Con el escrutinio provisorio en 90,26%, el gobernador de San Juan alcanza en las PASO del domingo 31 de marzo 55,54% de los votos, Marcelo Orrego 32,38% y Martín Turcumán 4,71%. En nuestro posteo anterior planteamos dos proyecciones, una que resultaba del promedio de las encuestas de Acierto y el IOPPS: daba a Uñac 57,6%, a Orrego 29,3% y a Turcumán 3,4%. Aunque falta completar el escrutinio, contra ese resultado provisorio el desvío es de +2,06 puntos porcentuales en el caso del Uñac, de -3,08 en el caso de Orrego y de -1,31 pp en el caso de Turcumán. En cambio, cuando en el posteo anterior ajustamos la proyección considerando el resultado de 2015, Uñac quedaba en 55,6%, Orrego en 29,9% y Turcumán en 7,8%. En ese caso el desvío es de -0,06 pp para Uñac, -2,48 pp para Orrego y -3,09 para Turcumán. Comparativamente, el mejor ajuste fue el de la segunda proyección.
Por otro lado, recordemos que en la elección de gobernador del 2015 Uñac obtuvo 53,59%, Roberto Basualdo (ex bloquismo, se presentó por Compromiso San Juan) alcanzó 30,62% y Martín Turcumán (Pro-Juntos por San Juan) 12,20%. Contra ese resultado, el gobernador está 1,95 pp arriba, Turcumán 7,73 pp abajo y Orrego +1,76 pp arriba que el principal adversario del oficialismo en 2015. Por lo tanto, el resultado de las PASO perfila un nuevo triunfo del frente peronista en la elección general de junio, dada la abultada ventaja del gobernador (en el orden de los 23 pp) y preanuncia un nuevo revés para los referentes de Cambiemos, cuyo candidato quedó tercero en la elección a gobernador en Neuquén; en el caso de San Juan, de hecho el sello no estuvo presente en las primarias, sino que se fragmentó en las candidaturas de Orrego (que prefirió no usar la identidad de Cambiemos) y Turcumán (que había sido el candidato cambiemita en 2015 y ahora compitió con otro signo político). Por lo tanto, como venimos anticipando, se abre un período de elecciones distritales de pronóstico desfavorable para Cambiemos, lo que si bien no predice tendencias nacionales sí se articula en esta coyuntura con encuestas que muestran a CFK en ascenso y a Mauricio Macri amesetado (como venimos revisando en los posteos más recientes), lo que podría alimentar un clima de opinión contrario a la reelección de Macri.
En este marco, otra de las mediciones que se suma a esta serie es la encuesta nacional realizada por Analía del Franco. Sobre una muestra de 1.370 casos recolectada entre el 19 y el 21 de marzo, el escenario con CFK compitiendo la muestra con 35,2% de intención de voto, seguida por Mauricio Macri con 29,6%. La diferencia de 5,6 puntos porcentuales no es estadísticamente significativa, pero sí más nítida que la que hemos visto en estudios anteriores. En tanto, Sergio Massa alcanza 12,2%, Roberto Lavagna 10,2%, Nicolás del Caño 3,3% y Juan Urtubey 2,2%. El economista José Espert roza el 1% (ver datos arriba; click para agrandar). Con esta distribución, nuevamente el pase a ballotage sería entre Unidad Ciudadana y Cambiemos, dado que Alternativa Federal queda 5 pp por detrás de Macri aun sumando linealmente los caudales de sus tres figuras medidas. En cambio, las chances de Alternativa Federal mejoran si la ex presidenta no compite, dado que el caudal de Unidad Ciudadana retrocede 7,3 pp en conjunto y se dispersa entre Agustín Rossi (16%), Daniel Scioli (7,7%) y Felipe Solá (4,1%), en tanto que Massa, Lavagna y Urtubey crecen individualmente y también en la sumatoria (llegan a 29,1%; (ver datos arriba; click para agrandar).
Por otro lado, la consultora también explora un escenario de PASO sin CFK: en ese caso, Axel Kicillof alcanza 23,6%, Rossi 6%, Scioli 5% y Solá 4%; con todo, la respuesta "ninguno" alcanza casi 56%, lo que indica que la intención de voto de la líder de Unidad Ciudadana no se transfiere a otras figuras de ese espacio, al menos por ahora (ver datos más arriba; click para agrandar). Al evaluar la intención de voto en las primarias de los precandidatos a presidentes de Alternativa Federal, Massa llega al 17,3% y Lavagna a 14,5%, un empate técnico (la diferencia de 3,2 pp no es estadísticamente significativa). Quedan relegados el gobernador salteño Urtubey (6,3%) y el senador Miguel Pichetto (3,5%). De manera similar a lo que veíamos en la "interna" de Unidad Ciudadana, la categoría de respuesta "ninguno" supera el 50% (ver datos arriba; click para agrandar). Finalmente, al analizar las tendencias en una PASO de Cambiemos, Martin Lousteau alcanza 29,6% y el actual presidente 26,7%; la categoría "ninguno" más del 37% (ver datos abajo; click para agrandar). La brecha de 2,9 pp entre ambos no es estadísticamente significativa, pero cabe destacar que el dato discrepa mucho del que veíamos en el estudio de CIGP en un posteo anterior, donde Macri se imponía sobre Lousteau con contundencia.
Concepto acuñado por el filósofo inglés Joseph Glanvill, el clima de opinión nos rodea. Existen ciencias para medirlo, pero también hay lugar para lo inesperado, tal como el aleteo de una mariposa en Pekín puede desatar un huracán en México que contraríe el pronóstico del tiempo. Este blog de tendencias de opinión pública e influencia social pretende aportar elementos al "sensor cuasiestadístico" con que sondeamos el ambiente y ser un foro para intercambiar puntos de vista.
domingo, 31 de marzo de 2019
jueves, 28 de marzo de 2019
Palpitando San Juan: tendencias hacia las PASO del 31 de marzo
El próximo domingo 31 de marzo, la provincia de San Juan vota en primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) que marcarán tendencias de cara a la elección general de gobernador del 2 de junio. Veamos qué surge de las encuestas publicadas recientemente en ese distrito. Según la consultora Acierto, el gobernador de esa provincia, el peronista Sergio Uñac, marcha al frente de la intención de voto, con 56,2%. Le sigue Marcelo Orrego, candidato de Cambiemos que dejó atrás ese sello para competir con una lista denominada Con Vos (síntoma del desgaste del sello nacional): 28,1%. Martín Turcumán (Frente San Juan Primero) alcanza 3,3%, mientras que Gustavo Fernández (Dignidad Ciudadana) llega a 2,6%. "Otros" suma 3% y hay casi 7% de indecisos (ver datos arriba; click para agrandar). El relevamiento de datos de la consultora dirigida por Maximiliano Aguiar se realizó entre el 15 y el 27 de marzo, sobre una muestra de 2.525 casos, con un margen de error del 2,37%. La diferencia entre Uñac y Orrego es estadísticamente significativa: 28,1 puntos porcentuales. Así, el gobernador del PJ (su posicionamiento nacional no está definido: no es antiK, pero ha hecho guiños a Roberto Lavagna) duplica la intención de voto del que sería el candidato de Cambiemos en ese distrito, aunque Orrego se ha despegado de ese sello. En cambio, Turcumán está en empate técnico con Fernández. La serie evolutiva muestra a Uñac en leve ascenso y a Orrego en leve descenso, dentro de variaciones estadísticamente no significativas (+ 4 pp en el caso del gobernador y - 2 pp en el caso de su principal contrincante).
A su turno, el sondeo del IOPPS (consultora que dirige Antonio De Tommaso), también realizado en marzo sobre una muestra de 1.400 casos con un margen de error del 2,88%, ubica a Uñac con 58,9% de intención de voto, 30,4% para Orrego, 3,4% para Turcumán y 7,3% entre otros e indecisos (ver datos arriba; click para agrandar). Como se advierte, las diferencias respecto a la encuesta anterior no son estadísticamente significativas: 2,7 pp más para el gobernador, 2,3 pp más para su principal retador y -0,1 pp para Turcumán. La serie evolutiva es más estable: + 1,4 pp para el gobernador respecto a enero pasado y + 0,4 para Orrego. Ninguno de los dos estudios reporta el resultado de los los restantes precandidatos (Nancy Avelín de la Cruzada Renovadora, Alberto Agüero del PTP, Mary Garrido de la Nueva Izquierda y Marcelo Tejada de la Nueva Dirigencia), por lo que habrá que esperar el resultado del domingo para verificar si realmente son tan débiles entre los electores sanjuaninos.
La encuesta de Acierto también midió a los precandidatos a intendentes de los 19 departamentos sanjuaninos. En Rawson, el oficialista Pablo García Nieto supera por casi 11 pp a su adversario en la interna del Frente Todos, Rubén García, mientras que el referente de Con Vos marcha tercero. En Capital, Emilio Baistrocchi le saca 4,3 pp a Franco Aranda, actual intendente (un empate técnico); Colombo, de Con Vos, queda tercero. En Rivadavia y Santa Lucía, Fabián Martín y Juan José Orrego, candidatos de Con Vos, lideran con gran ventaja, superando el 50%. En tanto, en Chimbas, Fabián Gramajo se impone con holgura, superando el 65% de intención de voto, y deja muy atrás a las figuras de Con Vos. En Caucete, la sumatoria del frente oficialista Todos supera a la del candidato de Cambiemos, y en Pocito lidera el mismo frente (ver datos arriba; click para agrandar).
