Concepto acuñado por el filósofo inglés Joseph Glanvill, el clima de opinión nos rodea. Existen ciencias para medirlo, pero también hay lugar para lo inesperado, tal como el aleteo de una mariposa en Pekín puede desatar un huracán en México que contraríe el pronóstico del tiempo. Este blog de tendencias de opinión pública e influencia social pretende aportar elementos al "sensor cuasiestadístico" con que sondeamos el ambiente y ser un foro para intercambiar puntos de vista.
jueves, 4 de septiembre de 2025
lunes, 1 de septiembre de 2025
viernes, 29 de agosto de 2025
A dos meses de las elecciones, qué impacto puede tener el "Coimas Gate" (nota publicada en CBA24N)
A 2 meses de las elecciones de octubre, el gobierno nacional atraviesa una nueva crisis: la filtración de audios de la semana pasada expandió sus efectos sobre el cierre de agosto. ¿Qué impacto puede tener, según las encuestas nacionales que midieron mientras el “Coimas Gate” copó la agenda? Proyección Consultores hizo foco en los electores que votaron a La Libertad Avanza (LLA) en el ballotage de 2023: casi 65% dijo que seguiría votando a los candidatos libertarios más allá de esos hechos, 12,1% cambiaría su voto para inclinarse por listas opositoras y 23,2% se mostró indeciso (gráfico arriba). Considerando que Milei fue electo con 55,6% de los sufragios una retención del 64,7% se traduciría en casi 36% de intención de voto para LLA de cara a octubre.
Según la Consultora Trespuntozero, el “efecto Spagnuolo” tiene un fuerte impacto potencial: casi 38% mantiene su intención de voto para LLA, pero 15,3% cambiaría; por otro lado, casi 44% nunca votó por el sello libertario, lo que se corresponde con el caudal obtenido por Unión por la Patria (44,4%) en el ballotage de 2023 (gráfico arriba). Al igual que en la medición de Proyección, el oficialismo perforaría el umbral del 40% de los votos.
El panorama para LLA se complica si se considera la hipótesis de un efecto desmovilizador (plausible, dados los antecedentes de baja concurrencia en los comicios realizados hasta ahora). Proyectando intención de voto sólo entre quienes están seguros de asistir, Fuerza Patria roza el 43% y aventaja a LLA+PRO (casi 40%) por 3,2 puntos porcentuales (gráfico arriba). Se trata de una brecha estadísticamente no significativa dado el error muestral de +/-2,8%, pero el empate técnico ya es una señal de alerta para el oficialismo.
En la misma línea, consultora Zentrix reportó casi 37% de intención de voto para Fuerza Patria vs 34,5% para LLA+PRO (gráfico arriba). La brecha de 2,3 pp a favor de la principal lista opositora no resulta estadísticamente significativa dado el error muestral reportado (+/-3,06%), pero nuevamente el empate técnico es un escenario impensado para el oficialismo hace poco tiempo atrás.
Management & Fit no midió intención de voto en su último informe, pero estimó que un 16,2% podría modificarlo por el caso Coimas (gráfico arriba), un porcentaje superior al reportado por Trespuntozero sobre la misma base comparable (electorado total). La propensión a cambiar aumenta entre los varones, los menores de 40 años y votantes de nivel educativo bajo, lo que implica un potencial impacto perjudicial en la intención de voto de LLA. Por otro lado, casi 83% mantendría su intención de voto.
Consultora Trends detectó un impacto negativo en la gestión de Milei: el acuerdo con que su gobierno es corrupto creció de 46% a 51% (gráfico arriba). La suba de 5 pp está en el límite de la significatividad estadística dado el error muestral de +/-2,1%, pero ya perfila una mayoría adversa al oficialismo en esa materia.
Sin embargo, en intención de voto Trends reportó 44% para LLA vs 36,1% para Fuerza Patria (gráfico arriba), lo que arroja una brecha favorable al oficialismo de casi 8 pp, estadísticamente significativa y relativamente amplia, contra el empate técnico que vimos en los estudios de Trespuntozero y Zentrix.
