Tendencias nacionales y distritales a un mes de las elecciones generales

Luego de la encuesta de Clivajes en provincia de Buenos Aires que repasamos en el posteo anterior, se dio a conocer otra medición en ese distrito clave. Fue realizada por la consultora Circuitos del 23 al 25 de septiembre de manera mixta (coincidental y online) sobre una muestra de 1.273 casos, con un error muestral de +-3,5% (ver datos arriba; click para agrandar). Sobre votos afirmativos, proyecta 53,7% para Alberto y Cristina Fernández vs 30,4% para Macri-Pichetto, de lo que resulta una ventaja de 23,3 puntos porcentuales para el binomio opositor. La fórmula de Consenso Federal roza el 10%, mientras que la izquierda alcanza 3,4% de intención de voto. Por otro lado, hay un empate técnico entre dos listas de derecha, la de Gómez Centurión (1,5%) y Espert (1,2%). 

Si sumamos esta encuesta a la serie en PBA, podemos construir un promedio sobre 3 mediciones revisadas (Trespuntozero, Clivajes y Circuitos). Arroja 54,2% para el Frente de Todos vs 31,7% para Juntos por el Cambio, una brecha de 22,5 pp que perfila una ventaja irreversible. Por otro lado, Circuitos también midió la intención de voto para gobernador de PBA: 53,7% para Kicillof (idéntica al tramo nacional) vs 36,4% para Vidal (6 pp por encima de Macri) y casi 6% para Consenso Federal. La izquierda roza el 3%, mientras que el Frente NOS ronda el 1% (ver datos arriba; click para agrandar). Aunque la gobernadora aparece con una proyección mejor que la del presidente, la brecha de 17,3 pp a favor del Frente de Todos también perfila una elección que parece irremontable. Si agregamos el resultado de esta encuesta a la serie de gobernador de PBA, tenemos un promedio con 5 mediciones (Proyección, Trespuntozero, CB, Clivajes y Circuitos) que da 54% para Kicillof-Magario vs 35,6% para Vidal-Salvador: 18,4 pp de brecha. Recordemos que en PBA se gana por simple pluralidad de votos, por lo cual una tendencia favorable al Frente de Todos con un caudal superior al 50% aparece como holgada para quedarse con la gobernación el 27 de octubre. Así, el oficialismo perdería la provincia más gravitante del padrón electoral nacional en la elección general, frustrando los planes de reelección de Vidal en PBA y Macri a nivel país. 

Así, el pronóstico desfavorable para la gobernadora Vidal es consistente con el desgaste nacional que también impacta en su evaluación de gestión: 47% de negativa vs 40% de positiva, lo que da un diferencial negativo de 7% de acuerdo a la encuesta de Clivajes (ver datos arriba; click para agrandar). Sin embargo, ese estudio reporta un 13% de regular, que puede ser considerado el primer nivel de malestar. El panorama es más desfavorable según la consultora Trespuntozero, que no ofrece la opción de respuesta "regular": 57% de evaluación negativa vs 40,5% de positiva, lo que resulta en un diferencial negativo de 16,5% (ver datos abajo; click para agrandar). 

Profundizando en el análisis, si cruzamos los datos de intención de voto con las opciones preferidas para la provincia según la encuesta más reciente de la consultora Trespuntozero, podemos advertir que el caudal de la gobernadora Vidal está en el mismo orden de magnitud de la suma de quienes quieren que siga su gobierno tal cual está y quienes quieren que siga pero con algunos cambios (26,6% + 10,3%=36,9%), mientras que el caudal de Kicillof está en el orden de magnitud de quienes quieren que cambie el gobierno provincial y de quienes quieren que cambie pero que se mantengan algunos de sus avances (46,2% + 12,4%=58,6%; ver datos abajo, click para agrandar). 

