La oposición conservadora liderada por David Cameron se convirtió el viernes 7/5 en la bancada más fuerte del Parlamento británico, pero no logró la mayoría absoluta: alcanzó el 36 por ciento de los votos, contra 29 por ciento del oficialismo gobernante (laboristas) y 23 por ciento de los liberal demócratas. La buena performance de esta tercera fuerza generó una reñida elección, en la que por primera vez desde 1974 no hay un claro ganador, ya que los conservadores obtienen cerca de 306 escaños, cuando la mayoría absoluta requiere al menos 326.
Los liberal demócratas se posicionaron como fuerza política gravitante en un país acostumbrado al bipartidismo y su líder Nick Clegg se ha convertido en una suerte de gran elector, ya que los diputados de su formación tienen la llave para constituir un nuevo gobierno, pactando con los conservadores o con quienes en teoría podrían tener más afinidad, los laboristas. Con todo, a éstos el camino se les hace cuesta arriba, ya que los escaños obtenidos les impedirían alcanzar mayoría absoluta, en tanto que los conservadores podrían tratar de convencer a los liberal demócratas o bien tentar un acuerdo con pequeños partidos de Irlanda del Norte, Escocia y Gales para alcanzar los 326 asientos necesarios.
Este resultado electoral agrega incertidumbre política a los problemas económicos que atraviesa Gran Bretaña. Los precios de los activos retrocedieron y la libra se deprecia respecto al dólar, al mismo tiempo que arrecia la crisis de deuda en Europa. En un país poco acostumbrado a las coaliciones de gobierno, el contexto es un desafío, pues el compromiso político necesario para implementar un ajuste fiscal -como reclama el establishment- es más difícil de lograr sin una mayoría clara. Para peor, la amenaza de recorte a la nota crediticia de Gran Bretaña es creciente (el déficit trepa ya al 11% del PBI) en tanto que la calificadora Moody´s advirtió que las entidades financieras de Portugal, España, Italia, Irlanda y el Reino Unido enfrentan riesgos de contagio de la crisis que plantean amenazas comunes y muy reales para todos ellos.
Muy claros tus comentarios,nos permite ver los acontecimientos de América Latina desde la óptica de un observador.También como antecedentes a tener en cuenta en las próximas elecciones en nuestro país.Norma y Néstor
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