Finalmente, según Atlas Intel (que midió a LLA y el PRO por separado), el oficialismo alcanza casi 40% de intención de voto vs 33,5% de Fuerza Patria (gráfico arriba). La ventaja a favor de LLA es de 6,3 pp, estadísticamente significativa dado el error muestral de +/-1%. En síntesis: 1) en las encuestas realizadas en los últimos 10 días, entre un 12% y un 18% de los electores podría cambiar su intención de voto por el caso Coimas 2) el oficialismo ronda entre el 35% y el 40% en cuatro de cinco mediciones, mientras que en una trepa al 44% 3) Fuerza Patria ronda entre el 34% y el 37% en tres mediciones, y trepa al 43% en una cuarta 4) esto sugiere mayor polarización y un panorama muy competitivo a 60 días de los comicios.
martes, 26 de agosto de 2025
viernes, 22 de agosto de 2025
Qué dicen las últimas encuestas sobre las tendencias electorales en Córdoba (nota publicada en CBA24N)
Antes del cierre de listas del pasado domingo 17 de agosto, circularon algunas encuestas provinciales que es oportuno repasar a la espera de las mediciones con candidatos definidos; varias ya anticipaban a los sellos (y en algunos casos a las figuras) que competirán por nueve bancas de diputados nacionales por Córdoba. Consultora Circuitos relevó del 5 al 8 de agosto de manera telefónica: reportó 34,3% para La Libertad Avanza (LLA), 20,4% para Juan Schiaretti (confirmado como cabeza de lista de Provincias Unidas, antes Hacemos por Córdoba) y casi 18% para Natalia De la Sota (cabeza de lista de Defendemos Córdoba). Fuera del podio, Liliana Olivero y Pablo Carro (confirmados al frente de la lista de la izquierda y de Fuerza Patria, respectivamente), rondaron el 5%, mientras que Ramón Mestre y Oscar Agost Carreño (confirmados como cabezas de lista de la UCR y del PRO, respectivamente) oscilaron entre 2% y 3% (gráfico arriba). La brecha de casi 14 pp a favor de LLA resulta estadísticamente significativa dado el error muestral de +/-2,3%, pero con 8,3% de indecisos y una grilla de candidatos no confirmada la competencia por el liderazgo quedaba abierta.
Federico González & Asociados (FGA) relevó de manera online del 9 al 12 de agosto: proyectó casi 35% para LLA, casi 24% para Schiaretti y 20,4% para De la Sota. Fuera del top 3, casi 6% para Fuerza Patria, casi 5% para Olivero, casi 4% para Mestre y 2,1% para Agost Carreño (gráfico arriba). En este caso, la brecha de 11 pp a favor de LLA resulta estadísticamente significativa dado un error muestral de +/-2,5%; al no haber indecisos, la posición de liderazgo parece nítida, mientras que hay un empate técnico por la posición de escolta entre Schiaretti y De la Sota.
Zuban Córdoba recolectó datos de manera mixta (60% domiciliaria, 15% online, 20% por e-mail y 5% teléfonica) del 8 al 12 de agosto: reportó casi 37% para Schiaretti, casi 29% para LLA y 8,1% para De la Sota. Fuera del podio, el kirchnerismo y el PRO rondaron el 4% (con figuras que finalmente no son cabezas de lista, como Coti San Pedro, o compiten con otro sello, como Héctor Baldassi). Mestre alcanzó 3,5%, mientras que Olivero y Aurelio García Elorrio rondaron el 2% (gráfico arriba). La ventaja de 8 pp a favor de Schiaretti está en el límite de la significatividad estadística, dado el error muestral de +/-3,46%, lo que deja la disputa por el liderazgo abierta, con 3,4% de indecisos y candidatos no del todo confirmados. El promedio de esas tres encuestas con escenarios relativamente comparables arroja 31,3% para LLA vs 26,1% para Schiaretti; la brecha de 5,2 pp a favor del sello libertario no resulta estadísticamente significativa dado el error muestral medio, lo que implica un empate técnico por el liderazgo. De la Sota se recorta como tercera nítida, con 14,6%. Fuera del podio, Fuerza Patria alcanza 4,8%, la izquierda 3,8%, Mestre 3,2% y el PRO 2,8%, con 6,3% de indecisos.