La encuesta del IOPPS coincide en esas tendencias generales: ventaja para Con Vos en Santa Lucía y Rivadavia (por arriba del 50%), mientras que en los demás distritos la tendencia favorece al frente Todos (ver datos arriba; click para agrandar). Volviendo a la disputa por la gobernación, el promedio de ambas mediciones deja a Uñac con 57,6%, a Orrego con 29,3% y a Turcumán con 3,4%. En la elección de gobernador del 2015, Uñac como delfìn del ex gobernador José Gioja obtuvo 53,59%, Roberto Basualdo (ex bloquismo, se presentó por Compromiso San Juan) alcanzó 30,62% y Martín Turcumán (Pro-Juntos por San Juan) 12,20%. Contra ese resultado, el gobernador está 4 pp arriba, Turcumán 8,8 pp abajo y Orrego -1,32 pp abajo que el principal adversario en 2015. Si ajustamos la proyección considerando el resultado de 2015, Uñac queda en 55,6%, Orrego en 29,9% y Turcumán en 7,8%. Si el domingo estas tendencias generales se ratifican con guarismos dentro del mismo orden de magnitud, la primaria en esa provincia dejará un nuevo resultado desfavorable para Cambiemos, que se sumará a la derrota de Carlos Javier Mc Allister frente al radical Daniel Kronerberger en las primarias de La Pampa y al tercer lugar de Horacio "Pechi" Quiroga en la elección de gobernador en Neuquén. En San Juan, el kirchnerismo está integrado al oficialismo, con lo cual, a diferencia de lo que pasó en Neuquén, no habrá una lectura separada de la performance de esa fuerza.
miércoles, 27 de marzo de 2019
Unidad Ciudadana en ascenso, Cambiemos amesetado y un dejá vu del 2015
En la encuesta de CIGP que citamos en el posteo anterior la brecha entre CFK/UC y Macri/Cambiemos es de 4,3 puntos porcentuales. Otra medición reciente, en este caso de la consultora RTD, muestra una brecha de 4,9 pp: 37,4% para la ex presidenta y 32,5% para el actual presidente. En tercer término se ubica Sergio Massa, con 14,5%, muy lejos de la pelea por la primera minoría que le permitía conjeturar con la chance de pasar al ballotage. El precandidato de izquierda alcanza 4,1% de intención de voto, un guarismo que está dentro del caudal histórico de esa fuerza; 5,3% votarían en blanco o anularían el voto y 6,3% se muestran indecisos (ver datos al lado; click para agrandar).
Con apenas matices, esta encuesta confirma el escenario de polarización simétrica entre UC y Cambiemos y, al igual que otros estudios recientes, comienza a mostrar una ventaja más visible a favor de la actual senadora nacional por la provincia de Buenos Aires, aunque sigue siendo estadísticamente no significativa. Como apunta el director de RTD, Nicolás Solari, la foto es muy similar a la de 2015: recordemos que en la primera vuelta presidencial Daniel Scioli alcanzó 37,08% y Macri 34,15%, una brecha de 2,93 pp apenas menor que los 4,9 pp que vemos ahora en este estudio. Según el informe, la diferencia osciló durante 2019: fue casi inexistente entre los últimos días de enero y los primeros de febrero, cuando Macri se acercó a 35%. A partir de ese momento, con el dólar nuevamente en alza y la inflación recalentada, comenzó a ampliarse la brecha hasta los casi 5 pp. La encuesta se basa en una muestra de 1.296 casos con un margen de error de +/- 4,4%. El relevamiento fue realizado entre el 28 de febrero y el 15 de marzo (ver datos arriba; click para agrandar).
El análisis de la intención de voto por segmentos según sexo y zona de residencia arroja que Cristina Fernández lidera la "horse race" por 13 puntos porcentuales entre los hombres (42% versus 29%), mientras que Macri gana entre las mujeres (36% versus 33%). En el caso de Massa, la distribución es bastante simétrica (los 3 pp de diferencia no son estadísticamente significativos). En el desagregado geográfico, el apoyo a CFK se refuerza en el Gran Buenos Aires, conglomerado en donde la ex presidenta lidera las preferencias por 18 pp sobre Macri: 47% sobre 29%. En cambio, el presidente logra una ventaja magra en Capital Federal (37% versus 33%, lo que a este nivel de análisis implica un empate técnico), mientras que la situación en el interior del país está muy pareja (ver datos arriba; click para agrandar). Profundizando el análisis según la autodefinición ideológica de los electores, CFK logra una magra ventaja (6 pp) entre los de centro, arrasa entre los de izquierda (50 pp) y pierde entre los de derecha (-30 pp; ver datos abajo, click para agrandar).
El análisis por nivel de estudios muestra un empate técnico entre los de nivel secundario (brecha de 2 pp a favor de CFK, estadísticamente no significativa), otro empate técnico entre los universitarios (brecha de 1 pp a favor de Macri, estadísticamente no significativa) y ventaja de la ex presidenta entre los de estudios primarios (brecha de 16 pp, estadísticamente significativa; ver datos abajo, click para agrandar).
Además de medir la performance de Massa vs CFK y Macri, RTD también repasa la "interna" Alternativa Federal. Si hubiera una PASO en el peronismo alternativo, el 20% de los electores dijo que participaría. Puestos a competir en una eventual primaria, el ex ministro de Economía Roberto Lavagna logra aventajar a Massa (49% a 40% al interior del espacio) y también relega a Urtubey (11%). Para más datos, al medir piso y techo de cada precandidato, Lavagna también le saca una ventaja al resto: un 13% lo votará y un 23% podría llegar a votarlo (lo que suma un potencial de 36%), contra 9% y 22% de Massa (potencial de 31%), 6% y 17% de Urtubey (potencial de 23%) 2% y 7% de Pichetto (potencial de 9%). La diferencia de 5 pp en el acumulado entre Lavagna y el tigrense no es estadísticamente significativa, pero de concretarse podría inclinar la definición de ese espacio a favor de Lavagna; claro que para eso él debería estar dispuesto a competir en las PASO al menos con una de las otras figuras, algo que hasta ahora él ha rechazado. Contra Urtubey y Pichetto, en cambio, las brechas a favor de Lavagna sí son contundentes. Algo similar se detecta en términos de rechazo electoral (construido a partir de la respuesta "no lo votará"). Lavagna alcanza 54% y Massa 60%; nuevamente, 6 pp que no resultan estadísticamente significativos. En cambio, Urtubey llega a un rechazo del 69% y Pichetto a uno del 78%. Esto sugiere que la "interna" del espacio está polarizada entre Lavagna y Massa, sin chances para el gobernador salteño ni el senador rionegrino.
Con apenas matices, esta encuesta confirma el escenario de polarización simétrica entre UC y Cambiemos y, al igual que otros estudios recientes, comienza a mostrar una ventaja más visible a favor de la actual senadora nacional por la provincia de Buenos Aires, aunque sigue siendo estadísticamente no significativa. Como apunta el director de RTD, Nicolás Solari, la foto es muy similar a la de 2015: recordemos que en la primera vuelta presidencial Daniel Scioli alcanzó 37,08% y Macri 34,15%, una brecha de 2,93 pp apenas menor que los 4,9 pp que vemos ahora en este estudio. Según el informe, la diferencia osciló durante 2019: fue casi inexistente entre los últimos días de enero y los primeros de febrero, cuando Macri se acercó a 35%. A partir de ese momento, con el dólar nuevamente en alza y la inflación recalentada, comenzó a ampliarse la brecha hasta los casi 5 pp. La encuesta se basa en una muestra de 1.296 casos con un margen de error de +/- 4,4%. El relevamiento fue realizado entre el 28 de febrero y el 15 de marzo (ver datos arriba; click para agrandar).
El análisis de la intención de voto por segmentos según sexo y zona de residencia arroja que Cristina Fernández lidera la "horse race" por 13 puntos porcentuales entre los hombres (42% versus 29%), mientras que Macri gana entre las mujeres (36% versus 33%). En el caso de Massa, la distribución es bastante simétrica (los 3 pp de diferencia no son estadísticamente significativos). En el desagregado geográfico, el apoyo a CFK se refuerza en el Gran Buenos Aires, conglomerado en donde la ex presidenta lidera las preferencias por 18 pp sobre Macri: 47% sobre 29%. En cambio, el presidente logra una ventaja magra en Capital Federal (37% versus 33%, lo que a este nivel de análisis implica un empate técnico), mientras que la situación en el interior del país está muy pareja (ver datos arriba; click para agrandar). Profundizando el análisis según la autodefinición ideológica de los electores, CFK logra una magra ventaja (6 pp) entre los de centro, arrasa entre los de izquierda (50 pp) y pierde entre los de derecha (-30 pp; ver datos abajo, click para agrandar).
