lunes, 28 de marzo de 2022

Qué dicen los argentinos sobre la guerra entre Rusia y Ucrania (nota publicada en CBA24N)

La opinión en torno al conflicto bélico tiene matices. Por ejemplo, entre votantes FDT y de la izquierda la mirada negativa dista de la de los votantes de Juntos por el Cambio y la derecha.


El conflicto entre Rusia y Ucrania que comenzó en 2014 escaló a fines de febrero pasado en una operación bélica de gran magnitud. A un mes de la invasión rusa, ¿Cómo ve la opinión pública argentina el conflicto? Según la última encuesta nacional de Ricardo Rouvier & Asociados, casi 79% de los electores está en desacuerdo con la acción militar rusa, mientras que 10,5% está de acuerdo; casi 8% se muestra neutro (gráfico arriba). A su turno, un estudio reciente de consultora Synopsis muestra mayores matices respecto al tema: 65,2% de los adultos argentinos califica de manera negativa la invasión rusa, mientras que 5,6% tiene una opinión regular. Al contrario, 23,1% valora la avanzada militar de manera positiva (gráfico abajo). 

Profundizando el análisis, se advierten matices importantes en algunas variables: entre los hombres, 68% califica de manera negativa la acción rusa, pero 32% opina de manera favorable, mientras que en las mujeres la condena trepa al 73% vs apenas 16% de acompañamiento. También se perfila una “grieta política”: entre votantes del Frente de Todos (FDT) y de la izquierda la opinión negativa ronda entre el 24% y el 40%, respectivamente, mientras que el apoyo se ubica entre 53% y 29%. En sentido contrario, entre los votantes de Juntos por el Cambio (JXC) y la derecha la calificación negativa ronda entre el 95% y el 87%. 

Esos matices también aparecen cuando se indaga la orientación de la política exterior de nuestro país. Según una reciente encuesta de Opinaia, 44% de los electores argentinos cree que nuestro país debe llevarse mejor con Estados Unidos y la Unión Europea, mientras que 22% se inclina por China y Rusia, en tanto que un 16% prefiere estrechar lazos regionales con países latinoamericanos y casi la misma proporción no sabe (gráfico arriba). Según Opinaia, 2 de cada 3 votantes de JXC se inclinan por EE.UU y la UE, el mismo patrón que los libertarios (64%). En sentido contrario, esa posición resulta minoritaria entre votantes del FDT, que dividen sus preferencias entre China y Rusia (35%) y Latinoamérica (24%). Los electores de izquierda presentan mayor dispersión, pues sus preferencias se reparten entre esas tres posiciones sin que ninguna llegue a un tercio de la distribución. 



La última encuesta de Zuban Córdoba & Asociados también ilustra los matices entre las dos principales fuerzas: mientras casi 80% de los votantes de Mauricio Macri cree que la diplomacia argentina debe alinearse con EE.UU. y el resto de Occidente (gráfico arriba), el 55,5% de los electores de Alberto Fernández se pronuncia en favor de la neutralidad (gráfico abajo). 



A su turno, Rouvier hace una aproximación alternativa (sin respuestas excluyentes) al tema: casi 48% prefiere que Argentina tenga una relación cercana con EE.UU, 9 puntos porcentuales más que quienes plantean cercanía con China (gráfico abajo). 

Finalmente, 75,2% opina que Argentina debe tener una relación cercana con Europa, vs apenas 16% que piensa lo mismo respecto a Rusia (gráfico abajo). En síntesis, una primera conclusión sobre las percepciones de la opinión pública argentina en relación al actual conflicto es que la acción militar rusa recibe una calificación negativa y desacuerdo mayoritarios. Sin embargo, al profundizar el análisis se advierten matices en función de algunas variables sociodemográficas (como el sexo) y en particular según voto anterior, ya que hay sintonía de opiniones entre los votantes de JXC y los libertarios por un lado, mientras que por el otro los electores del FDT y de la izquierda muestran relativa cercanía en algunos puntos de la agenda internacional en debate y no tanto en otros.