Consultora Delfos realizó una aproximación alternativa: sobre la base de encuestas previas al cierre de listas (con sellos y candidatos sin confirmar), corrió 20 mil simulaciones en un programa para calcular la probabilidad de los distintos escenarios de distribución de las nueve bancas de diputados nacionales que se renuevan en octubre (gráfico arriba). El escenario más probable (84,4% de chances de ocurrencia) arrojó cuatro bancas para las dos fuerzas que disputan el liderazgo (presumiblemente LLA y Provincias Unidas, tal como sugiere el promedio de las tres encuestas revisadas antes) y la novena banca para la tercera minoría (que sería Natalia De la Sota por Defendamos Córdoba, según el mismo promedio). En síntesis, del análisis de esos cuatro informes se puede concluir: 1) el liderazgo será disputado por LLA y Provincias Unidas 2) la lista mejor perfilada para completar el podio es la que encabeza De la Sota 3) fuera del top 3, Fuerza Patria, la izquierda, la UCR y el PRO rondan entre 5% y 3% 4) en las próximas elecciones legislativas, la distribución de las bancas cordobesas puede ser diferente a la de los últimos 14 años; las tendencias sugieren una polarización relativamente simétrica.
miércoles, 13 de agosto de 2025
Variables que se alinean y pronóstico electoral en las últimas encuestas nacionales (nota publicada en CBA 24N)
Entre las últimas 10 encuestas realizadas a nivel nacional, hay tres que se destacan por compartir una tendencia que parece funcionar como predictiva hacia la elección de medio término del 26 de octubre: alineación de determinadas variables clave. Comenzaremos el análisis por la más reciente: los datos relevados por la consultora Reale-Dalla Torre (RDT) entre el 28 de julio y el 3 de agosto arrojan que 38,6% de los electores aprueba la gestión de Javier Milei, una merma de 8,6 puntos porcentuales (pp) respecto a la aprobación al primer mes de gobierno (47,2%), en tanto que la desaprobación trepó 5,7 pp, de casi 41% a 46,6% en el mismo lapso (gráfico arriba).
En ese informe, la aprobación es consistente con la intención de voto a favor de La Libertad Avanza (LLA) + aliados: 38,4%. Pese a un descenso de 4,6 pp respecto a febrero pasado en el caudal oficialista, la ventaja sobre la principal fuerza de oposición se sostiene en dos dígitos: pasa de 16,3 pp a 11,3 pp, similar a los 11,6 pp que Milei sacó de brecha sobre Sergio Massa en el ballotage de 2023. Fuerza Patria se mantiene relativamente estable entre febrero y agosto y las demás fuerzas no oficialistas insinúan una tendencia a la baja, mientras que los votantes enojados (no votarían a “Ninguno”) se duplican (gráfico arriba).
Como dato complementario, RDT relevó la intención de voto a favor vs en contra del gobierno de Milei: nuevamente, la favorable se alinea con la aprobación de la gestión y roza el 37%, si bien acusa una merma de 8,7 pp respecto a febrero pasado. La desfavorable logra un empate técnico con el caudal filo-oficialista: 36,5%, estable respecto a febrero pasado. El dato que crece fuerte es el no sabe, que sube 9 pp, pasando de casi 18% a casi 27% (gráfico arriba).
Entre el 25 y el 28 de julio, AtlasIntel también relevó a nivel nacional: en este caso, la variable que se alineó con la intención de voto no fue la aprobación sino la evaluación del gobierno. La calificación positiva rozó el 36%, vs una negativa de 42,3% (que se corresponde con el voto a Massa en la segunda vuelta de 2023, 44,4%) y una regular de 20%, lo que expresa un primer nivel de malestar (gráfico arriba). Como se observa en la serie evolutiva, la evaluación positiva perforó el umbral del 40% en abril pasado (cayó 8,3 pp, de 44% a 35,7%) y ya no volvió a ubicarse por encima de ese nivel.
La intención de voto a favor del oficialismo según el informe de AtlasIntel se ubica en el mismo orden de magnitud de la imagen positiva del gobierno: 38,7%, vs 27,5% de Unión por la Patria (gráfico arriba). La ventaja es de 11,2 pp, similar a los 11,6 pp que LLA obtuvo sobre UP en noviembre de 2023. En tren de hipótesis, la brecha podría ampliarse si en los distritos en los que concurren en alianza con el PRO logra sumar de manera lineal al sello amarillo, que en ese estudio alcanza 6,5% de intención de voto.