El análisis por nivel de estudios muestra un empate técnico entre los de nivel secundario (brecha de 2 pp a favor de CFK, estadísticamente no significativa), otro empate técnico entre los universitarios (brecha de 1 pp a favor de Macri, estadísticamente no significativa) y ventaja de la ex presidenta entre los de estudios primarios (brecha de 16 pp, estadísticamente significativa; ver datos abajo, click para agrandar).
Además de medir la performance de Massa vs CFK y Macri, RTD también repasa la "interna" Alternativa Federal. Si hubiera una PASO en el peronismo alternativo, el 20% de los electores dijo que participaría. Puestos a competir en una eventual primaria, el ex ministro de Economía Roberto Lavagna logra aventajar a Massa (49% a 40% al interior del espacio) y también relega a Urtubey (11%). Para más datos, al medir piso y techo de cada precandidato, Lavagna también le saca una ventaja al resto: un 13% lo votará y un 23% podría llegar a votarlo (lo que suma un potencial de 36%), contra 9% y 22% de Massa (potencial de 31%), 6% y 17% de Urtubey (potencial de 23%) 2% y 7% de Pichetto (potencial de 9%). La diferencia de 5 pp en el acumulado entre Lavagna y el tigrense no es estadísticamente significativa, pero de concretarse podría inclinar la definición de ese espacio a favor de Lavagna; claro que para eso él debería estar dispuesto a competir en las PASO al menos con una de las otras figuras, algo que hasta ahora él ha rechazado. Contra Urtubey y Pichetto, en cambio, las brechas a favor de Lavagna sí son contundentes. Algo similar se detecta en términos de rechazo electoral (construido a partir de la respuesta "no lo votará"). Lavagna alcanza 54% y Massa 60%; nuevamente, 6 pp que no resultan estadísticamente significativos. En cambio, Urtubey llega a un rechazo del 69% y Pichetto a uno del 78%. Esto sugiere que la "interna" del espacio está polarizada entre Lavagna y Massa, sin chances para el gobernador salteño ni el senador rionegrino.
domingo, 24 de marzo de 2019
viernes, 22 de marzo de 2019
Tendencias nacionales: Unidad Ciudadana en ascenso, Cambiemos amesetado (3)
Otra de las mediciones que se suma a la serie de las que muestran a Cambiemos amesetado y por detrás de Unidad Ciudadana es la realizada por CIGP. Su encuesta más reciente se basa en una muestra nacional de 1.070 casos en Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y provincia de Buenos Aires (PBA), Santa Fe, Chubut, Córdoba, Tucumán, Salta y Mendoza, con un margen de error de +/- 3,5%. La intención de voto de UC alcanza 34,77% vs 30,47% del oficialismo; una brecha de 4,3 puntos porcentuales, estadísticamente no significativa, que confirma el empate técnico y la polarización simétrica (la suma de las dos fuerzas más votadas alcanza 65,24%). El Peronismo no K, equivalente espacial a Alternativa Federal, sigue lejos del nivel necesario para entrar a ballotage y se ubica a casi 20 pp del oficialismo (ver datos al lado; click para agrandar).
Desde abril de 2018, la intención de voto de Unidad Ciudadana aumentó más de 10 puntos porcentuales, la del peronismo no K creció 6 pp y la del oficialismo cedió 4 pp. La mejora de ambas alternativas opositoras y la tendencia decreciente de Cambiemos pone en evidencia el desgaste de la gestión Macri. De cara al ballotage, CFK alcanza 40,75% y Macri 35,70% (ventaja de 5,05 pp para la ex presidenta, estadísticamente no significativa). Aunque depende de que la ex presidenta salga del escenario para pasar a la segunda vuelta, con Roberto Lavagna medido en esa instancia la tendencia es 36,45% para el ex ministro y 32,15% para el presidente (brecha de 4,3 pp, menor que la de CFK); en cambio, Macri logra una leve ventaja sobre (36,82% a 31,96%) y Sergio Massa (36,82% a 31,96%). Por otro lado, CIGP también explora escenarios de primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) por espacios: al interior de Cambiemos, los votantes del oficialismo se inclinan mayoritariamente por Mauricio Macri (84,66%), seguido de lejos por Martín Lousteau (6,75%; ver datos arriba, click para agrandar); la gobernadora de PBA, María E. Vidal, no fue medida; de hecho, los análisis asumen que si llegara a ser candidata sería por una renuncia de Macri, y no en competencia con él.
En Unidad Ciudadana, Cristina Fernández de Kirchner se mantiene como amplia favorita (83,87%), escoltada por Agustín Rossi (6,99%) y Felipe Solá (4,84%; ver datos arriba, click para agrandar). Si finalmente Cristina decidiera no competir, Felipe Solá alcanza 32,97% y Agustín Rossi 31,35% (ver datos abajo, click para agrandar). Como se advierte, el escenario es más competitivo cuando no juega CFK, dado que la diferencia de 1,62 pp entre ambos no es estadísticamente significativa.
Finalmente, en el caso del peronismo federal, el ex ministro Roberto Lavagna encabeza las preferencias con 44,64%, seguido por Sergio Massa (12,50%), Marcelo Tinelli (10,71%), Juan Urtubey (8,93%) y Miguel Ángel Pichetto (7,14%; ver datos abajo, click para agrandar). La diferencia entre el economista y las demás figuras es estadísticamente significativa (mayor a 30 pp). Si confiara en estas proyecciones, Lavagna no debería temer medirse en las PASO contra los demás dirigentes, aunque hasta el momento parece mantener su postura de competir sólo si surge como candidato de consenso del espacio. Con todo, aún si se resolviera ese problema de un modo u otro, el peronismo federal, como vimos, sigue a 20 pp de la disputa por la primera minoría electoral, con lo cual el primer desafío es romper la polarización simétrica.
Desde abril de 2018, la intención de voto de Unidad Ciudadana aumentó más de 10 puntos porcentuales, la del peronismo no K creció 6 pp y la del oficialismo cedió 4 pp. La mejora de ambas alternativas opositoras y la tendencia decreciente de Cambiemos pone en evidencia el desgaste de la gestión Macri. De cara al ballotage, CFK alcanza 40,75% y Macri 35,70% (ventaja de 5,05 pp para la ex presidenta, estadísticamente no significativa). Aunque depende de que la ex presidenta salga del escenario para pasar a la segunda vuelta, con Roberto Lavagna medido en esa instancia la tendencia es 36,45% para el ex ministro y 32,15% para el presidente (brecha de 4,3 pp, menor que la de CFK); en cambio, Macri logra una leve ventaja sobre (36,82% a 31,96%) y Sergio Massa (36,82% a 31,96%). Por otro lado, CIGP también explora escenarios de primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) por espacios: al interior de Cambiemos, los votantes del oficialismo se inclinan mayoritariamente por Mauricio Macri (84,66%), seguido de lejos por Martín Lousteau (6,75%; ver datos arriba, click para agrandar); la gobernadora de PBA, María E. Vidal, no fue medida; de hecho, los análisis asumen que si llegara a ser candidata sería por una renuncia de Macri, y no en competencia con él.
En Unidad Ciudadana, Cristina Fernández de Kirchner se mantiene como amplia favorita (83,87%), escoltada por Agustín Rossi (6,99%) y Felipe Solá (4,84%; ver datos arriba, click para agrandar). Si finalmente Cristina decidiera no competir, Felipe Solá alcanza 32,97% y Agustín Rossi 31,35% (ver datos abajo, click para agrandar). Como se advierte, el escenario es más competitivo cuando no juega CFK, dado que la diferencia de 1,62 pp entre ambos no es estadísticamente significativa.
Finalmente, en el caso del peronismo federal, el ex ministro Roberto Lavagna encabeza las preferencias con 44,64%, seguido por Sergio Massa (12,50%), Marcelo Tinelli (10,71%), Juan Urtubey (8,93%) y Miguel Ángel Pichetto (7,14%; ver datos abajo, click para agrandar). La diferencia entre el economista y las demás figuras es estadísticamente significativa (mayor a 30 pp). Si confiara en estas proyecciones, Lavagna no debería temer medirse en las PASO contra los demás dirigentes, aunque hasta el momento parece mantener su postura de competir sólo si surge como candidato de consenso del espacio. Con todo, aún si se resolviera ese problema de un modo u otro, el peronismo federal, como vimos, sigue a 20 pp de la disputa por la primera minoría electoral, con lo cual el primer desafío es romper la polarización simétrica.
miércoles, 20 de marzo de 2019
Tendencias nacionales: Unidad Ciudadana en ascenso, Cambiemos amesetado (2)
Otra de las encuestas que muestra al oficialismo estancado y a Unidad Ciudadana en ascenso es la realizada en marzo por el CEOP. Según esta medición, de cara a la primera vuelta hoy la ex presidenta alcanza 31,4% de intención de voto, contra 27,3% del presidente Mauricio Macri y 10,8% de Sergio Massa. El tigrense aventaja a Roberto Lavagna (8,5%) aunque por una diferencia estadísticamente no significativa (2,3 puntos porcentuales). En cambio, el gobernador de Salta, Juan Urtubey, sí aparece claramente relegado frente a las otras dos figuras de Alternativa Federal: apenas alcanza 2,9% (ver datos al lado; click para agrandar). La brecha entre CFK y Macri es de 4,1 pp y estadísticamente no significativa, pero sí más nítida de la que veíamos en el estudio de Synopsis (apenas 1,2 pp). Aun sumando de manera lineal la intención de voto de Massa, Lavagna y Urtubey, AF queda por detrás de Macri: 22,2% a 27,3%, lo que ilustra las dificultades que tiene ese espacio para acercarse a la chance de entrar al ballotage. Por ahora, se ratifica el panorama de polarización simétrica entre Unidad Ciudadana y Cambiemos.