Este domingo 29 de septiembre también se vota gobernador en Mendoza, distrito importante porque es uno de los 5 más gravitantes a nivel país en términos de peso electoral y porque allí gobierna el radicalismo. Por ello, resulta clave para el oficialismo nacional que su aliado local retenga esa provincia. Hemos podido ver tres mediciones cerradas a fines de agosto (no accedimos a informes más recientes), que reportan los siguientes datos: según el consultor Elbio Rodríguez, Rodolfo Suárez (Cambia Mendoza) alcanzaba 41,8% de intención de voto vs 26,4% de Anabel Fernández Sagasti (Elegí Mendoza/PJ); brecha de 15,4 pp, en un estudio domiciliario sobre una muestra de 1.581 casos. Según la consultora Reale-Dalla Torre, la tendencia era 49,7% para Suárez vs 34,8% para Fernández Sagasti; 14,9 pp en un estudio domiciliario sobre una muestra de 1.200 casos. Una tercera medición arrojó una tendencia muy diferente: 36,4% para Suárez vs 32,9% para Fernández Sagasti, una brecha de 3,5 pp que implica un empate técnico. La única de las mediciones publicadas realizada en septiembre, a cargo del encuestador Antonio De Tommaso (IOPPS) arrojó 41,2% para Suárez y 37,2% para Fernández Sagasti, apenas 4 pp de diferencia que implican un empate técnico. El promedio de estas cuatro mediciones da 42,3% para Cambia Mendoza vs 32,8% para Fernández Sagasti, una ventaja de 9,5 pp favorable al oficialismo local. Esa ventaja es consistente (en rigor, 2 pp mayor) con la brecha de 7,56 pp que obtuvo Cambia Mendoza (45,11%) sobre Elegí Mendoza/PJ (37,55%) en las PASO provinciales (ver datos abajo; click para agrandar). Sin embargo, hay expectativa por el sprint final, dado que en las primarias nacionales del 11 de agosto, Alberto Fernández superó a Mauricio Macri por 3,14 pp (40,48% vs 37,34%). Así, Fernández Sagasti apuesta a la sinergia con la elección nacional (el candidato a presidente estuvo hace pocos días reforzando la campaña de la postulante), mientras que, en sentido contrario, el oficialismo mendocino apuesta a provincializar la elección para no ser arrastrado por la ola de cambio nacional. En cómo se articulen esos ejes en la decisión final de los electores mendocinos este domingo estará la clave del resultado. 

Tendencias nacionales y distritales a fines de septiembre (2)

La consultora Clivajes realizó un nuevo estudio en provincia de Buenos Aires (PBA) que nos permite actualizar las tendencias en ese distrito clave. Se trata de una encuesta vía online sobre una muestra de 1.135 electores de ese distrito relevados del 18 al 23 de septiembre. De cara a la elección presidencial del 27 de octubre, arroja 53,35% de intención de voto para el Frente de Todos vs 32,42% para Juntos por el Cambio. Consenso Federal alcanza 6,09%, el Frente de Izquierda roza el 3%, mientras que el Frente NOS y Despertar oscilan alrededor del 1%, con 3,16% de indecisos (ver datos arriba; click para agrandar). Así, la brecha a favor de los Fernández es de 20,93 puntos porcentuales. De ese modo, el promedio de dos mediciones recientes en ese distrito (esta que citamos y la de Trespuntozero que oportunamente repasamos en el blog) queda en 54,5% para Alberto y Cristina Fernández vs 32,3% para Macri-Pichetto, con lo cual la ventaja es de 22,2 pp.

Si comparamos esas tendencias con las que arrojó aquella encuesta de Trespuntozero en la variable permeabilidad electoral, se observa que el caudal del 53,5% está en el mismo orden de magnitud del casi 51% que dice que seguramente votará a Fernández. Lo mismo sucede con el 32,42% de Macri (está en el mismo orden de magnitud del casi 31% que dice que seguro lo votará) y el 6,09% de Lavagna (que coincide casi exactamente con el 6,1% que dice que seguramente lo votará; ver datos arriba, click para agrandar). 