Lo que dicen las encuestas sobre la "guerra a la inflación" (entrevista radial en Córdoba Primero por FM Gen)


https://anchor.fm/cordobaprimero/embed/episodes/Lo-que-dicen-las-encuestas-sobre-La-guerra-a-la-inflacin-e1gccmo

lunes, 21 de marzo de 2022

Acuerdo con el FMI en el Senado según las encuestas (entrevista radial en Córdoba Primero)


https://anchor.fm/cordobaprimero/embed/episodes/Acuerdo-con-el-FMI-en-el-Senado--segn-las-encuestas-e1g1j6o

Qué dicen las encuestas sobre la "guerra a la inflación" (nota publicada en CBA24N)


A casi dos años de aquel 19 de marzo en el que Alberto Fernández anunció el comienzo del aislamiento social, preventivo y obligatorio (ASPO) contra el Covid-19, la semana pasada el presidente anunció el comienzo de una “guerra contra la inflación” como parte de una potencial agenda pos pandemia. Sin dudas, el aumento sistemático de precios es uno de los principales problemas de la economía argentina; como puede apreciarse en el gráfico de arriba, luego de la crisis de 2002 sólo durante dos años de la gestión de Néstor Kirchner (2003-2004) la inflación anual estuvo por debajo del 10%; desde 2005 superó los dos dígitos, y a lo largo de los dos mandatos de Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015) osciló entre pisos del 15% (2009) y techos apenas por debajo del 40% (2014), con un promedio entre el 25% y el 30%. Aun peor fue el desempeño de Mauricio Macri (2015-2019), con un registro piso en torno al 25% (2017) y un techo de casi 55% (2019). En el primer bienio de Alberto Fernández, pandemia mediante, la inflación rondó el 35% en 2020 y cerró en casi 51% en 2021, lo que implica que al menos desde 2018 el país arrastra una inercia inflacionaria que ubica al aumento de precios anual en una franja entre el 35% y el 50%. 


En ese marco, no sorprende que la inflación esté al tope de las preocupaciones de la opinión pública. Según una encuesta reciente de la consultora Synopsis, ocupa casi 49% de las menciones en el electorado general y trepa al 69,4% entre los electores del Frente de Todos (FDT) en 2021 (gráfico arriba). Cuando la pregunta acerca de los problemas percibidos no se hace de manera excluyente sino que admite varias respuestas, como sucede en un estudio reciente de la consultora D`Alessio/IROL, la incidencia de la inflación roza el 90%, con matices menores entre los electores del FDT (86%) y los de Juntos por el Cambio (JXC, 93%), confirmando que es un problema cuya importancia resulta transversal a la “grieta” política (gráfica abajo). 

A su turno, la última encuesta de Clivajes realizada en Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y provincia de Buenos Aires (PBA, dos distritos que suman 45% de los electores del país) confirma la prioridad del problema en la agenda social, dado que casi 40% de los votantes de ese conglomerado ubica a la inflación al tope de las preocupaciones. Sus menciones más que duplican al segundo de la lista (desempleo, con 17,5%) y más que triplican a tercero (pobreza, con casi 16%; gráfico abajo). 

Consistente con eso, la última encuesta de Consultora Circuitos en PBA también ubica al aumento de precios como el problema más mencionado (31,4%), muy por encima de su escolta (corrupción, con casi 22%; gráfico abajo). 

En este marco, una primera conclusión que deviene evidente es que la frase presidencial coincide con la opinión pública en términos de diagnóstico de problemas prioritarios. Sin embargo, el desafío que enfrenta el gobierno es que se le hace cuesta arriba revertir la percepción de una baja eficacia de la estrategia de control de precios, que recibe un acompañamiento de apenas 10,1% de los electores, mientras que casi 79% cree que no hay eficacia en esa materia, según el último estudio de Rouvier & Asociados (gráfico abajo). 

Profundizando en el análisis, el mismo estudio arroja que la expectativa de reducción de la inflación viene en caída desde febrero de 2020, el mes inmediato anterior a la llegada de la pandemia al país y el único de la serie histórica con un optimismo cercano al pesimismo. Desde entonces, la confianza en una baja de la inflación se desplomó, llegando a un piso del 17,5% en la última encuesta, contra un escepticismo de 75% (gráfico abajo). 