Aunque con otros precandidatos medidos y un resultado más disperso, la encuesta más reciente de OhPanel también muestra a CFK por delante de Macri, y en este caso por primera vez en la serie de esa consultora: 24% a 22% (ver datos arriba; click para agrandar). Nuevamente, empate técnico, pero con el matiz de que la ex presidenta pasa a la delantera en la "horse race". En el otro extremo, la encuesta nacional de Hugo Haime del mes de febrero mide, entre otros, un escenario "concentrado" en pocos precandidatos: CFK 37,7%, Macri 27,1%, Massa 19,3%, Del Caño 5,9%, ninguno/blanco/nulo 7%, ns/nc 3,1%. Como vemos, aquí la brecha a favor de la ex presidenta se estira hasta 10,6 pp y ya es estadísticamente significativa (rompe el empate técnico). Si en lugar de Massa compite el gobernador de Salta, el resultado es CFK 41,6%, Macri 26,7%, Urtubey 12,9%, Del Caño 7,6%, ninguno/en blanco/nulo 5,9%, ns/nc 5,2%. En este caso, la ventaja de la ex presidenta crece hasta casi 15 pp y la pone en condiciones de ganar en primera vuelta, sin ballotage (dado que supera el 40% y le saca más de 10 pp al segundo, que no llega al 30%). Con Lavagna compitiendo por el peronismo federal, CFK alcanza 41,8%, Macri 26,7%, el ex ministro 14,6%, Del Caño 5,8%, ninguno/en blanco/nulo 6,1% y ns/nc 5%. En este caso, la brecha a favor de la ex presidenta es de 15,1 pp y nuevamente queda en condiciones de ganar en primera vuelta. A priori, Massa resulta el más competitivo de los precandidatos de AF: supera por 4,7 pp a Lavagna y por 6,4 pp al gobernador salteño.
A su turno, en la medición de Rouvier & Asociados de marzo la brecha entre CFK (casi 33%) y Macri (24,6%) es más nítida de la que reporta Synopsis: 8,3 pp, ya estadísticamente significativa (ver datos arriba; click para agrandar). Sumados, Massa y Lavagna alcanzan 21,7% y quedan a tiro de Macri (apenas 2,9 pp de diferencia), pero que esa suma se concrete está por verse. A priori, la encuesta sigue confirmando el pase a ballotage de Unidad Ciudadana y Cambiemos, pero con una tendencia de Macri a retroceder respecto a la medición anterior de la misma consultora (-2,4 pp) y una tendencia creciente en CFK (+2,8 pp), de lo que resulta una brecha más grande: pasa de 3,1 pp a 8,6 pp. De cara al ballotage, en cambio, la diferencia se estrecha, si bien se mantiene en favor de la ex presidenta: 40,9% a 37,5%, apenas 3,4 pp (ver datos abajo; click para agrandar). El monitor mensual de marzo de Rouvier se basa en una muestra nacional de 1.200 casos con +/- 2,8% de margen de error.
Si sumamos estas tres mediciones al promedio para contabilizar 14 encuestas en total (enero-febrero-marzo 2019) y reemplazamos las que actualizaron tendencias entre esos meses (de modo que quede una sola medición de cada una, la más reciente), el promedio da 30,1% para CFK y 26,5% para Macri: 3,6 pp de brecha, aún estadísticamente no significativa pero más visible que los promedios anteriores. En tanto, en el promedio elaborado por Proyección Ciudadana sólo con 4 mediciones de febrero, CFK alcanza 31,41% y Macri 27,06%, de lo que resulta una brecha de 4,35 pp (ver datos abajo; click para agrandar). Esto insinúa que en febrero la ventaja de la ex presidenta comienza a estirarse, si bien dentro de guarismos que estadísticamente aún no son significativos.
Aunque con otros precandidatos medidos y un resultado más disperso, la encuesta más reciente de OhPanel también muestra a CFK por delante de Macri, y en este caso por primera vez en la serie de esa consultora: 24% a 22% (ver datos arriba; click para agrandar). Nuevamente, empate técnico, pero con el matiz de que la ex presidenta pasa a la delantera en la "horse race". En el otro extremo, la encuesta nacional de Hugo Haime del mes de febrero mide, entre otros, un escenario "concentrado" en pocos precandidatos: CFK 37,7%, Macri 27,1%, Massa 19,3%, Del Caño 5,9%, ninguno/blanco/nulo 7%, ns/nc 3,1%. Como vemos, aquí la brecha a favor de la ex presidenta se estira hasta 10,6 pp y ya es estadísticamente significativa (rompe el empate técnico). Si en lugar de Massa compite el gobernador de Salta, el resultado es CFK 41,6%, Macri 26,7%, Urtubey 12,9%, Del Caño 7,6%, ninguno/en blanco/nulo 5,9%, ns/nc 5,2%. En este caso, la ventaja de la ex presidenta crece hasta casi 15 pp y la pone en condiciones de ganar en primera vuelta, sin ballotage (dado que supera el 40% y le saca más de 10 pp al segundo, que no llega al 30%). Con Lavagna compitiendo por el peronismo federal, CFK alcanza 41,8%, Macri 26,7%, el ex ministro 14,6%, Del Caño 5,8%, ninguno/en blanco/nulo 6,1% y ns/nc 5%. En este caso, la brecha a favor de la ex presidenta es de 15,1 pp y nuevamente queda en condiciones de ganar en primera vuelta. A priori, Massa resulta el más competitivo de los precandidatos de AF: supera por 4,7 pp a Lavagna y por 6,4 pp al gobernador salteño.
A su turno, en la medición de Rouvier & Asociados de marzo la brecha entre CFK (casi 33%) y Macri (24,6%) es más nítida de la que reporta Synopsis: 8,3 pp, ya estadísticamente significativa (ver datos arriba; click para agrandar). Sumados, Massa y Lavagna alcanzan 21,7% y quedan a tiro de Macri (apenas 2,9 pp de diferencia), pero que esa suma se concrete está por verse. A priori, la encuesta sigue confirmando el pase a ballotage de Unidad Ciudadana y Cambiemos, pero con una tendencia de Macri a retroceder respecto a la medición anterior de la misma consultora (-2,4 pp) y una tendencia creciente en CFK (+2,8 pp), de lo que resulta una brecha más grande: pasa de 3,1 pp a 8,6 pp. De cara al ballotage, en cambio, la diferencia se estrecha, si bien se mantiene en favor de la ex presidenta: 40,9% a 37,5%, apenas 3,4 pp (ver datos abajo; click para agrandar). El monitor mensual de marzo de Rouvier se basa en una muestra nacional de 1.200 casos con +/- 2,8% de margen de error.
Si sumamos estas tres mediciones al promedio para contabilizar 14 encuestas en total (enero-febrero-marzo 2019) y reemplazamos las que actualizaron tendencias entre esos meses (de modo que quede una sola medición de cada una, la más reciente), el promedio da 30,1% para CFK y 26,5% para Macri: 3,6 pp de brecha, aún estadísticamente no significativa pero más visible que los promedios anteriores. En tanto, en el promedio elaborado por Proyección Ciudadana sólo con 4 mediciones de febrero, CFK alcanza 31,41% y Macri 27,06%, de lo que resulta una brecha de 4,35 pp (ver datos abajo; click para agrandar). Esto insinúa que en febrero la ventaja de la ex presidenta comienza a estirarse, si bien dentro de guarismos que estadísticamente aún no son significativos.
martes, 19 de marzo de 2019
Tendencias nacionales: Unidad Ciudadana en ascenso, Cambiemos amesetado (1)
Más allá de los matices en las mediciones, repasando las encuestas nacionales conocidas en 2019 va insinuándose una tendencia: el desgaste del oficialismo estanca la intención de voto de Cambiemos, mientras que la de Unidad Ciudadana tiende a ascender, consolidándose como alternativa opositora. Así, en la medición de Synopsis correspondiente a marzo, UC roza el 33% y Cambiemos alcanza 31,6% (ver datos al lado; click para agrandar). La diferencia de 1,2 puntos porcentuales no es estadísticamente significativa y confirma un escenario de empate técnico. Se mantiene la polarización simétrica que deja afuera de la disputa por la primera minoría electoral a Alternativa Federal (13,6%): como apuntó ayer la consultora Celia Kleiman, se trata de una "two horse race" (carrera de caballos con dos contendientes principales). Con estos números, Alternativa Federal no tiene chances de entrar al ballotage.