En tercer término, consultora Opina midió a principios de julio: en este caso, la variable que se alineó con la intención de voto fue la posición política frente al gobierno de Milei. Un 38% se identificó con el apoyo, 22% como neutro y 39% como opositor (gráfico arriba). Como se aprecia en la serie evolutiva, el apoyo perforó el umbral del 40% en abril pasado (cayó de 41% a 37%, 4 pp) y ya no volvió a alcanzarlo, si bien se ubica apenas por debajo, mientras que la postura de relativa neutralidad muestra una tendencia ascendente desde mayo pasado.
Ese 38% de apoyo se corresponde con 37% de intención de voto a favor de LLA, que en este caso obtiene una ventaja sensiblemente menor sobre el peronismo K: apenas 5 pp, menos de la mitad de lo que vimos en las otras dos mediciones. Nuevamente, la brecha podría ampliarse si en los distritos en los que concurren en alianza con el PRO logra sumar de manera lineal al sello amarillo, que en ese estudio alcanza 8% de intención de voto. Con todo, más allá de esa hipótesis, del análisis de estos tres estudios se desprende que 1) la intención de voto a favor del oficialismo oscila en torno al 38% 2) tiende a correlacionarse con variables como el nivel de aprobación, la evaluación de gestión y el nivel de apoyo al gobierno 3) las tres muestran una tendencia descendente en los últimos meses y se ubican por debajo del umbral del 40% 4) por ahora, el caudal a favor del oficialismo muestra suficiente resiliencia como para que LLA sea la primera minoría electoral en octubre.
martes, 12 de agosto de 2025
viernes, 8 de agosto de 2025
La comunicación de Javier Milei, de disruptiva a repetitiva (nota publicada en CBA24N)
Esta semana, durante su discurso en la Fundación Faro, el presidente Javier Milei anunció: “Voy a dejar de usar insultos”. ¿Fue un acuse de recibo de las últimas mediciones que relevaron los efectos de una comunicación caracterizada por la auto-referencialidad y la violencia discursiva? Las alertas al respecto comenzaron en junio pasado: el reporte de redes de Ad Hoc de ese mes arrojó que la conversación sobre Milei se mantuvo negativa por quinto mes consecutivo, la racha desfavorable más larga de la era libertaria. El mismo informe apuntaba que las menciones a su figura seguían bajando cada mes, lo que indicaba un protagonismo autosostenido y en declive. A fines de julio, el monitor de redes de Tendencias Consultora confirmó el retroceso del respaldo digital al presidente: el apoyo medido en likes cayó entre tres y cuatro veces respecto a los primeros meses de su gestión (gráfico arriba).
La pérdida de apoyo fue aún más pronunciada en las publicaciones vinculadas a la denominada ´batalla cultural´. “Si separamos la caída de todos los posteos entre los de batalla cultural y el resto, encontramos que la caída fue mucho mayor entre los de batalla cultural: perdieron 80,4% de likes, mientras que el resto cayó 63,8%”, destacó el informe (gráfico arriba). El contexto de este cambio de tendencia es una situación económica donde la desaceleración inflacionaria viene perdiendo centralidad como mérito de gestión y la preocupación por los ingresos deteriorados y el pluriempleo ganan protagonismo, agregó el documento.
Consistente con la tendencia que indican los monitores de sentimiento social en redes, las últimas encuestas nacionales ratifican que el apoyo al oficialismo es minoritario en esta materia: según una reciente medición de la consultora Casa Tres, al 40% de los electores les gustan las formas del gobierno, vs 54% a los que no (gráfico arriba). La brecha de 14 puntos porcentuales desfavorables es nítida y también se aprecia que el rechazo es mucho mayor entre las mujeres, algo entendible dada la virulencia del discurso presidencial contra ese género.
Con mayor negatividad aún, la última encuesta nacional de Analogías arrojó apenas 22,3% de votantes a los que les gustan las formas y el modo de comunicar del presidente, vs 73,3% a los que no les gustan (gráfico arriba). En este caso, el saldo desfavorable trepa a 51 pp. El rechazo es mayoritario por género, edad y niveles de instrucción, si bien con algunos matices.