En la misma línea, la última encuesta de consultora Analogías detectó que apenas 15,6% cree que durante el resto del año se podrá ir reduciendo mucho o bastante la inflación, contra 77,3% que opina que se reducirá poco o nada (gráfico abajo).

En síntesis, el Gobierno nacional enfrenta claramente un problema de expectativas negativas en la materia, agudizadas por una inercia inflacionaria elevada que va camino a cumplir cuatro años. Además, por si fuera poco, la pandemia del Covid-19 primero y la escalada bélica entre Rusia y Ucrania después han contribuido a acelerar el aumento de precios a nivel global, con lo cual a los componentes endógenos del problema se agregan los factores exógenos.

lunes, 14 de marzo de 2022

Qué dicen las encuestas sobre el acuerdo con el FMI en el Senado (nota publicada en CBA24N)

En la nota anterior sobre este tema repasamos encuestas recientes sobre el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para renegociar las condiciones de pago de la deuda contraída por la gestión Cambiemos en 2018. Dado que dentro de una semana (el 22 de marzo) es la fecha tope para pagar U$S 2.800 millones, Argentina necesita el desembolso del Fondo para afrontar ese vencimiento, por lo que el Gobierno nacional aspira a que el proyecto que tiene media sanción de la Cámara de diputados nacionales pueda tratarse sobre tablas el próximo jueves. Además de los estudios repasados la semana pasada, se añadieron otras mediciones: según una encuesta nacional de la consultora Aresco, 61,2% de los electores cree que el acuerdo era necesario ya que el default hubiera generado más perjuicios; apenas 14% cree que era mejor no acordar, y casi 25% no sabe (gráfico arriba). Consistente con ese dato, un estudio del consultor Federico González arrojó que 62,4% de los adultos opina que un rechazo del acuerdo podría empeorar la economía argentina, en tanto que apenas 14,4% cree que podría mejorarla; 23,2% ns/nc (gráfico abajo). 

En esa línea, 2 de cada 3 electores (66,6%) opinó que el Congreso debe aprobar el acuerdo aunque eso implique pagarle al FMI, vs 33,4% que prefiere rechazar el acuerdo aunque eso implique un default económico de consecuencias imprevisibles (gráfico abajo). 

Con una contundencia mayoritaria, aunque algo menor que el consenso que surge de la variable anterior, en un eventual plebiscito sobre el acuerdo 57,2% de los electores votaría a favor, casi duplicando a los que se pronunciarían en contra (29,2%); casi 14% no iría a votar (gráfico abajo). 

Profundizando en el análisis, Aresco indagó cómo debería votar la oposición en el Congreso: casi 55% opinó que debe hacerlo a favor del acuerdo, vs 17,4% que dijo que debe votar en contra; casi 28% ns/nc (gráfico abajo). 

En ese marco, se puede evaluar que el voto favorable de la principal fuerza opositora, Juntos por el Cambio (JXC, con la excepción de Ricardo López Murphy) estuvo en sintonía con el consenso mayoritario de la opinión pública. Por otro lado, la consultora Analía del Franco abordó las percepciones respecto a la postura de La Cámpora: 51,3% opinó que ese sector del Frente de Todos (FDT) debería aceptar el acuerdo vs casi 17% que opinó en sentido contrario; 32,1% ns/nc. En cuanto a las expectativas de cómo votarían esos referentes, casi 37% esperaba que se pronunciaran a favor, mientras que 30% auguraba en contra; 1 de cada 3 ns/nc (gráfico abajo). Así, el voto de esa facción, que se dividió entre abstenciones y votos negativos, resultó a contrapelo de lo esperado y demandado por la opinión pública a tenor de ese estudio. 

En este orden, dado el resultado favorable en la Cámara Baja, más allá de lo que arroje en estos días la “rosca” política se puede plantear que el Senado tiene poco espacio para ir en contra de la corriente consensual de la opinión pública, que en cuatro encuestas recientes (tres nacionales y una realizada en Ciudad Autónoma de Buenos Aires y Provincia de Buenos Aires) se inclina por un acuerdo en un promedio de 63,1% vs 23,9% que se muestra en contra (13,1% ns/nc). Con todo, las opiniones respecto al impacto macro del entendimiento están divididas: según el más reciente estudio de Taquión, 23% cree que el acuerdo terminará beneficiando al país, vs casi 41% que piensa que lo perjudicará; 36% no tiene opinión formada (gráfico abajo). 

