La sindicalización gana presencia en la agenda
El solapamiento salarial favorece la migración del personal hacia el convenio colectivo. El fenómeno según especialistas, empresas y sindicatos.
- 25/06/2013 00:01 | Norman Berra (Especial)
Históricamente, en las relaciones laborales el personal fuera de convenio tuvo sueldos más altos (y mayor responsabilidad y jerarquía) como plus por no poseer los beneficios del convenio colectivo de trabajo (horas extra, presentismo y representatividad, entre otros). También solía recibir compensaciones en materia de movilidad, telefonía y flexibilidad horaria.
Pero, en los últimos años se conjugó un factor positivo (retorno de paritarias) con otro negativo (creciente aumento de precios), generando un fenómeno de solapamiento salarial. Esto impulsó la sindicalización en escalafones inéditos antes: el achicamiento de la brecha salarial provocó migración hacia el convenio colectivo. “En cierta forma, está asociado a los períodos de inflación. Cuando la disminución del valor real del salario se hace evidente, las asociaciones profesionales de trabajadores encaran procesos de ajuste en las remuneraciones básicas, que los empleadores o las asociaciones que los representan, tarde o temprano, deben conceder. En los trabajadores fuera de convenio, sin representación gremial, el ajuste de sus retribuciones depende de su capacidad para llegar al empleador y de la predisposición de éste para conceder mejoras. Esta diferencia de posicionamiento hace que la velocidad en los aumentos de los salarios de convenio supere al ajuste en las remuneraciones de los que están fuera de ellos”, explica Carlos Corbella, abogado laboralista y socio del estudio Carello, Corbella & Asociados.
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En los ultimos tiempos, los trabajadores que se encuentran dentro de convenios colectivos de trabajo estan siendo los mas beneficiados debido al retorno de las paritarias. Es muy cierto que el acortamiento entre los salarios provoco la migracion hacia el convenio colectivo, debido a que alli resulta un poco mas sencillo adecuar el valor real del salario que debe cobrar un trabajador, ya que cuenta con las asociaciones profesionales de trabajadores, que seran los encargados de hacer que esto se cumpla. En mi caso por ejemplo, no cuento con una asociacion gremial que me respalde, y por lo tanto el aumento de mi sueldo quedara en manos de los objetivos que puedan ir desarrollando, la eficacia y eficiencia en mi trabajo y los distintos acercamientos que vaya alcanzando con mi jefe. Hoy existen ciertos gremios como la UTA, que pareciera que ellos son definitivamente los que definen el precio del servicio, estableciendo paros y asambleas cuando ellos disponen y manejando a gusto y placer las negociaciones con empresarios. El objetivo radica en definir si es verdad que un empleado sindical percibe un mejor salario que un trabajador que no pertenece a ningun convenio, aunque las percepciones quizas nos demuestren que es asi, ya que al estar sindicalizado, se mejoran los salarios y las condiciones de trabajo.
ResponderEliminarGerardo Perez - 3er año
Hola Gerardo, gracias por tu aporte! Sin duda, este es un tema muy vigente, como planteás. Saludos!
ResponderEliminarCoincido con Gerardo, me pareció muy atinado su comentario. En la practica, también hay que tener en cuenta la aparición de un nuevo protagonista. Inducidos por las empresas, inscriben a trabajadores encubiertamente como MONOTRIBUTISTAS. De esta forma, la precarización de trabajo es una realidad. El empleador transforma en monotribustistas a sus empleados para reducir en un 25% (en algunos 30%) el gasto en salarios. Es dinero que no tienen que girar al estado en materia de cargas sociales. Esto produce que los empleados, al estar afuera de los sindicatos, realicen paritarias individuales, "mano a mano" con los patrones. En este escenario, los empleadores tienen el dominio de la situación aun corriendo el riesgo de sufrir un futuro juicio por parte del empleado y del Gobierno Nacional.
ResponderEliminarOtro factor que va en detrimento del trabajo y de los valores justos en las remuneraciones, es la INFLACIÓN. En el texto se hacía mención a que la brecha salarial se había acortado en relación a los sectores que no están respaldados por los sindicatos. Y en verdad que es así, en las empresas, los mandos medios no suelen estar representados por el sindicato afín a la actividad en el que se desarrolla. Aquí los gerentes y cargos semejantes deben pelear palmo a palmo con el empleador para llegar a tratar un aumento u obtener algún beneficio. Un ejemplo claro es en el Transporte, donde un chofer cobra un 20 o 30% menos que un cargo medio, y donde este último tiene responsabilidades mayores y requiere de mayor capacidad e instrucción. En resumen, la chapita de Coca Cola, de quienes no están representados por el sindicato ni entran en el convenio de trabajo, puede decir "Siga Participando". Mientras los que están afiliados al gremio, seguramente van a tener su premio.
Joaquín Barrale - Tercer Año