Clivajes también sondeó el clima de opinión en términos de percepción de ola ganadora. El 72,35% de los electores bonaerenses cree que Alberto Fernández será el próximo presidente, es decir 19 pp más que la proporción de electores que se inclina a votar por él (lo que implica que hay electores que votarían a Macri, pero creen que será Fernández el ganador). Esa percepción casi triplica a la de quienes creen que Macri será reelecto: 24,50% (ver datos arriba; click para agrandar). Profundizando el análisis, ese 72,35% está apenas por encima del orden de magnitud del 67,2% de techo electoral que Fernández podría lograr en términos de permeabilidad según Trespuntozero, como vimos más arriba.

  
Se puede advertir que la intención de voto en PBA es un buen proxy de la tendencia nacional, como muestran las encuestas (y como se vio en las PASO):la nacional (sobre 13 encuestas) da un promedio de 52,5% para el Frente de Todos vs 33,1% para Juntos por el Cambio, mientras que en PBA da 54,5% (+ 2 pp que la nacional) vs 32,3% (- 0,8 pp que la nacional), respectivamente. En cambio, la ola ganadora en provincia de Buenos Aires sobreestima la misma creencia respecto a lo que muestran datos nacionales como los de la consultora Proyección, aún cuando esa percepción viene en alza en el evolutivo (ver datos arriba; click para agrandar). Lo mismo se confirma si comparamos con la ola ganadora según consultora CEIS (ver datos abajo; click para agrandar). 

Finalmente, de cara a la elección de gobernador en PBA, Clivajes reporta también una ventaja contundente a favor del Frente de Todos: la fórmula Axel Kicillof-Verónica Magario alcanza 53,27% de intención de voto vs 36,54% de Vidal-Salvador, una brecha de 16,7 pp que perfila una chance de victoria holgada en ese distrito el 27 de octubre (dado que se gana por simple pluralidad de votos, sin regla de ballotage). Consenso Federal alcanza 3,56%, la izquierda 2,4% y hay 3,29% de indecisos (ver datos abajo; click para agrandar). En síntesis, del plan "triple reelección" que el oficialismo trazó a fines de su exitosa elección de medio término del 2017, el único que hoy aparece con chances de ser reelegido es el jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta. 

Tendencias nacionales y distritales a fines de septiembre (1)

Ayer 22/9 se dio a conocer otra encuesta nacional sobre intención de voto para presidente de cara al 27 de octubre. Se trata de una medición de la consultora CEOP de tipo presencial, sobre una muestra de 1.805 casos en todo el país (error de +-2,31%) relevados entre el 6 y el 15 de septiembre. Según los datos, el Frente de Todos roza el 53%, mientras que Juntos por el Cambio alcanza 34,3%. Así, la brecha entre el binomio Alberto y Cristina Fernández vs Macri-Pichetto es de 18,3 puntos porcentuales. Consenso Federal roza el 9%, mientras que la izquierda alcanza el 2%; el Frente NOS llega a 1,4% y el Frente Despertar roza el 1% (ver datos arriba; click para agrandar). Asimismo, el estudio marca una expectativa positiva asociada a un eventual triunfo de Alberto Fernández: casi un 60% de los electores cree que la situación mejorará con él, 15 pp más que la misma proporción que tenía esa posición antes de las primarias del 11 de agosto y casi 7 pp más que quienes se inclinan por el Frente de Todos para la elección presidencial (ver datos abajo; click para agrandar). 

¿Cómo cree que evolucionará la situación si Alberto Fernández es electo presidente?

Agregar esta medición a la serie pos PASO nos permite llegar a 20 encuestas en total, lo que da un promedio de 52,3% para el Frente de Todos vs 33,4% para Juntos por el Cambio. Así, la brecha es de 18,9 pp entre ambas fuerzas. Si eliminamos las dobles mediciones para dejar sólo una de cada consultora, quedamos en 13 estudios y un promedio de 52,5% para los Fernández y 33,1% para Macri-Pichetto, con lo cual la brecha queda en 19,4 pp. En cualquier caso, la fuerza opositora parece consolidarse como mayoría electoral neta, con un avance en torno a los 3 pp respecto al caudal obtenido en las primarias. En cambio, el oficialismo aparece estancado (apenas + 0,07 pp respecto al 11-A). 