En cambio, según la encuesta de Federico González casi 44% cree que el aval del acuerdo podría mejorar la economía argentina, vs casi 27% que opina que podría empeorar; 29,3% piensa que podría quedar igual (gráfico abajo).  

Así, se concluye que hay un consenso ampliamente mayoritario (superior al 60%) respecto a la necesidad del acuerdo, pero que las opiniones en cuanto a su impacto macroeconómico se dividen en tres tercios: 33,5% se muestra optimista, 33,9% pesimista y 32,7% no sabe o no tiene opinión formada. Así, se puede evaluar que el entendimiento tiene más consenso por lo que evita (un default) que por la certezas de mejora que puede aportar. 

lunes, 7 de marzo de 2022

Acuerdo con el FMI: puntos de consenso vs puntos de disenso según las encuestas (nota publicada en CBA24N)

En notas anteriores de este espacio hemos repasado las tendencias que miden las encuestas respecto al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para renegociar las condiciones de pago de la deuda contraída por la gestión Cambiemos en 2018. Con el texto ya listo para el debate y posterior la votación en el Congreso, se impone actualizar los últimos datos de opinión pública sobre el tema, deslindando aquellos puntos en los que surge un consenso de los que arrojan matices u opiniones divididas. Según una reciente encuesta de Ricardo Rouvier & Asociados, casi 7 de cada 10 electores (69,2%) califica de favorable el principio de entendimiento con el organismo, mientras que casi 22% piensa que es desfavorable; 9,1% no sabe (gráfico arriba). Asimismo, 63,2% de los electores está de acuerdo con el pago al FMI, vs casi 27% que se muestra en desacuerdo; 10,1% no sabe (gráfico abajo). 

Consistente con estas tendencias, la última encuesta realizada por la consultora Clivajes en Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y provincia de Buenos Aires (PBA), el 61,3% de los electores de ese conglomerado distrital (que agrupa al 45% de los votantes de todo el país) se pronuncia a favor de realizar un acuerdo con el FMI, mientras que 21,4% se muestra en contra; 17,3% ns/nc (gráfico abajo). 



Así, se concluye que en esas esas dos variables hay consensos ampliamente mayoritarios, que se ubican entre el umbral del 60% y el 70% de acompañamiento en el sentido de que la deuda tiene que ser renegociada para acordar condiciones de repago. Sin embargo, esto no quiere decir que en este tema complejo no haya también espacios de disenso. Un punto clave que divide opiniones es el impacto del acuerdo con el Fondo en el metro cuadrado de los electores. Según la encuesta más reciente de la consultora Giacobbe, las opiniones al respecto están muy divididas: 31,2% cree que resulta negativo para su vida cotidiana vs casi 19% que lo ve positivo, mientras que 24,4% no percibe ningún impacto y casi 26% no sabe (gráfico abajo). 

El mismo escepticismo en cuanto al impacto del acuerdo con el FMI se percibe en la última encuesta realizada por la consultora Delfos en provincia de Córdoba, si bien en este caso se indaga en la variable macroeconómica. Para 3 de cada 10 electores cordobeses (33%) la firma del entendimiento hará que empeore la economía argentina, mientras que 31% piensa que seguirá igual que ahora; apenas 14% cree que firmar el acuerdo permitirá que el país deje atrás la crisis, propiciando una mejora de la economía, y 22% ns/nc (gráfico abajo). 