Como dato relativamente positivo, casi 51% cree que la forma de comunicarse del presidente es genuina, vs casi 33% que la ve como parte de un “acting” (gráfico arriba). Como lectura favorable, se puede plantear que se le reconoce espontaneidad a Milei. El problema, sin embargo, es que dos tercios de los electores (66,3%) califican como violentas sus formas discursivas, lo que casi triplica a quienes opinan lo contrario: 24,4% (gráfico abajo).
Esa percepción de violencia discursiva no es caprichosa: según el último informe de redes de Ad Hoc, Milei es el político argentino más provocador y el usuario no troll que más insultos y agresiones realizó en los últimos 2 años (gráfico abajo).
En síntesis: 1) tanto las encuestas nacionales como los monitores de sentimiento social en redes muestran rechazos mayoritarios a la comunicación presidencial 2) eso sugiere que el contenido y las formas de su relato funcionan como aceleradores del malestar, pues sólo reciben apoyos en el orden del 25%-40% del electorado 3) si bien un nivel de apoyo que se traduzca en un tercio de los votos o algo por encima puede ser suficiente para confirmar al oficialismo como primera minoría electoral en los comicios de medio término de octubre, la comunicación presidencial pierde novedad y centralidad en la agenda; está dejando de ser disruptiva, para resultar repetitiva.
lunes, 4 de agosto de 2025
viernes, 1 de agosto de 2025
Cierre de Vialidad y ajuste en obra pública: qué dicen las últimas encuestas (nota publicada en CBA24N)
El 8 de julio pasado, el Poder Ejecutivo disolvió la Dirección Nacional de Vialidad; si bien un fallo judicial frenó temporalmente la medida, el gobierno de Javier Milei está decidido a avanzar en esa línea. Según las encuestas, es una decisión impopular en el marco de una política también impopular: el relevamiento de Consultora Delfos realizado en julio a nivel país arrojó que 51% de los electores está en desacuerdo con esa decisión, vs 44% que acuerda (gráfico arriba). La brecha de 7 puntos porcentuales resulta estadísticamente significativa, dado un error muestral de +/-1,7%, lo que confirma un rechazo mayoritario.
La evaluación del área que enmarca a la medida es aún peor: según la Universidad de San Andrés (Udesa), en julio 71% se mostró insatisfecho con la política de obras públicas e infraestructura del gobierno nacional, vs apenas 21% que mostró satisfacción (gráfico arriba). El saldo en contra es de 50 pp. Como dato extra, todas las áreas testeadas muestran mayor insatisfacción que satisfacción, lo que sugiere que el apoyo que aún muestra el oficialismo tiene que ver con motivos no vinculados estrictamente a la valoración de sus políticas.
En la misma línea, en junio pasado (antes de la decisión de disolver Vialidad Nacional), la encuesta nacional de Equipo Mide reportó a Obras Públicas como el área peor calificada: 63% de negativa vs 26% de positiva (gráfico arriba). El saldo desfavorable era de 37 pp; esto confirma que se trata probablemente de la política en la cual la motosierra tiene el menor nivel de apoyo relativo de todas las que se miden de manera periódica.
Para más datos, incluso en Córdoba (provincia en la cual Milei obtuvo el 74% de los votos en el ballotage de 2023), el recorte en obra pública apenas logró un acuerdo de 27%, vs un desacuerdo de 67% (gráfico arriba), según la encuesta realizada en mayo pasado por la consultora Casa Tres. El saldo desfavorable de 50 pp es contundente.
Ampliando el marco temporal del análisis hasta marzo pasado, cuando Milei atacó la obra pública en su discurso de apertura de sesiones ordinarias del Congreso Nacional, su mensaje apenas logró un acuerdo de 37%, vs un desacuerdo de 51%, según Equipo Mide (gráfico arriba): el saldo en contra fue de 14 pp.