Asimismo, se puede observar que la intención de voto a favor de Juntos para el Cambio está en el mismo orden de magnitud que la evaluación positiva del gobierno nacional: 32,6% (ver datos abajo; click para agrandar). Esta regularidad estadística insinúa un principio de explicación de por qué al oficialismo le cuesta crecer respecto a su performance de las PASO: tanto su comunicación como su gestión siguen interpelando positivamente sólo a su núcleo duro. En la misma línea de análisis, la imagen negativa del gobierno de Macri (casi 64%) está en el mismo orden de magnitud de la opinión que atribuye a Mauricio Macri la responsabilidad por la situación económica actual: casi 61% (ver datos abajo; click para agrandar).

¿Quién es responsable de la situación económica actual?

Las actualizaciones de las tendencias distritales en provincia de Buenos Aires, Córdoba y CABA permiten también analizar el promedio construido a partir del resultado de las PASO y las últimas encuestas en distritos clave. Así, tomando las mediciones más recientes en esos tres distritos (que hemos repasado en diversos posteos anteriores), el promedio da 51,1% para el Frente de Todos vs 34% para Juntos por el Cambio, de lo que resulta una brecha entre ambas fuerzas de 17,1 pp, algo menor que los 19 pp que vemos en el promedio nacional. En ambos casos, más allá de los matices, el binomio opositor se perfila como mayoría electoral neta. 

De las tendencias nacionales a las distritales (3)

Como vimos en el posteo anterior, la ventaja del Frente de Todos a nivel país de cara a la elección presidencial del 27 de octubre (promedio de 52,6% para Alberto y Cristina Fernández vs 32,9% de Macri-Pichetto; brecha de 19,7 puntos porcentuales) y para gobernador en provincia de Buenos Aires (promedio de 54,3% para Kicillof vs 35% para Vidal, lo que da una ventaja de 19,3 pp) perfilan una tendencia que parece irreversible. Esto desplaza parcialmente el interés hacia otra de las elecciones distritales que se vienen: la jefatura de gobierno en Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). Según la encuesta más reciente procedente de ese distrito, realizada por la consultora Federico González & Asociados (FGA), el jefe de gobierno Horacio Rodríguez Larreta (Juntos por el Cambio) roza el 49% de intención de voto, vs casi 41% de Matías Lammens (Frente de Todos). Matías Tombolini, de Consenso Federal, ronda el 7%, mientras que Gabriel Solano de la izquierda apenas supera el 3%, proyectando indecisos y excluyendo el voto en blanco (ver datos arriba; click para agrandar). La encuesta se realizó del 13 al 16 de septiembre de manera presencial sobre una muestra de 600 casos. 

La brecha es de 8,2 pp y Larreta queda a apenas 1,1 pp de ganar la reelección sin necesidad de ballotage. De todos modos, FGA explora esa hipótesis: arroja casi 53% para Rodríguez Larreta y 47,2% para Lammens, lo que sugiere que el jefe de gobierno podría lograr la reelección con una ventaja (magra) de 5,6 pp (ver datos arriba; click para agrandar). Por su parte, la consultora Clivajes reportó 49,12% para el actual jefe de gobierno y 37,65% para Lammens; en este caso, la ventaja se estira casi 12 pp y Larreta queda más cerca del 50% que lo consagraría sin necesidad de segunda vuelta (ver datos abajo; click para agrandar). Tombolini apenas supera el 5% y Solano alcanza 3,5% de intención de voto, con 4,5% de indecisos. 

En la hipótesis de ballotage, Clivajes reporta 51,4% para Juntos por el Cambio vs 43,5% del Frente de Todos (ver datos abajo; click para agrandar). La brecha es de casi 8 pp, también más holgada que la que veíamos según FGA. Sin embargo, cabe destacar que aquella medición era presencial, mientras que la de Clivajes es online y fue realizada del 11 al 16 de septiembre, sobre una muestra de 657 casos. 