La encuesta se hizo el 8 y 9 de marzo, sobre una muestra de 1.314 casos relevados en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y las principales ciudades del interior del país (La Plata, Mar del Plata, Bahía Blanca, Tandil, San Nicolás, Junín, Rosario, Paraná, Comodoro Rivadavia, San Miguel del Tucumán, Santa Fe, Córdoba, Mendoza, Salta, Corrientes y Neuquén), con un margen de error de +/- 2,8%. Si se analiza la serie evolutiva, se advierte el estancamiento de Cambiemos y la tendencia ascendente de Unidad Ciudadana, que por segunda medición consecutiva de esta consultora se coloca al frente del oficialismo. Alternativa Federal también insinúa una tendencia ascendente, pero aún así se ubica 18 pp detrás de la segunda fuerza, una brecha que hoy parece insalvable de cara al pase a ballotage (ver datos arriba; click para agrandar).
Cuando se cambia el foco para analizar el evolutivo oficialismo vs oposición, si bien las variaciones respecto a la medición anterior no son estadísticamente significativas, se advierte que la tendencia favorable a la oposición llega al pico de la serie histórica, en tanto que el oficialismo tocó piso en los dos meses previos y ahora está en el segundo registro más bajo de la línea de fiebre (ver datos arriba; click para agrandar).
En los escenarios de segunda vuelta, Mauricio Macri sacaría el 45,4% y Cristina Fernández de Kirchner 44,9% (sin proyectar) y 50,8% vs 49,2% proyectado; la brecha de 1,6 pp es un empate técnico. En caso de que CFK no jugara en primera vuelta, las simulaciones de escenarios alternativos muestran a Macri con 51,7% frente al 48,3% de Agustín Rossi; 49,8% contra los 50,2% de Felipe Solá, 48,8% vs 51,2% de Sergio Massa, 45,9% vs 54,1% de Juan Urtubey y 41,1% ante los 58,9% de Roberto Lavagna (ver datos arriba; click para agrandar). La ventaja más abultada que logra el ex ministro sobre Macri es atribuible a que sumaría todo el caudal de CFK a su figura en caso de que ella no jugara; sin embargo, como vemos en todas las encuestas revisadas hasta el momento, Lavagna no llega al 25% de intención de voto mínimo para aspirar a entrar en ballotage, de lo cual se sigue que un mano a mano entre él y el presidente deviene abstracto mientras no cambie esa condición de inicio; lo mismo aplica a las otras figuras alternativas a CFK.
Synopsis también explora la hipótesis de una segunda vuelta entre la gobernadora de Buenos Aires, María E. Vidal, vs Cristina Fernández de Kirchner: en ese caso, Vidal alcanza 50,9% (y 52,9% con proyección de indecisos) y CFK 44,8% a CFK (47,1% con proyección de indecisos; ver datos arriba, click para agrandar). La diferencia de 5,8 pp no es estadísticamente significativa y además, como insistimos, resulta aventurado medir intención de voto en ballotage sin tener los datos de la primera vuelta (que son claves en la estructuración de las tendencias posteriores). En una lectura paramétrica, Macri con proyección de indecisos alcanza 50,8% (es decir, 2,1 pp menos que Vidal), mientras que CFK contra Macri llega con proyección de indecisos al 49,2% (es decir, 2,11 pp más que contra Vidal). Con la foto de hoy, se insinúa que Vidal puede ser más competitiva, pero no se trata de diferencias categóricas. Si el presidente Macri se estanca y CFK mantiene su tendencia creciente, o más aún si Macri cediera, entonces podría madurar un plan "V" en el oficialismo.
La encuesta se hizo el 8 y 9 de marzo, sobre una muestra de 1.314 casos relevados en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y las principales ciudades del interior del país (La Plata, Mar del Plata, Bahía Blanca, Tandil, San Nicolás, Junín, Rosario, Paraná, Comodoro Rivadavia, San Miguel del Tucumán, Santa Fe, Córdoba, Mendoza, Salta, Corrientes y Neuquén), con un margen de error de +/- 2,8%. Si se analiza la serie evolutiva, se advierte el estancamiento de Cambiemos y la tendencia ascendente de Unidad Ciudadana, que por segunda medición consecutiva de esta consultora se coloca al frente del oficialismo. Alternativa Federal también insinúa una tendencia ascendente, pero aún así se ubica 18 pp detrás de la segunda fuerza, una brecha que hoy parece insalvable de cara al pase a ballotage (ver datos arriba; click para agrandar).
Cuando se cambia el foco para analizar el evolutivo oficialismo vs oposición, si bien las variaciones respecto a la medición anterior no son estadísticamente significativas, se advierte que la tendencia favorable a la oposición llega al pico de la serie histórica, en tanto que el oficialismo tocó piso en los dos meses previos y ahora está en el segundo registro más bajo de la línea de fiebre (ver datos arriba; click para agrandar).
Synopsis también explora la hipótesis de una segunda vuelta entre la gobernadora de Buenos Aires, María E. Vidal, vs Cristina Fernández de Kirchner: en ese caso, Vidal alcanza 50,9% (y 52,9% con proyección de indecisos) y CFK 44,8% a CFK (47,1% con proyección de indecisos; ver datos arriba, click para agrandar). La diferencia de 5,8 pp no es estadísticamente significativa y además, como insistimos, resulta aventurado medir intención de voto en ballotage sin tener los datos de la primera vuelta (que son claves en la estructuración de las tendencias posteriores). En una lectura paramétrica, Macri con proyección de indecisos alcanza 50,8% (es decir, 2,1 pp menos que Vidal), mientras que CFK contra Macri llega con proyección de indecisos al 49,2% (es decir, 2,11 pp más que contra Vidal). Con la foto de hoy, se insinúa que Vidal puede ser más competitiva, pero no se trata de diferencias categóricas. Si el presidente Macri se estanca y CFK mantiene su tendencia creciente, o más aún si Macri cediera, entonces podría madurar un plan "V" en el oficialismo.
domingo, 17 de marzo de 2019
La raíz socioeconómica de la crisis sociopolítica (3): problemas y metro cuadrado de los electores
Ampliando el repaso para incluir otras mediciones, se confirma la centralidad de los problemas socioeconómicos en la agenda social de los electores argentinos. Según el estudio realizado en febrero pasado por la consultora Opinaia, la economía alcanza 23% de menciones, la inflación 16%, la pobreza 10% y el desempleo 8%: esto suma un 57%, con lo cual casi 6 de cada 10 respuestas se asocian a los efectos socioeconómicos de gestión (ver datos al costado; click para agrandar). A su turno, la consultora Gustavo Córdoba & Asociados detectó un patrón similar en su encuesta del mismo mes: casi 23% de menciones para inflación, 20,3% para endeudamiento, 12,4% para desempleo y 7,9% para pobreza, lo cual suma 63,5% (ver datos abajo; click para agrandar).
Así, más allá de los matices entre mediciones, parece difícil que la agenda de campaña del oficialismo de cara a las PASO de agosto y las presidenciales de octubre pueda eludir los issues socioeconómicos para apoyarse en los que considera le resultan más favorables, como la corrupción: que si bien este tema rankea alto en las menciones, no es de ninguna manera la prioridad hoy, dado que su impacto en el metro cuadrado de los electores es menor que el de problemas como la inflación. Por su parte, las mediciones de Taquion también confirman que la economía está al tope de los problemas que preocupan a los argentinos, en tanto que la inseguridad y la desocupación ocupan el segundo y el tercer puesto de las menciones (ver datos abajo; click para agrandar).
Profundizando en el tema desocupación, la consultora indagó en la preocupación por quedarse sin trabajo en los próximos meses: el 47,2% de los electores respondió que esa posibilidad le preocupa bastante o mucho, mientras que el 12% de los encuestados dijo estar ya desempleado; este dato "blando" (en tanto surge de una encuesta) está en el orden de magnitud del dato duro de desempleo que se dará a conocer en breve, pues las estimaciones preliminares apuntan a que el guarismo estará en el orden de los dos dígitos. Menos del 40% dice que le preocupa poco o nada la posibilidad de quedarse sin trabajo en los próximos meses (ver datos abajo; click para agrandar).
Por otro lado, según una encuesta de Centro de Estudios Metropolitanos (CEM) las tarifas siguen en el centro de las preocupaciones de los habitantes del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA, un conglomerado que incluye a Capital Federal y al Gran Buenos Aires): para más del 70% las facturas de los servicios públicos resultan caras o imposibles de pagar. “Para la inmensa mayoría el costo de las tarifas es una preocupación diaria. Siete de cada 10 lo viven como un problema para sus economías domésticas. La falta de certezas sobre de cuánto será la boleta de luz y gas amenaza cualquier proyecto personal. Un horizonte de aumentos ininterrumpidos de tarifas con pérdida de poder adquisitivo del salario no hace más que incrementar los miedos e inseguridades sociales”, dice Matías Barroetaveña, director del CEM. Según el informe, en el segundo cordón del conurbano casi la mitad de dice que las tarifas son imposibles de pagar y la percepción sobre los costos de los servicios públicos sigue en los peores valores de la serie evolutiva. En las mediciones del Monitor de Clima Social en las zonas donde se realiza la encuesta (CABA, conurbano sur, oeste y norte) la opinión negativa sobre el alto costo de los servicios se resiste a bajar: es del 75% para el gas, 76% para la luz y 62% para el agua. Es decir, alrededor de dos tercios de la población experimenta las tarifas de esos servicios como una amenaza a su economía doméstica.
