En nuestra nota de la semana pasada en este espacio apuntábamos que las primeras mediciones marcaban un impacto negativo en la valoración del presidente Javier Milei a pocas horas del estallido del “Criptogate”, con matices entre las encuestas (donde el efecto era menor) y el sentimiento social digital (donde resultaba mucho más visible). Asimismo, también es pertinente considerar la distinta sensibilidad de las variables en un marco temporal: mientras que la encuesta que cerró consultora Delfos el domingo 16 de febrero arrojó una suba de 5 puntos porcentuales (pp) en la imagen negativa de Milei junto con un alza de 2 pp en la regular y una caída de 3 pp en su valoración favorable, la variable aprobación no mostró variaciones estadísticamente significativas a nivel intermensual en el cierre a 48 horas del twit presidencial (gráfico arriba).
En cambio, la misma variable en la encuesta que realizó la consultora Management & Fit entre el 10 y el 21 de febrero (a una semana del estallido del escándalo) sí registró un impacto: la aprobación cedió 1,5 pp (de 52% a 51,5%) y la desaprobación pasó de 43,8% a 46,2% (+ 2,4 pp; gráfico arriba). Esto confirma la hipótesis expuesta en el sentido de que los efectos irían in crescendo en la semana siguiente a que el tema copara la agenda pública. Más allá de variaciones que son estadísticamente no significativas, hay coincidencia en un panorama de polarización simétrica en ambas mediciones.
En la misma línea, la última medición de la consultora TresPuntoZero reportó que la imagen positiva de la gestión cedió casi 1 pp, lo que se trasladó casi linealmente a la negativa (gráfico arriba). Si bien se trata nuevamente de variaciones estadísticamente no significativas a 4 días del escándalo (la medición se realizó entre el 15 y el 18 de febrero), la negatividad insinúa un ascenso y se ratifica la polarización.
Giacobbe cerró su medición el mismo día que TresPuntoZero (18 de febrero) y arrancó el lunes 17: la variable imagen arrojó un estancamiento de la positiva (cedió casi 1 pp respecto a la anterior encuesta) y una suba de la negativa (casi 9 pp), con una brecha de 3 pp estadísticamente no significativa que confirma el panorama de empate técnico y polarización.
Taquion midió el 18 de febrero y reportó que un 20% vio empeoró su imagen de Milei luego del escándalo (vs 6% de mejora), para un resultado simétrico y polarizado: 50% de positividad vs 50% de negatividad (gráfico arriba).
Pulso Research relevó entre los días 17 y 19 de febrero: registró una merma de 2,8 pp en la imagen positiva vs una suba de 5,6 pp en la negativa, lo que perfiló un nuevo empate técnico dentro de un panorama de polarización simétrica (gráfico arriba).
La encuesta más abarcativa de las últimas nacionales la realizó Proyección Consultores entre el 17 y el 22 de febrero: reportó una caída de 2,8 pp en la positiva vs una suba de 4 pp en la negativa. Profundizando el análisis, una de las mayores mermas a nivel intermensual se dio en el atributo credibilidad, que arrojó un saldo desfavorable de 12,5 pp (gráfico arriba).
Más allá de los matices respecto a las variaciones estadísticas que arrojan en cada caso, las últimas encuestas nacionales coinciden en mostrar una tendencia descendente en las variables aprobación, imagen de gestión y valoración del presidente. Otro termómetro del impacto del Criptogate lo aporta la encuesta provincial realizada por Consultora Delfos entre el 17 y el 24 de febrero en el distrito en el cual Milei obtuvo 76% de votos en el ballotage de noviembre de 2023: la imagen de su gestión cayó 7 pp, la regular subió 5 pp y la negativa trepó 4 pp, con lo cual el malestar acumulado se incrementó 11 pp intermensuales (gráfico arriba).
Finalmente, según el mismo informe la aprobación de gestión cayó 5 pp, ubicándose en niveles similares a los de agosto pasado y en el nivel pico de los últimos 5 meses (gráfico arriba).
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