en forma inversa a la centralidad de los temas tratados. "Cuanto menor es la experiencia directa que tiene la gente sobre una determinada área temática, más depende de los media para obtener las informaciones y los marcos de interpretación correspondientes a esa área. La gente no tiene necesidad de los mass media para enterarse del aumento de los precios. Estas condiciones, cuando existen, invaden la vida cotidiana de las personas" (Zucker). La experiencia directa, vivida y personal de un problema basta para que este resulte significativo, independientemente de la influencia cognoscitiva de los medios. En ese marco, es muy probable que el oficialismo deba prever una estrategia discursiva que incorpore estos "issues" del metro cuadrado, asignándoles una funcionalidad en su eje general de polarizar con el gobierno anterior. 

miércoles, 3 de abril de 2019

Tendencias nacionales a fines de marzo (3)

El último estudio de la consultora Opinaia se suma a la serie de los que vienen mostrando una creciente ventaja de CFK sobre un Mauricio Macri amesetado. Sobre la base de una muestra de 3.102 casos nacionales relevados entre el 6 y el 14 de marzo, con un margen de error de +/-1,8%, la encuesta ubica a la ex presidenta/Unidad Ciudadana con 33% de intención de voto, al presidente/Cambiemos con 28%, a Sergio Massa/Alternativa Federal con 9%, a Nicolás del Caño/Frente de Izquierda con 6% y a José Espert/Partido Libertario con 4%; 2 de cada 10 electores, en tanto, se muestran indecisos (ver datos al lado; click para agrandar). La diferencia de 5 puntos porcentuales entre CFK y Macri es estadísticamente no significativa, pero analizando la serie de estudios vemos que la brecha se va estirando para ubicarse linealmente por encima del error muestral (que en este caso es apenas inferior al 2%). La tendencia sigue sugiriendo un ballotage entre Unidad Ciudadana y Cambiemos, dado que Alternativa Federal, con Massa como candidato, no llega al 10% y queda lejos de la disputa por la primera minoría electoral. 


La tendencia no varía de manera estadísticamente significativa cuando se incluye a Roberto Lavagna en lugar de Massa: CFK cede 1 pp, Macri se mantiene y el ex ministro logra 3 pp más que el líder del Frente Renovador (11% vs 8%). Tampoco se altera la proporción de indecisos (ver datos arriba; click para agrandar). Cuando se mide a Urtubey, hay un sutil desplazamiento: CFK sube 1 pp, Macri se mantiene y el gobernador salteño tiene una performance más débil (6%; ver datos abajo, click para agrandar) que Massa (9%) y Lavagna (11%). Esto confirma que es el menos competitivo de las tres figuras de ese espacio, como señalan la mayoría de las encuestas revisadas hasta ahora (con excepción de las de Gustavo Córdoba & Asociados). La diferencia de 3 pp entre Lavagna y Massa no es estadísticamente significativa, como tampoco lo es la de 3 pp entre el tigrense y el salteño, pero sí hay una recurrencia en los estudios de ubicar al gobernador de Salta como el de menor intención de voto relativa. 


En esa línea, el informe destaca que "en distintos escenarios de primera vuelta se impone Cristina Kirchner con una intención de voto cercana a los 32-34 puntos. La candidatura de Mauricio Macri queda en segundo lugar con el 28%. El espacio peronista no kirchnerista se ubica tercero, con distinta performance según el candidato. Comparativamente, Roberto Lavagna es el que mejor se ubica, aunque por escaso margen por sobre Sergio Massa". De cara al ballotage, hay una leve ventaja estadísticamente no significativa de CFK sobre Macri sin proyección de indecisos (43% a 40%), que se revierte al proyectarlos (49% a 51%), aunque manteniendo el escenario de empate técnico (ver datos debajo; click para agrandar). Como venimos apuntando, las proyecciones de la segunda vuelta se ajustan mejor cuando se conoce el resultado de la primera ronda, dado que la diferencia en esa instancia permite trazar hipótesis sobre la reversibilidad o no del resultado de cara al ballotage. 



Si sumamos esta medición a la serie anterior, el promedio da 31,3% para CFK y 27,2% para Macri, una brecha de 4,1 pp. Sin embargo, si recortamos la serie para incluir sólo las 10 encuestas más recientes, la ex presidenta trepa a 32,2% mientras que el presidente se estanca en 27%, de lo que resulta una brecha de 5,2 pp que va haciéndose cada vez más nítida, aunque todavía no rompe el escenario de empate técnico. Sobre 6 mediciones, en tanto, el promedio que elabora Proyección Ciudadana arroja 32,06% para CFK y 26,38% para Macri (ver datos abajo; click para agrandar); como se advierte, las diferencias son mínimas, y en cualquier caso la ex presidenta supera el umbral del 30%, mientras que Macri lo perfora.