Una medición anterior a estas dos citadas fue realizada por la consultora Proyección del 4 al 8 de septiembre, vía online y panel, sobre una muestra de 400 casos. En este caso, el resultado es 47,6% para Rodríguez Larreta vs 38,9% para Lammens, considerando la boleta completa (con la tracción del tramo presidencial; ver datos abajo, click para agrandar). Tombolini alcanzaba 5,5% de intención de voto y Solano rozaba el 2%. La brecha a favor de Larreta en este caso es de casi 9 pp. 

Antes de esa encuesta, entre el 20 y el 21 de agosto, CEIS también hizo una medición vía IVR, sobre una muestra de 1.665 casos: el resultado fue 48% para Juntos por el Cambio vs 37% del Frente de Todos, una brecha de 11 pp. Si tomamos la serie de mediciones, se insinúa un progresivo achicamiento de la brecha conforme corre el tiempo, lo que le pone cierta expectativa al resultado final, habida cuenta de que se vota el 27 de octubre, junto con la elección presidencial. Con todo, el promedio de las 4 mediciones arroja 48,4% para Larreta vs 38,6% para Lammens, una brecha de 9,8 pp y con el jefe de gobierno a apenas 1,6 pp del umbral del 50% que le daría la reelección sin necesidad de ballotage.  

Sin embargo, aunque la tendencia actual parece favorecer a Rodríguez Larreta, hay elementos que sostienen la expectativa. Uno de ellos es el efecto arrastre del tramo de boleta presidencial, dado que los dos sondeos citados (Clivajes y FGA) arrojan una ventaja más estrecha en la elección presidencial: 45,9% para Macri-Pichetto vs 38,5% para Alberto y Cristina Fernández en el primer caso (ver datos arriba; click para agrandar) y 45,7% para Juntos por el Cambio vs 41,3% para el Frente de Todos en el segundo. En este caso, el promedio de dos mediciones da 45,8% para el oficialismo y 39,9% para la fuerza opositora, lo que arroja una brecha de 5,9 pp (menor a los 9,8 pp que veíamos en la tendencia a jefe de gobierno). Así, si Macri arrastrara hacia abajo a Rodríguez Larreta y, en sentido contrario, los Fernández arrastraran hacia arriba a Lammens, la elección de jefe de gobierno de CABA podría hacerse más competitiva y requerir de un ballotage para definirse. En el próximo posteo analizaremos otro elemento que es necesario atender. 

De las tendencias nacionales a las distritales (2)

Luego de nuestro posteo del pasado lunes se publicaron otros tres sondeos recientes de carácter nacional. Uno de ellos fue realizado por la consultora Proyección sobre una muestra de 1.200 casos relevados vía panel y online del 9 al 14 de septiembre pasados. Arroja 53,3% de intención de voto para Alberto y Cristina Fernández (Frente de Todos) vs 31,9% para Macri-Pichetto (Juntos por el Cambio), una brecha de 21,4 puntos porcentuales. Lavagna-Urtubey (Consenso Federal) apenas superan el 7%, Del Caño-Del Plá (izquierda) alcanzan 3,5%, Gómez Centurión-Hotton (Frente NOS) apenas superan el 1% y Espert-Rosales (Frente Despertar) alcanzan sólo 0,5%, con 2,6% de indecisos (ver datos arriba; click para agrandar). Respecto al resultado de las PASO, el Frente de Todos insinúa un avance de 3,8 pp, mientras que el oficialismo cede 1 pp. De confirmarse esta tendencia, el 27 de octubre los Fernández se consagrarían en primera vuelta, ya que tienen doble chance: superan el 40% y exceden en 10 pp el caudal de la segunda fuerza, y además exceden en 8,3 pp el umbral del 45%.  

A su turno, según Gustavo Córdoba & Asociados, AF y CFK alcanzan 54,5% de intención de voto vs 31,8% de Macri-Pichetto. La brecha en este caso llega al 22,7 pp. Lavagna-Urtubey apenas superan el 6%, la izquierda llega a 2,2%, y Espert-Rosales duplican a Gómez Centurión-Hotton (1,4% vs 0,7%, respectivamente; ver datos arriba y abajo, click para agrandar). En este caso, la fórmula del Frente de Todos rompería el récord del 54,11% alcanzado por CFK en la primera vuelta presidencial del 2011, imponiéndose nuevamente sin necesidad de ballotage y con doble chance ganadora. El oficialismo vuelve a insinuar un retroceso, mientras que el frente opositor avanza 5 pp respecto al resultado de las PASO. El estudio fue realizado vía IVR sobre una muestra de 1.200 casos relevados del 9 al 14 de septiembre. 

