Un lector asiduo del blog citó respecto de la entrada anterior datos de una columna escrita en El Cronista por Julián de Diego que también aportan a una suerte de balance del 2012, desde el flanco optimista: "desempleo estable en torno del 7%, subempleo total de otro tanto, y aumentos salariales alrededor del 27%, cuatro puntos por encima de la evolución de las góndolas, con un crecimiento de la economía de 2% a 3%, permiten concluir en general que el año 2012 en el plano laboral fue positivo..."
Es una buena y apretada síntesis de aspectos favorables del devenir económico, ya que muestran estabilidad laboral y crecimiento económico (si bien magro respecto de 2011) y aumentos salariales por encima de la inflación no oficial, con lo que (a nivel macro, no en todos los segmentos) el poder adquisitivo pudo mantenerse y en ciertos casos ganarle algunos puntos al incremento de precios.
Con todo, la combinación de elevada inflación con menor crecimiento económico revela uno de los flancos más vulnerables del modelo K, que también se pone de manifiesto en aspectos como la competitividad y la rentabilidad. En este marco, un estudio realizado por la consultora Federico Muñoz y Asociados releva que la utilidad en relación a las ventas se mantuvo en niveles relativamente elevados hasta 2010, pero viene en descenso desde ese entonces. Por otro lado, desde lo positivo, se confirma que en estos años creció la eficiencia recaudatoria de la Afip (de hecho, el estudio plantea que el fuerte aumento en la recaudación de Ganancias a sociedades de 1,4% del PBI entre 2001 y 2011 se explica en buena parte por progresos en la lucha contra la evasión).
Finalmente, una mirada al consumo muestra las siguientes claves:
1) según el Indec, las ventas en supermercados crecieron en noviembre 11,9% interanual, mientras que en los grandes centros de compra la mejora fue del 3,2% en igual período. Tomando los primeros 11 meses del año, las ventas en supermercados subieron 26,3% frente a similar lapso del año pasado, mientras que en los shoppings avanzaron 22,2%. Meses atrás, en una entrada sobre consumo, habíamos anticipado que una tendencia que se insinuaba a partir de la desaceleración económica era precisamente esa, más consumo en supermercados que en shoppings (que, conceptualmente, implica compras más racionales y menos orientadas a la gratificación y el consumo suntuario).
2) sobre el cierre del año, las ventas navideñas arrojaron un aumento de 13,3% interanual, según la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Es decir, pese al contexto enrarecido (protesta de sindicales opositoras el 21 de diciembre y saqueos en diversas ciudades desde el 22) el consumo se mostró dinámico todo el fin de semana previo a la Navidad. De acuerdo a la entidad, "si bien el movimiento de la semana previa fue tranquilo y los robos provocados por algunos sectores violentos generaron cautela, entre el sábado 22 y el lunes 24 las calles se vieron desbordadas de gente en busca de regalos (...) aunque todos los rubros que componen la canasta de compras por Navidad tuvieron resultados muy buenos, la venta se centró en Regalería, Bijouterie, Jugueterías, Calzados e Indumentaria".
En cuanto a cifras, CAME destacó que este año el público compró más cantidades, de menor valor, de lo que resultó un monto promedio de la compra que rondó los 190 pesos por ticket. Respecto a rubros, sobre 687 comercios de todo el país, Alimentos y Bebidas registró un alza de 11,3% en las ventas, Artículos Deportivos 10,2%, Bazar y Regalos 19,4%, Bijouterie 18,7%, Calzados 13,8%, Electrodomésticos y Electrónicos 10,5%, Indumentaria 12,5%, Joyería 10,1%, Juguetería y Librerías 16,8%, Marroquinería 13,6%, Perfumería 10,3% y Relojería 11,8%.
En síntesis, este panorama de cierre había sido ya pronosticado por analistas como Guillermo Oliveto (de la consultora W) quien evaluaba que en el último trimestre la recuperación de la actividad económica permitiría que el consumo volviera a reactivarse (el especialista auguraba que 2012 terminaría con un crecimiento de 3,6%).