De acuerdo al estudio, el pico de descontento se dio en junio de 2018 en pleno proceso de crisis económica (detonada a partir de la suba del dólar desde abril). En septiembre pasado los guarismos se estabilizaron en terreno negativo, y transcurridos 6 meses no ha habido mejora alguna ni tampoco una “naturalización” de los costos, según el CEM. El dato más relevante es que en el segundo cordón alrededor de la mitad dice no poder pagar las tarifas en general; en el oeste y el sur, el 47% afirma que no puede pagar la luz, y en la zona sur el 46% dice que no puede pagar el gas.
Así, más allá de los matices entre mediciones, parece difícil que la agenda de campaña del oficialismo de cara a las PASO de agosto y las presidenciales de octubre pueda eludir los issues socioeconómicos para apoyarse en los que considera le resultan más favorables, como la corrupción: que si bien este tema rankea alto en las menciones, no es de ninguna manera la prioridad hoy, dado que su impacto en el metro cuadrado de los electores es menor que el de problemas como la inflación. Por su parte, las mediciones de Taquion también confirman que la economía está al tope de los problemas que preocupan a los argentinos, en tanto que la inseguridad y la desocupación ocupan el segundo y el tercer puesto de las menciones (ver datos abajo; click para agrandar).
Profundizando en el tema desocupación, la consultora indagó en la preocupación por quedarse sin trabajo en los próximos meses: el 47,2% de los electores respondió que esa posibilidad le preocupa bastante o mucho, mientras que el 12% de los encuestados dijo estar ya desempleado; este dato "blando" (en tanto surge de una encuesta) está en el orden de magnitud del dato duro de desempleo que se dará a conocer en breve, pues las estimaciones preliminares apuntan a que el guarismo estará en el orden de los dos dígitos. Menos del 40% dice que le preocupa poco o nada la posibilidad de quedarse sin trabajo en los próximos meses (ver datos abajo; click para agrandar).
Por otro lado, según una encuesta de Centro de Estudios Metropolitanos (CEM) las tarifas siguen en el centro de las preocupaciones de los habitantes del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA, un conglomerado que incluye a Capital Federal y al Gran Buenos Aires): para más del 70% las facturas de los servicios públicos resultan caras o imposibles de pagar. “Para la inmensa mayoría el costo de las tarifas es una preocupación diaria. Siete de cada 10 lo viven como un problema para sus economías domésticas. La falta de certezas sobre de cuánto será la boleta de luz y gas amenaza cualquier proyecto personal. Un horizonte de aumentos ininterrumpidos de tarifas con pérdida de poder adquisitivo del salario no hace más que incrementar los miedos e inseguridades sociales”, dice Matías Barroetaveña, director del CEM. Según el informe, en el segundo cordón del conurbano casi la mitad de dice que las tarifas son imposibles de pagar y la percepción sobre los costos de los servicios públicos sigue en los peores valores de la serie evolutiva. En las mediciones del Monitor de Clima Social en las zonas donde se realiza la encuesta (CABA, conurbano sur, oeste y norte) la opinión negativa sobre el alto costo de los servicios se resiste a bajar: es del 75% para el gas, 76% para la luz y 62% para el agua. Es decir, alrededor de dos tercios de la población experimenta las tarifas de esos servicios como una amenaza a su economía doméstica.
De acuerdo al estudio, el pico de descontento se dio en junio de 2018 en pleno proceso de crisis económica (detonada a partir de la suba del dólar desde abril). En septiembre pasado los guarismos se estabilizaron en terreno negativo, y transcurridos 6 meses no ha habido mejora alguna ni tampoco una “naturalización” de los costos, según el CEM. El dato más relevante es que en el segundo cordón alrededor de la mitad dice no poder pagar las tarifas en general; en el oeste y el sur, el 47% afirma que no puede pagar la luz, y en la zona sur el 46% dice que no puede pagar el gas.
sábado, 16 de marzo de 2019
La raíz socioeconómica de la crisis sociopolítica (2): problemas y metro cuadrado de los electores
Uno de los desafíos que enfrenta Cambiemos para lograr la continuidad en el poder este año pasa por el dato de que sus efectos socioeconómicos de gestión impactan en el metro cuadrado de los electores configurando una agenda de problemas que el gobierno no puede capitalizar de manera favorable. Repasaremos varios estudios en este análisis, comenzando por los más recientes y remontándonos unos meses atrás. En primer lugar, según la consultora M&R/Query, entre los temas que más preocupan hoy se destacan la inflación (37%), el desempleo (28%), la inseguridad (15%), la corrupción (10%), la educación (6%) y la salud (4%). Así, el informe apunta que “la preocupación por los temas económicos (inflación y desempleo) predominan en la agenda de la gente, y se comportan como en ‘espejo invertido’ respecto a los temas de inseguridad y corrupción” (ver datos al inicio del posteo, click para agrandar).
Por su parte, un relevamiento llevado a cabo por la Universidad de San Andrés (Udesa) arrojó que actualmente los principales problemas para los ciudadanos son: inflación (54%), inseguridad (40%), desempleo (36%), pobreza (26%), corrupción (24%), los políticos (21%), bajos salarios (20%), educación (17%), Justicia (17%), endeudamiento externo (16%), narcotráfico (12%). Con menos de 10% de menciones se ubican salud (8%), acceso a la vivienda propia (3%), otros (2%), transporte (2%), la Policía (1%) y villas miseria (1%). Según el informe, la percepción sobre el principal problema del país varió en la comparación interanual: en 2018 en primer lugar se ubicaba la inseguridad y hoy se ubica en segundo término (ver datos arriba y abajo; click para agrandar).
En tanto, según el estudio realizado en febrero por Synopsis, la preocupación por la inflación, que había cedido en el trimestre anterior, volvió a subir ese mes hasta rozar el 35% (un rebote de 4,3 puntos porcentuales). De esta forma, las preocupaciones económicas vuelven a ascender y llegan al 54,0%. También se insinúa un rebote de la preocupación por la corrupción (+2,3 pp), señalada como el principal problema por casi el 20% (ver datos abajo; click para agrandar).
Con todo, el informe de Synopsis del mes anterior (febrero) apuntaba que si bien el malestar socioeconómico es manifiesto y evidente en las demandas, no recaía totalmente sobre el actual gobierno: a la hora de repartir responsabilidades por la situación actual, casi el 37% la asociaba a Macri, mientras que un 42,2% la asociaba a CFK. La brecha de 5,3 pp no era estadísticamente significativa, pero insinuaba que "la grieta" sigue permeando en las percepciones sobre este tópico y que el argumento de la "herencia K" aún funcionaba en segmentos amplios. La pregunta que se impone es qué sucedería si se repite esa pregunta luego del fin de "veranito" cambiario y con la nueva aceleración de la inflación, la suba del dólar y de las tasas (que frenan al tipo de cambio a costa de prolongar la recesión).
Esa "grieta perceptiva" es confirmada también por las mediciones de D’Alessio/IROL. Según el informe de esa consultora elaborado a partir de la medición cerrada a fines de enero pasado, “las variables económicas y las perspectivas sobre su evolución siguen siendo la principal preocupación de los argentinos. La inseguridad es el segundo tema de angustia para los ciudadanos. La agenda continúa con críticas sobre el reparto de subsidios y un rechazo a la corrupción, donde cuestionan al Gobierno anterior y también al actual”.
Por su parte, un relevamiento llevado a cabo por la Universidad de San Andrés (Udesa) arrojó que actualmente los principales problemas para los ciudadanos son: inflación (54%), inseguridad (40%), desempleo (36%), pobreza (26%), corrupción (24%), los políticos (21%), bajos salarios (20%), educación (17%), Justicia (17%), endeudamiento externo (16%), narcotráfico (12%). Con menos de 10% de menciones se ubican salud (8%), acceso a la vivienda propia (3%), otros (2%), transporte (2%), la Policía (1%) y villas miseria (1%). Según el informe, la percepción sobre el principal problema del país varió en la comparación interanual: en 2018 en primer lugar se ubicaba la inseguridad y hoy se ubica en segundo término (ver datos arriba y abajo; click para agrandar).
En tanto, según el estudio realizado en febrero por Synopsis, la preocupación por la inflación, que había cedido en el trimestre anterior, volvió a subir ese mes hasta rozar el 35% (un rebote de 4,3 puntos porcentuales). De esta forma, las preocupaciones económicas vuelven a ascender y llegan al 54,0%. También se insinúa un rebote de la preocupación por la corrupción (+2,3 pp), señalada como el principal problema por casi el 20% (ver datos abajo; click para agrandar).