El tercer estudio de esta serie corresponde a la consultora Trespuntozero y ubica al Frente de Todos con 52% de intención de voto (proyectando blanco e indecisos). Juntos por el Cambio alcanza 34,5%, con lo cual la brecha es de 17,5 pp. El binomio de Consenso Federal llega a 5,3% y el Frente NOS apenas supera el 3%, mientras que la izquierda (2,6%) y el Frente Despertar (2,4%) están en empate técnico (ver datos abajo; click para agrandar). En este caso, los Fernández insinúan un avance de 2,5 pp respecto al resultado de las primarias del 11 de agosto, mientras que el oficialismo insinúa un avance de 1,5 pp. Este sondeo fue realizado online sobre una muestra nacional de 1.200 casos relevados entre el 10 y el 16 de septiembre. 

Agregando estos tres estudios a la serie, tenemos un promedio sobre 19 encuestas pos PASO que da 52,3% para el Frente de Todos vs 33,4% para Juntos por el Cambio; una brecha de 18,9 pp. Si sólo dejamos la medición más reciente de aquellas consultoras que encuestaron más de una vez, nos quedan 12 sondeos y un promedio de 52,6% para Alberto y Cristina Fernández vs 32,9% de Macri-Pichetto, con lo cual la brecha trepa a 19,7 pp. De esa forma, el Frente de Todos de consolidaría como mayoría electoral neta. 

Trespuntozero también actualizó la tendencia en provincia de Buenos Aires: 55,56% para Alberto y Cristina Fernández vs 32,2% para Macri-Pichetto en el tramo presidencial (23,3 pp de brecha a favor del Frente de Todos). En el tramo gobernador de PBA, 53,4% para Kicillof vs 37,7% para la gobernadora María E. Vidal; brecha de 15,7 pp. Eduardo Bucca alcanza 5,1%, Álvarez 3,3% y Castillo 0,5% (ver datos arriba; click para agrandar). El relevamiento fue por panel online sobre una muestra de 1.000 casos recolectados del 3 al 13 de septiembre. Agregando esta medición a la serie, tenemos un promedio de 54,3% para Kicillof vs 35% para Vidal, lo que da una ventaja 19,3 pp para el Frente de Todos que perfila una victoria el 27 de octubre. Así, se confirma que la tendencia a gobernador en PBA está muy alineada con la presidencial a nivel nacional. 

De las tendencias nacionales a las distritales (1)

Luego de nuestro posteo del viernes pasado se dio a conocer otra encuesta, aunque en rigor esta cerró a fines de agosto, es decir, antes de otras que ya repasamos en este blog (como las más recientes de las consultoras Clivajes, Circuitos, Rouvier & Asociados y CEIS). Se trata en este caso de una medición nacional de Análisis y Tendencias realizada a través de plataformas digitales. En ella, Alberto y Cristina Fernández alcanzan 50,65% de intención de voto  vs 37,4% de Macri-Pichetto (ver datos arriba; click para agrandar). La brecha entre ambas fórmulas es de 13,3 puntos porcentuales, menor que la que hemos visto en encuestas anteriores (con la sola excepción del estudio de Atlas Intel, en el que la brecha es de 10 pp, pero ya observamos por qué no consideraremos ese estudio para el promedio que venimos siguiendo). La performance de Juntos por el Cambio, mayor a la que vemos también en otros estudios revisados, se debe a que en esta encuesta las demás fórmulas caen por debajo del promedio de la serie: Lavagna-Urtubey apenas rozan el 4% y Gómez Centurión-Hotton el 2%, mientras que la izquierda y el Frente Despertar rondan el 1%. De todos modos, aun con estos matices, el estudio perfila una victoria del Frente de Todos en primera vuelta, ya que excede en 5,6 pp el umbral del 45% necesario para imponerse sin necesidad de ballotage. 