Finalmente, la serie evolutiva de mediciones realizadas por las consultoras Alaska y Trespuntozero permite establecer que la motosierra en obra pública no tuvo apoyo mayoritario ni siquiera cuando Milei llevaba un par de meses de gestión: en febrero de 2024, 43,3% estaba de acuerdo con eso, vs casi 52% que se mostraba en desacuerdo (gráfico arriba). La brecha desfavorable de casi 9 pp se amplió a 25,2 pp al final del primer año de mandato, con el desacuerdo rozando el 60%, vs casi 35% de acuerdo. En síntesis: 1) hay consenso en las encuestas respecto a que el ajuste en obra pública es una de las áreas peor evaluadas de la política del gobierno nacional 2) el sostenido y repetido discurso presidencial de motosierra en obras nunca dejó de ubicarse como posición minoritaria en términos de opinión pública, y en los últimos meses cayó por debajo del 40% de aval 3) así, el ajuste en Vialidad reconfirma la impopularidad de la agenda libertaria en esa materia.
miércoles, 30 de julio de 2025
martes, 29 de julio de 2025
Córdoba podría tener hasta un 45% de abstención en octubre (nota publicada en Perfil)
Norman Berra advierte que el desinterés electoral podría reflejarse en una participación muy baja si no surge una alternativa visible al modelo de Milei.
El analista Norman Berra anticipó que la participación electoral en Córdoba podría ser “en el orden del 55%” en las legislativas de octubre, si persiste el clima de desilusión y no emerge una oposición clara al oficialismo nacional. En diálogo con Punto y Aparte, Punto a Punto Radio (90.7), Berra sostuvo que el ausentismo se consolida como tendencia en las encuestas provinciales, luego de las elecciones adelantadas que marcaron descensos de participación en todo el país.
El referente de la Consultora Delfos explicó que “todas las elecciones adelantadas que hubo este año, con sus matices, mostraron baja participación. La caída más fuerte probablemente fue la de CABA”. A su juicio, “ante un malestar general y la falta de una alternativa crítica visible al actual modelo nacional, parte del electorado que votaría contra Milei podría directamente quedarse en su casa”.
Según las mediciones de la consultora, en Córdoba hay hoy “un promedio de indecisos del orden del 12 %”. Si ese grupo no se moviliza, “la concurrencia puede quedar en torno al 60 %”. Berra agrega que, sumado al 5–6 % que evalúa votar en blanco o evitar las urnas, “el escenario de abstencionismo puede llegar al 45 %”.
La imagen de Llaryora y el impacto del bono provincial
Respecto del aumento del 84 % a jubilados provinciales —que lleva la mínima a unos $700.000—, Berra afirmó que “es una medida fuerte, porque es un anuncio que se contrapone con la política que está llevando adelante el Gobierno nacional”.
El consultor señaló que la aprobación de la gestión de Martín Llaryora se ubica “alrededor del 50–55 %”, mientras la desaprobación ronda el 40% en la provincia de Córdoba. A nivel nacional “un 35–40 % todavía no tiene opinión formada” sobre el mandatario cordobés, de modo que el efecto del bono “todavía es prematuro para evaluar en las encuestas”.
Schiaretti, la carta más potente del cordobesismo
Berra subrayó que el sello cordobesista posee un caudal “de 25 a 30 puntos, y quien mejor fideliza esos votos es claramente Juan Schiaretti”. Si el exgobernador encabezara la lista, mantendría ese techo; otros nombres —Calvo, Siciliano, Pichi Campana— “partirían más bien de 20 puntos”.
En cuanto a Natalia de la Sota, el analista consideró que “con un sello fuerte, por ejemplo el Frente Renovador o el kirchnerismo, podría alcanzar entre 12 y 14 puntos”. Sin esa estructura, “bajaría a 6–7 puntos”, sobre todo si el kirchnerismo impulsa otro candidato y fragmenta el electorado.
Sobre La Libertad Avanza, Berra observó que el espacio “da señales de ir con lista propia en Córdoba, sin alianza con radicales ni PRO, aunque el escenario está en construcción”. Esa estrategia replicaría lo ocurrido en provincia de Buenos Aires y complejizaría el tablero opositor.
¿Córdoba puede ser la excepción?
