A 10 días de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), actualizamos los escenarios y tendencias que surgen de las más recientes encuestas nacionales realizadas entre agosto y los primeros días de septiembre.
Escenario 1: ventaja del oficialismo similar al 2019
Según Ricardo Rouvier (gráfico arriba), el Frente de Todos (FdT) rondaría el 37% contra casi 30% de Juntos por el Cambio (JxC). Así, la ventaja (7,2 puntos porcentuales) sería similar a la de octubre de 2019, cuando alcanzó 7,96 pp (48,24% vs 40,28%, respectivamente), en un escenario menos polarizado que el de la elección presidencial, consistente con una primaria de legislativas de medio término. Con 12,2% de indecisos, la brecha le da una luz de ventaja al oficialismo sin ser categórica. Las terceras fuerzas podrían mejorar su caudal respecto a 2019, lo cual también se corresponde con una elección de senadores y diputados nacionales sin la tracción de una boleta presidencial.
Escenario 2: ventaja oficialista en torno a 5 puntos porcentuales
Hay dos estudios que perfilan este escenario. El primero es de OhPanel, que arroja 34% para el FdT vs 29% para JxC, ambos subiendo respecto a la encuesta previa a costa de los indecisos, y con la derecha (7%) y la izquierda (5%) en empate técnico (gráfico abajo). Aun así, el 22% de indecisos deja el resultado abierto en cuanto a la definición del resultado.
La otra encuesta que arroja una brecha en torno a 5 pp es de CELAG, que reporta 43,3% para el Fdt vs 38,1% para JxC (gráfico abajo). En este caso, se proyectan indecisos y sólo se cuentan los votos válidos positivos, con lo cual el oficialismo rebasa el umbral del 40% y la principal fuerza opositora ronda el 38%. Esto marcaría una polarización notoria, más típica de una elección presidencial que de una primaria legislativa. Por fuera de “la grieta”, queda una “avenida del medio” que no llega al 10% (lavagnismo + randazzismo en 6,5%) y la izquierda en empate técnico con la derecha (5,7% vs 4,5%, respectivamente).
Escenario 3: empate técnico
Hay dos encuestas nacionales recientes que reportan esta tendencia. Por un lado, la del Observatorio de la Universidad Nacional de La Matanza (UNLAM), que arroja casi 35% para el FdT vs 32,5% para JxC (gráfico abajo). La brecha es de 2,4 puntos porcentuales, lo que cae dentro del rango del error muestral promedio e implica un empate técnico.
En ese estudio, el 10,3% de indecisos incrementa la incertidumbre del resultado que plantea el escenario de empate técnico. Por otro lado, ninguna de las terceras fuerzas con sello identificado se acerca a los dos dígitos, marcando así un escenario polarizado para una elección legislativa. Los libertarios apenas rozan el 5% y la izquierda perfila una cosecha magra en el total nacional. La otra encuesta que muestra un empate técnico es de Udesa y coloca arriba a JxC por 3 pp sobre el FdT, 35% a 32% con proyección de indecisos. Aquí, los libertarios mejoran su performance y alcanzan 12%, superando a la izquierda por 5 pp (gráfico abajo).
Promedio y participación, una variable clave
El promedio de las últimas encuestas arroja 35% para el FdT vs 30% para JxC, con lo cual si tomamos la media de error muestral el oficialismo podría descender hasta un piso de 32% y trepar hasta un techo del 38% y la principal fuerza opositora rondar entre 27% y 33% (contando todos los votos, no sólo los positivos). En algunas mediciones, el piso oficialista es más bajo, como en la última encuesta de Synopsis (gráfico abajo).
Sin embargo, ese mismo estudio perfila tres escenarios, en los que el caudal del oficialismo oscila entre 29,2% y 38,4%. Esto marca cierta convergencia de las mediciones en el potencial de caudal oficialista (el último informe de Poliarquía coincide en esa proyección). Synopsis plantea que la variable concurrencia puede ser muy gravitante, ya que si una parte del electorado opositor no vota en las primarias y sí lo hace el votante oficialista para expresar su apoyo, el FdT podría acercarse al 40%, que lo ubicaría claramente como la primera minoría nacional (gráfico abajo).
Como se vio en las cuatro elecciones provinciales recientes, la concurrencia fue menor que en comicios anteriores: cayó entre 4 y 15 pp comparada con comicios realizados en 2019 y 2017. En Misiones (votó el pasado 2 de junio), la participación fue del 59,53% del padrón, 19 pp menos que en comicios provinciales de 2019 y 2017. En Jujuy (votó el pasado 27 de junio), la participación electoral fue del 70,68%, lo que implicó una caída de 8 y 10 pp respectivamente comparada con las elecciones de gobernador y diputados provinciales de 2019 (78,69%) y las legislativas provinciales de 2017 (80,75%, coincidieron con las nacionales). En Salta, en las elecciones provinciales realizadas el 15 de agosto pasado, la participación fue del 60,21%, con una caída de 11 y de 14,7 pp respecto del 71,39% y del 74,92% de las elecciones locales de 2019 y 2017, respectivamente. Finalmente, en Corrientes, donde se eligió gobernador (un cargo ejecutivo que genera más afluencia que elecciones legislativas), la afluencia de electores fue la más baja de los últimos cuatro años: 66%, contra el 70% de las provinciales del 2 de junio de 2019 (-4 pp), el 81% de la elección de diputados nacionales 2019 (-15 pp) y el 79% de la elección de gobernador del 8 de octubre de 2017 (-13 pp). Habrá que esperar para confirmar si esa disminución también se dará en las PASO nacionales, en función de la situación sanitaria de la pandemia, el temor de algunos segmentos ante la posibilidad de contagiarse cuando la elección decisiva será recién en noviembre y el desinterés, descontento o apatía de parte del electorado.
Estos números parecen más una expresión de voluntad suya que la realidad, Berra.
ResponderEliminarQuizás no leíste bien, son los números publicados por las consultoras citadas en la nota. ¡Gracias por el interés!
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