Comparando esas percepciones actuales con las que generó el acuerdo firmado por la gestión Cambiemos en 2018, hoy se insinúa un optimismo levemente menor (por una diferencia estadísticamente no significativa de 4 puntos porcentuales, de 18% a 14%) y un pesimismo sensiblemente menor (17 pp, de 50% a 33%); lo que más crece es la expectativa de continuidad (23 pp, de 8% a 31%) y el ns/nc aparece estable (pasa de 24% a 22%, una variación estadísticamente no significativa). En síntesis, el análisis comparado de datos de las últimas encuestas arroja consensos mayoritarios respecto a la necesidad de acordar el pago de la deuda con el FMI, pero las opiniones en cuanto a su impacto en términos macroeconómicos y microeconómicos están muy divididas, con casi un tercio de pesimismo y alrededor de 1 de cada 4 opiniones atravesada por la incertidumbre.  

martes, 1 de marzo de 2022

Discurso de apertura de sesiones y expectativas económicas en las encuestas (nota publicada en CBA24N)


En su discurso de apertura de sesiones legislativas al inicio de marzo, el presidente Alberto Fernández destacó: "La economía asistió a un fin de año de 2021 exhibiendo una profunda recuperación del 10,3% del Producto Bruto Interno, muy superior a la esperada. Esa recuperación nos permitió revertir la caída generada por la pandemia en 2020". En cuanto a la situación laboral, apuntó: "El empleo formal se viene recuperando mes a mes desde fines de 2020 (…) La tasa de desocupación fue del 8,2% en el tercer trimestre de 2021, la menor en más de tres años. En 2021, alrededor de unas 175 mil personas lograron incorporarse al empleo asalariado registrado en empresas privadas”. Sin embargo, esos datos, ratificado por las estadísticas oficiales de actividad en diversos sectores, se traducen de manera muy diferencial en las percepciones que relevan las últimas encuestas. Según el estudio nacional más reciente de consultora Analogías, apenas 12,2% cree que la economía y los ingresos se están recuperando “mucho o bastante”, mientras que casi 82% cree que se recuperan “poco o nada”; 6,2% no sabe (gráfico arriba). 

Cuando se miden las expectativas socioeconómicas para este año, queda claro cómo “la grieta” las atraviesa: según un estudio nacional reciente de las consultoras GOP y Trespuntozero, entre los electores que votaron al Frente de Todos (FDT) en octubre de 2019 las opiniones están divididas entre 44,5% que cree que la economía crecerá “mucho o bastante” en 2022 vs 46,1% que opina que crecerá “poco o nada”; en cambio, entre quienes se inclinaron por Mauricio Macri el pesimismo se impone con casi 93% (gráfico arriba). Profundizando en el análisis de variables, cuando se indagan las expectativas en materia de empleo casi 1 de cada 4 electores (24%) cree que este año se va a recuperar “mucho o bastante”, mientras que 71,1% cree que lo hará “poco o nada”; la clase media se muestra aún más escéptica al respecto (gráfico abajo). 

Para más datos, el último estudio cualitativo conjunto de las mismas consultoras (realizado a través de grupos focales) arroja que la inflación permea el malestar socioeconómico de manera transversal a la grieta y que el acuerdo que se está negociando con el Fondo Monetario Internacional profundiza el pesimismo, aun entre quienes lo apoyan (gráfico abajo).  

Consistente con esos datos, la encuesta más reciente de consultora Circuitos en provincia de Buenos Aires (el distrito de mayor peso en el electorado nacional, con 37% del padrón) muestra que casi 19% espera una mejora de su situación económica en los próximos meses, la misma proporción cree que se mantendrá igual, casi 54% espera un empeoramiento y 8,6% dice que aún no lo sabe (gráfico abajo). 

En la misma línea, un reciente estudio nacional de consultora Taquión arroja que apenas 22,2% de los electores siente seguridad, confianza o esperanza sobre el futuro, mientras que casi 54% siente preocupación, desconfianza o miedo; casi 24% responde “incertidumbre” (gráfico abajo). Así, del análisis comparado de todos estos estudios surge que la mejoría de la actividad económica durante 2021 no llegó a traducirse al metro cuadrado de los electores, lo cual generó expectativas socioeconómicas pesimistas para este año. Así, el desafío del gobierno nacional en 2022 no pasa sólo por sostener la recuperación sino por lograr que esta sea percibida por las mayorías e impregne el estado de ánimo, a efectos de revertir el escepticismo.



Llegó el Día D: D360 1-03-2022. Las tendencias de los últimos 30 días, en 30 páginas y 10 datos clave para suscriptores.


 

Informe para suscriptores.