A diferencia de distritos que votarán múltiples categorías este año, Córdoba solo concurrirá a las urnas en octubre. “Eso —dijo Berra— podría evitar una caída de participación tan drástica como la vista en otras provincias, aunque todo dependerá de la intensidad de la campaña y del clima económico y social”.
viernes, 25 de julio de 2025
Qué dicen las últimas encuestas en provincia de Buenos Aires (nota publicada en CBA24N)
En los comicios de 2023 en los que el gobernador de la provincia de Buenos Aires (PBA) obtuvo su reelección, la lista de diputados y senadores peronistas que acompañó a Axel Kicillof obtuvo 39,3% de los votos, vs 23,7% de La Libertad Avanza (LLA) y 22,3% del PRO: la sumatoria de ambas fuerzas de derecha, que concurrieron divididas, arrojó 46%. Con ese antecedente, más la victoria libertaria sobre el sello amarillo en Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) en abril pasado, el oficialismo nacional forzó una alianza en la cual el PRO se diluye detrás del sello violeta en pos de vencer al peronismo en su bastión. ¿Qué dicen las últimas encuestas realizadas en ese distrito antes del cierre de listas, pero que ya sondeaban escenarios de unidad en los dos principales frentes? Según Mercados y Estrategias (M&E), la sumatoria del peronismo unificado rozaba a mediados de junio el 49% de intención de voto, vs 43,6% de la alianza entre LLA y el PRO (gráfico arriba). De eso resulta una brecha de 5,2 puntos porcentuales (pp) estadísticamente no significativa dado el error muestral de +/-3,9%.
A fines de junio, Tendencias Consultora reportó 40,3% para el peronismo vs 39,5% para LLA, brecha de 0,8 pp estadísticamente no significativa dado un error muestral de +/-1,85%; es decir, un empate técnico (gráfico arriba). A diferencia del estudio de M&E, en este caso los indecisos (11,1%) llegaban a los dos dígitos, planteando un escenario muy competitivo y abierto entre las dos principales formaciones.
Con apenas matices, la última medición de Trends realizada entre fines de junio y principios de julio también arrojó un empate técnico: casi 44% para el peronismo unido vs 42,4% para LLA + el PRO (gráfico arriba). La brecha de 1,3 pp resulta estadísticamente no significativa dado un error muestral de +/-2,7%, y los indecisos rondan el 5%.
En cambio, en su encuesta realizada entre el 27 de junio y el 10 de julio, Management & Fit (M&F) reportó 41,3% para LLA+PRO vs 33,4% para el peronismo K (gráfico arriba). La brecha de casi 8 pp a favor de la derecha unificada se ubica en el límite de la significatividad estadística dado el error muestral de +/-3,5%, pero su relativa amplitud respecto a las mediciones anteriores se vincula con que en el informe de M&F el peronismo no K roza el 6%, muy por encima de lo que registra en los anteriores sondeos.
La última medición de Consultora Delfos, realizada del 11 al 15 de julio con sellos más definidos, estira la ventaja a favor de la Alianza La Libertad Avanza hasta 10,2 pp: 48,3% vs 38,1% de Fuerza Patria (gráfico arriba). La brecha resulta estadísticamente significativa dado el error muestral de +/-2,4%, y el informe presenta la menor proporción de indecisos: casi 2%. El promedio de esta serie de cinco encuestas arroja 43% para LLA+PRO vs casi 41% para el peronismo K y aliados, un empate técnico. La sumatoria de la derecha se ubica 3 pp por debajo del 2023, mientras que el peronismo aparece casi 2 pp arriba, pero los caudales de ambas coaliciones están dentro del mismo orden de magnitud de 2023 si se considera el error muestral medio.
Por otro lado, dos consultoras relevaron intención de voto en las secciones electorales de mayor peso en el padrón: según Isasi-Burdman, en la primera el Frente LLA aventaja a Fuerza Patria por 16 pp, 48% a 32% (gráfico arriba).
En cambio, según CB Consultora la ventaja para LLA en esa sección electoral es menor a 6 pp: 41,2% vs 35,3%, en este caso midiendo sellos más cabezas de lista (gráfico arriba). Finalmente, ambas consultoras también sondearon la tercera sección de la PBA, tradicional bastión peronista: Isasi-Burdman reportó una brecha de 2 pp para LLA+PRO, que implica un empate técnico (gráfico abajo).