Con todo, el informe de Synopsis del mes anterior (febrero) apuntaba que si bien el malestar socioeconómico es manifiesto y evidente en las demandas, no recaía totalmente sobre el actual gobierno: a la hora de repartir responsabilidades por la situación actual, casi el 37% la asociaba a Macri, mientras que un 42,2% la asociaba a CFK. La brecha de 5,3 pp no era estadísticamente significativa, pero insinuaba que "la grieta" sigue permeando en las percepciones sobre este tópico y que el argumento de la "herencia K" aún funcionaba en segmentos amplios. La pregunta que se impone es qué sucedería si se repite esa pregunta luego del fin de "veranito" cambiario y con la nueva aceleración de la inflación, la suba del dólar y de las tasas (que frenan al tipo de cambio a costa de prolongar la recesión).
Esa "grieta perceptiva" es confirmada también por las mediciones de D’Alessio/IROL. Según el informe de esa consultora elaborado a partir de la medición cerrada a fines de enero pasado, “las variables económicas y las perspectivas sobre su evolución siguen siendo la principal preocupación de los argentinos. La inseguridad es el segundo tema de angustia para los ciudadanos. La agenda continúa con críticas sobre el reparto de subsidios y un rechazo a la corrupción, donde cuestionan al Gobierno anterior y también al actual”.
De acuerdo a la encuestadora, las opiniones se dividen entre quienes votaron a Cambiemos y al FPV en las últimas elecciones. Al respecto, se remarcó que “la preocupación por la economía es común a ambos posicionamientos, pero se exacerba entre opositores, especialmente en cuestiones como tarifas, desempleo y pago de tarjetas", mientras que “los oficialistas se muestran más preocupados por la inseguridad, la entrega indiscriminada de subsidios y las protestas en la vía pública (...) “Si bien la corrupción es mencionada por
ambos segmentos, con distinto foco, resultaría más indignante para los
electores de Cambiemos”. Sin embargo, aunque la corrupción tiene una cobertura mediática muy amplia (y sesgada a favor del actual gobierno y en contra del anterior), se trata de un "issue" con menos impacto en el metro cuadrado de los electores que el que tienen otros temas como la inflación, la incertidumbre económica, el aumento de los servicios y el aumento de los impuestos (los 4 principales problemas de la lista general; ver datos abajo, click para agrandar).
A su turno, el estudio de Rouvier & Asociados realizado en febrero pasado también detecta a 4 problemas socioeconómicos entre los primeros 5 de la agenda de los electores a nivel país. La inflación lidera las menciones, con 40,2%, escoltada por los bajos sueldos/la pobreza (32,5%). El tercer lugar del podio se lo disputan la inseguridad (casi 18%), la recesión económica (16,2%) y la desocupación (15,4%). En cambio, la corrupción aparece aquí muy rezagada (casi 11%), en tanto que la deuda externa se anota con un considerable 8,6% (ver datos abajo; click para agrandar).
Con todo, el peor resultado para el oficialismo no es que la agenda social esté reconcentrada en los problemas socioeconómicos, sino la bajísima expectativa en que el gobierno pueda resolver la grilla extensa de problemas: de 8 problemas, en 4 de ellos la expectativa favorable es menor al 20%, en 3 oscila entre el 20% y el 29,9% y en sólo uno, la corrupción, alcanza al 30% (ver datos abajo; click para agrandar). Durante gran parte de su gestión, el gobierno mantuvo expectativas elevadas como un activo; desde fines de 2017, estas vienen cayendo sistemáticamente, lo que explica gran parte de la crisis sociopolítica actual.
jueves, 14 de marzo de 2019
La raíz socioeconómica de la crisis sociopolítica (1)
Como repetimos con frecuencia, una de las premisas analíticas de nuestro trabajo se inspira en el consultor Carlos Fara y expresa que, a mediano y largo plazo, son los efectos socioeconómicos de gestión los que explican las tendencias de la opinión pública. Así, una gestión que genera efectos socioeconómicos de bienestar generará tendencias de acompañamiento en la opinión pública que le permitirán cosechar victorias en varios turnos electorales, mientras que una que genere efectos socioeconómicos de malestar no podrá sostenerse tanto en el tiempo; más temprano que tarde, encontrará su turno electoral límite. Desde ese marco, la hipótesis es que el malestar socieconómico que genera la gestión Cambiemos (caída del PBI/la actividad económica en 3 de sus 4 años de gestión, caída del consumo en la misma línea, suba de la inflación, precarización del empleo) podría hacer que la coalición oficialista encuentre su límite en el turno electoral 2019: recordemos que logró imponerse por apenas 2,86 puntos porcentuales en el ballotage de 2015 y logró una módica victoria en la legislativa de medio término de 2017, pero de la mano de un rebote de la actividad económica que en 2018 y 2019 revirtió en caída.
Ese malestar socioeconómico es el mar de fondo de los movimientos que se observan desde hace meses: aliados radicales que despegan sus comicios de gobernador de la elección presidencial temiendo un arrastre negativo de la figura presidencial (caso Jujuy, el más reciente), miembros del oficialismo que procuran desdoblar la elección en su distrito (caso María E. Vidal en provincia de Buenos Aires, intento abortado por la mesa chica de Cambiemos), aliados radicales que resisten en su distrito la candidatura a gobernador definida desde la Rosada (caso Córdoba, el más reciente y resonante). Todos esos movimientos serían impensables con un presidente que tuviera un respaldo mayoritario; se producen porque hace mucho que la imagen positiva de gestión se ha replegado hacia el núcleo duro del 30% (e incluso menos en mediciones como las de Synopsis; ver datos al inicio del posteo, click para agrandar).
En este marco, un relevamiento de la consultora D’AlessioIROL/Berensztein grafica cómo la situación actual de crisis impacta en el consumo. Los datos surgen de distintas mediciones realizadas durante el segundo semestre del 2018 y enero 2019, basadas en más de 1.000 encuestas efectuadas de forma online a mayores de 18 años de todo el país. Según los datos, “8 de cada 10 argentinos reemplazaron a las primeras marcas por otras alternativas de menor precio. La sustitución abarca entre un 20% y un 60% de los productos consumidos”. Asimismo, por la brecha entre ingresos estancados o retrasados respecto a la inflación (subas en alimentos, servicios y cargas impositivas), las familias están armando una nueva planificación de sus gastos domésticos, en la que los "extras" se quedan afuera, generando así una categoría de "abandonados" del consumo (ver datos arriba; click para agrandar).
Las gaseosas (71%) son el primer producto en ser desplazado para suprimir lo que pueda generar mayor impacto en el presupuesto familiar. Los encuestados consideran que “pueden suplir lo que resulta más costoso por productos de estación, que además al ser considerados `más sanos` disminuyen la culpa ante el reemplazo”. Las carnes tienden a ser suplantadas por arroz (41%), fideos (40%) y pollo (36%). En la misma línea, las familias optan por consumir mayor cantidad de verduras (35%) y frutas (31%; ver datos arriba, click para agrandar). En sentido contrario, entre los gastos que resisten a la disminución del consumo se destaca internet (68%). Los servicios como la telefonía celular y las transmisiones por streaming (Netflix) tampoco son opciones a la hora de rescindir el consumo.
La caída del poder adquisitivo y el impacto en el consumo también se ponen de manifiesto en una mayor fragmentación de la modalidad de compra. El más reciente estudio realizado en la provincia de Córdoba por la consultora Delfos muestra que la compra mensual con refuerzos diarios (indicadora de un patrón de consumo fuerte) fue desplazada al segundo lugar (21%), superada con creces por las compras diarias (49%); esto confirma el deterioro, dado que las familias se ven forzadas a achicar y dividir sus compras para cuidar el bolsillo (ver datos arriba; click para agrandar). Se trata de un patrón de consumo típico de crisis, que coexiste con el debilitamiento de las primeras marcas. Con apenas matices, se observa tanto en Córdoba Capital como en el interior de la provincia (ver datos arriba; click para agrandar). Con todo, el dato más fuerte es que ese patrón atraviesa todos los niveles socioeconómicos, si bien en el Alto la compra mensual apenas queda 7 puntos porcentuales debajo de las compras diarias (mientras que en el nivel Medio queda 24 pp detrás y en el Bajo 48 pp detrás; ver datos abajo, click para agrandar). En síntesis, todos los datos confirman la profundidad de la crisis socioeconómica, que a tenor de nuestro seguimiento de encuestas de intención de voto está generando efectos preleectorales.
Ese malestar socioeconómico es el mar de fondo de los movimientos que se observan desde hace meses: aliados radicales que despegan sus comicios de gobernador de la elección presidencial temiendo un arrastre negativo de la figura presidencial (caso Jujuy, el más reciente), miembros del oficialismo que procuran desdoblar la elección en su distrito (caso María E. Vidal en provincia de Buenos Aires, intento abortado por la mesa chica de Cambiemos), aliados radicales que resisten en su distrito la candidatura a gobernador definida desde la Rosada (caso Córdoba, el más reciente y resonante). Todos esos movimientos serían impensables con un presidente que tuviera un respaldo mayoritario; se producen porque hace mucho que la imagen positiva de gestión se ha replegado hacia el núcleo duro del 30% (e incluso menos en mediciones como las de Synopsis; ver datos al inicio del posteo, click para agrandar).