Por contraste, CB reportó una ventaja de casi 19 pp a favor de Fuerza Patria, con la actual vicegobernadora Verónica Magario como cabeza de lista: 46,5% vs 27,7% para Maximiliano Bondarenko, de LLA (gráfico abajo). Estas dos mediciones realizadas en secciones electorales clave muestran matices marcados, pues los sellos sugieren una tendencia que cambia sensiblemente cuando se incorporan las cabezas de lista a la disputa. Por lo tanto, habrá que esperar a las próximas semanas para ponderar el factor de arrastre territorial de las candidaturas que compiten.
jueves, 17 de julio de 2025
La negatividad y el escepticismo predominan en las últimas encuestas nacionales (nota publicada en CBA24N)
El gobierno nacional celebra una inflación amesetada por debajo del 2% mensual desde mayo pasado, pero esa euforia no se traduce en la conversación digital ni en las encuestas nacionales. ¿Por qué? Según el último informe de sentimiento social en redes de Monitor Digital, “pese a la baja de la inflación y las reiteradas promesas del gobierno sobre el despegue económico inminente, la conversación pública no sale del escepticismo”. El clima general de los usuarios de redes sociales sobre la economía se mantiene en una zona de negatividad extrema desde hace más de un año: aunque se registraron leves repuntes en marzo y abril de 2025, volvió a deteriorarse entre mayo y julio, estabilizándose en torno a los -70 puntos, un nivel muy malo (gráfico arriba).
Con apenas matices, el último reporte de redes de Ad Hoc arrojó que la conversación sobre Javier Milei se mantuvo negativa por quinto mes consecutivo (gráfico arriba). Eso perfila la racha desfavorable más larga de la era libertaria: a inicios de 2024, cuatro fueron los meses consecutivos de negatividad por sobre la positividad. En 2025, ya van cinco meses.
¿Cómo permea en las encuestas el pesimismo que muestran las redes sociales? Según la última medición de Atlas Intel & Bloomberg, desde octubre de 2024 la evaluación negativa del gobierno nacional viene superando a la positiva (gráfico arriba): eso implica nueve meses consecutivos de saldos desfavorables, lo que se agudiza si se considera al regular como un primer nivel de malestar.
Asimismo, desde febrero pasado la percepción de que el país va en la dirección equivocada viene superando a la idea de que el rumbo es correcto; según la serie evolutiva de la consultora Equipo Mide, sólo en mayo de 2025 el oficialismo pudo apuntarse un empate en esa disputa (gráfico arriba). En conjunto, estos datos marcan que el discurso oficialista presenta una euforia que no se condice con el sentimiento social que miden las redes ni con el pulso de las encuestas, que oscilan entre el escepticismo y el pesimismo.
A eso se suman dos rasgos característicos de la comunicación oficial que también están jugando en contra, como son la auto-referencialidad y la violencia discursiva. El primero queda puesto en evidencia en el informe de Ad Hoc: las menciones a Milei siguen bajando cada mes, lo que muestra un protagonismo autosostenido, pero en declive (gráfico arriba). “El que más habló positivamente sobre el presidente fue el propio presidente. Milei realizó 2.959 menciones a su propio nombre, entre publicaciones originales y retweets donde los mencionaban”.
Respecto al discurso del oficialismo, todas las mediciones son concurrentes: según Equipo Mide, al 62% de los electores no le gustan el estilo y las formas del presidente, vs 38% que dice lo contrario (gráfico arriba).
Profundizando el análisis, el Observatorio de Psicología Social Aplicada de la Universidad de Buenos Aires (OPSA/UBA) relevó en Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y Provincia de Buenos Aires, conglomerado que acumula alrededor del 45% del electorado de todo el país. Nuevamente, más del 60% respondió de manera negativa respecto al estilo comunicacional del presidente (gráfico arriba).
Para más datos, la agregación de las respuestas abiertas espontáneas sobre el estilo comunicacional de Milei resulta en 71% de negatividad vs 27% de positividad (gráfico arriba).
En la misma línea, los sentimientos que generan los discursos de Milei acumulan 56% de negatividad vs 35% de positividad (gráfico arriba). En síntesis: 1) tanto las mediciones de conversaciones en redes como las encuestas nacionales muestran al pesimismo por encima del optimismo 2) eso permea en la calificación de la gestión y la percepción del rumbo del país, que vienen arrastrando varios meses de negatividad 3) tanto el contenido como las formas del relato oficialista funcionan como aceleradores del malestar, pues sólo reciben apoyos en el orden del 30%-40% del electorado, muy lejos del casi 56% que lo votó en el ballotage del mismo año.