En este marco, un relevamiento de la consultora D’AlessioIROL/Berensztein grafica cómo la situación actual de crisis impacta en el consumo. Los datos surgen de distintas mediciones realizadas durante el segundo semestre del 2018 y enero 2019, basadas en más de 1.000 encuestas efectuadas de forma online a mayores de 18 años de todo el país. Según los datos, “8 de cada 10 argentinos reemplazaron a las primeras marcas por otras alternativas de menor precio. La sustitución abarca entre un 20% y un 60% de los productos consumidos”. Asimismo, por la brecha entre ingresos estancados o retrasados respecto a la inflación (subas en alimentos, servicios y cargas impositivas), las familias están armando una nueva planificación de sus gastos domésticos, en la que los "extras" se quedan afuera, generando así una categoría de "abandonados" del consumo (ver datos arriba; click para agrandar).
Las gaseosas (71%) son el primer producto en ser desplazado para suprimir lo que pueda generar mayor impacto en el presupuesto familiar. Los encuestados consideran que “pueden suplir lo que resulta más costoso por productos de estación, que además al ser considerados `más sanos` disminuyen la culpa ante el reemplazo”. Las carnes tienden a ser suplantadas por arroz (41%), fideos (40%) y pollo (36%). En la misma línea, las familias optan por consumir mayor cantidad de verduras (35%) y frutas (31%; ver datos arriba, click para agrandar). En sentido contrario, entre los gastos que resisten a la disminución del consumo se destaca internet (68%). Los servicios como la telefonía celular y las transmisiones por streaming (Netflix) tampoco son opciones a la hora de rescindir el consumo.
La caída del poder adquisitivo y el impacto en el consumo también se ponen de manifiesto en una mayor fragmentación de la modalidad de compra. El más reciente estudio realizado en la provincia de Córdoba por la consultora Delfos muestra que la compra mensual con refuerzos diarios (indicadora de un patrón de consumo fuerte) fue desplazada al segundo lugar (21%), superada con creces por las compras diarias (49%); esto confirma el deterioro, dado que las familias se ven forzadas a achicar y dividir sus compras para cuidar el bolsillo (ver datos arriba; click para agrandar). Se trata de un patrón de consumo típico de crisis, que coexiste con el debilitamiento de las primeras marcas. Con apenas matices, se observa tanto en Córdoba Capital como en el interior de la provincia (ver datos arriba; click para agrandar). Con todo, el dato más fuerte es que ese patrón atraviesa todos los niveles socioeconómicos, si bien en el Alto la compra mensual apenas queda 7 puntos porcentuales debajo de las compras diarias (mientras que en el nivel Medio queda 24 pp detrás y en el Bajo 48 pp detrás; ver datos abajo, click para agrandar). En síntesis, todos los datos confirman la profundidad de la crisis socioeconómica, que a tenor de nuestro seguimiento de encuestas de intención de voto está generando efectos preleectorales.
miércoles, 13 de marzo de 2019
Tendencias electorales nacionales: mediciones, promedios y las "medias" de Lavagna
Otra de las mediciones recientemente conocidas es la realizada por la Universidad de San Andrés (Udesa). Sobre una muestra de 1.006 adultos entre 18 y 64 años conectados a internet (por lo que, advertimos, puede haber un sesgo por nivel socioeconómico hacia los sectores medios y altos), ubica a Mauricio Macri con 24% de intención de voto, seguido por CFK con 23%. Por Alternativa Federal, el estudio mide al ex ministro de Economía Roberto Lavagna (11%), al gobernador salteño Juan Urtubey (6%) y al líder del Frente Renovador, Sergio Massa (5%; ver datos al inicio del posteo, click para agrandar). Alfredo Olmedo, que podría bajarse de la presidencial para contender por la gobernación de Salta, llega al 3%, y Felipe Solá a 1%. Hay un alto nivel de indecisos: 28%.
Más allá del empate técnico entre Massa y Urtubey que reporta Udesa (Lavagna le saca al gobernador salteño 5 puntos porcentuales, diferencia no categórica pero más visible), el orden de precandidatos en esta encuesta contradice los datos de Raúl Aragón que vimos en un posteo reciente. Según ese informe, aunque en situación de empate técnico, Massa roza el 11%, Urtubey roza el 10% y Lavagna el 9% (ver datos abajo; click para agrandar).
En cambio, el estudio de la consultora Synopsis de enero pasado ubicaba al ex ministro como el precandidato más competitivo de Alternativa Federal: 13,1% contra casi 7% de Massa y casi 3% de Urtubey (ver datos abajo; click para agrandar). Como vemos, no hay consenso en las mediciones respecto a la performance de Lavagna, lo que tiene que ver en parte con la indefinición de ese espacio respecto a las candidaturas de sus referentes y de él mismo. Hasta hace poco, por caso, Lavagna afirmaba que sólo sería candidato si no tiene que competir contra otras figuras de AF en las PASO, lo que requeriría que tanto Massa como Urtubey declinaran participar.
En este marco, en orden a dilucidar el dato de quién es el precandidato de Alternativa Federal más competitivo de cara a las PASO de agosto, resulta clave analizar las medias de Lavagna, aunque no nos referimos a las prendas que fueron tema de notas y comentarios (ver foto abajo) sino a las medias aritméticas, es decir el promedio de mediciones, del ex ministro y también de Sergio Massa y Juan Urtubey; a priori, el tigrense es más competitivo que el salteño. De todos modos, el dato de Udesa ratifica un escenario de polarización simétrica, con Cambiemos y Unidad Ciudadana en empate técnico y logrando el pase a ballotage; para aspirar a eso, AF debería sumar linealmente el caudal de Lavagna, Urtubey y Massa a efectos de mantener un 22% y "rascar" al menos otro 1,1% para disputar la primera minoría electoral (algo difícil de lograr).
Si sumamos la encuesta de Udesa a la serie y actualizamos el promedio con 12 mediciones, CFK queda en 29,7% y Macri en 28%; la ventaja de 1,7 pp a favor de la ex presidenta no es estadísticamente significativa y confirma el empate técnico que venimos viendo, con apenas matices. Sin embargo, si se analiza el dato de la evolución de la imagen positiva en el estudio de Udesa, se advierte que Macri viene perdiendo imagen desde hace un año, mientras que CFK viene creciendo desde diciembre de 2018 (ver datos abajo; click para agrandar). Se trata de otra variable que permite entender por qué su figura se consolida como principal opositora.
Más allá del empate técnico entre Massa y Urtubey que reporta Udesa (Lavagna le saca al gobernador salteño 5 puntos porcentuales, diferencia no categórica pero más visible), el orden de precandidatos en esta encuesta contradice los datos de Raúl Aragón que vimos en un posteo reciente. Según ese informe, aunque en situación de empate técnico, Massa roza el 11%, Urtubey roza el 10% y Lavagna el 9% (ver datos abajo; click para agrandar).
En cambio, el estudio de la consultora Synopsis de enero pasado ubicaba al ex ministro como el precandidato más competitivo de Alternativa Federal: 13,1% contra casi 7% de Massa y casi 3% de Urtubey (ver datos abajo; click para agrandar). Como vemos, no hay consenso en las mediciones respecto a la performance de Lavagna, lo que tiene que ver en parte con la indefinición de ese espacio respecto a las candidaturas de sus referentes y de él mismo. Hasta hace poco, por caso, Lavagna afirmaba que sólo sería candidato si no tiene que competir contra otras figuras de AF en las PASO, lo que requeriría que tanto Massa como Urtubey declinaran participar.
En este marco, en orden a dilucidar el dato de quién es el precandidato de Alternativa Federal más competitivo de cara a las PASO de agosto, resulta clave analizar las medias de Lavagna, aunque no nos referimos a las prendas que fueron tema de notas y comentarios (ver foto abajo) sino a las medias aritméticas, es decir el promedio de mediciones, del ex ministro y también de Sergio Massa y Juan Urtubey; a priori, el tigrense es más competitivo que el salteño. De todos modos, el dato de Udesa ratifica un escenario de polarización simétrica, con Cambiemos y Unidad Ciudadana en empate técnico y logrando el pase a ballotage; para aspirar a eso, AF debería sumar linealmente el caudal de Lavagna, Urtubey y Massa a efectos de mantener un 22% y "rascar" al menos otro 1,1% para disputar la primera minoría electoral (algo difícil de lograr).
Si sumamos la encuesta de Udesa a la serie y actualizamos el promedio con 12 mediciones, CFK queda en 29,7% y Macri en 28%; la ventaja de 1,7 pp a favor de la ex presidenta no es estadísticamente significativa y confirma el empate técnico que venimos viendo, con apenas matices. Sin embargo, si se analiza el dato de la evolución de la imagen positiva en el estudio de Udesa, se advierte que Macri viene perdiendo imagen desde hace un año, mientras que CFK viene creciendo desde diciembre de 2018 (ver datos abajo; click para agrandar). Se trata de otra variable que permite entender por qué su figura se consolida como principal opositora.
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