Incorporando esta medición a la serie pos PASO quedan 16 en total, con un promedio de 52,1% para el Frente de Todos y 33,5% para Juntos por el Cambio, lo que da una brecha de 18,6 pp. Si tomamos una sola medición de cada consultora (la más reciente), quedan 12 estudios, para un promedio de 52,4% para los Fernández y 33,1% para la fórmula oficialista: 19,3 pp de brecha. La amplitud sugiere que la tendencia es difícilmente reversible, lo cual desplaza parte del interés a las elecciones distritales que se vienen: jefe de gobierno en Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y gobernador en provincia de Buenos Aires (PBA) el 27 de octubre, junto con la elección presidencial, y a fines de este mes la elección de gobernador en Mendoza. Los tres distritos son gobernados por Cambiemos y completarían la saga de elecciones ejecutivas distritales de 2019, junto con la institucionalmente complicada elección de gobernador de La Rioja (luego de algunos vaivenes, votaría el 27 de octubre), Chaco (13 de octubre) Catamarca (también el 27 de octubre) y la elección de gobernador de Salta (primarias previstas para el 6 de octubre y generales para el 6 de noviembre). 

Según la consultora Proyección, la tendencia en PBA amplía la ventaja obtenida por el Frente de Todos en las PASO (ver datos más arriba; click para agrandar): 56,3% vs 32%, lo que consagraría a Axel Kicillof como el próximo gobernador por una brecha de 24,3 pp (recordemos que en ese distrito se gana por simple pluralidad de sufragios, ya que no hay ballotage). El escenario con boleta corta (sin considerar la tracción del tramo presidencial que concurre en la misma fecha) apenas varía: 55,1% para Kicillof vs 34,4% para Vidal (brecha de 20,7 pp; ver datos arriba, click para agrandar). La medición fue realizada entre el 16 y el 21 de agosto pasados vía online, sobre una muestra de 1.149 casos. 

De este estudio se desprende también que la identificación política de los votantes de Kicillof es predominantemente positiva (peronista y kirchnerista; ver datos arriba, click para agrandar), mientras que la de los votantes de Vidal tiene un alto componente negativo (casi un 25% de antikirchneristas; ver datos abajo, click para agrandar).

Para más datos, según Proyección, un incremento de la participación electoral (base de la apuesta del oficialismo de cara al 27 de octubre) no le permitiría achicar las distancias a Vidal, sino todo lo contrario: casi el 52% de quienes no asistieron a las primarias el 11 de agosto votarían por el Frente de Todos, vs casi 29% que se inclinarían por Vidal (ver datos abajo; click para agrandar). 

Por su parte, la Consultora CB realizó un estudio en PBA entre el 1 y el 2 de septiembre pasados, sobre una muestra de más de 2.700 bonaerenses mayores de 18 años vía CAWI (panel digital a través de dispositivos móviles). Esta encuesta arroja 53,1% para Axel Kicillof y 35,3% para la gobernadora María E. Vidal, una brecha de 17,8 pp (ver datos abajo; click para agrandar). En una elección muy polarizada, los otros tres candidatos sumados apenas rondan el 6% de intención de voto. 

Kicillof también aventaja a Vidal en el análisis de potencialidad electoral: su piso es de 45,3% y su techo de 57,1%, con un rechazo de casi el 35% (ver datos abajo; click para agrandar).

En el caso de la gobernadora, su piso es de 27,1% y su techo del 36,5%, con un rechazo del 53,2% (ver datos abajo; click para agrandar). 

Así, el promedio de estos dos estudios da 54,7% para Kicillof vs 33,7% para Vidal; una brecha de 21 pp. Esto insinúa que el 27 de octubre se ampliará la diferencia que vimos en las primarias: el escrutinio definitivo de las PASO había arrojado 52,51% para Kicillof y 34,65% para Vidal, una brecha de 17,86 pp. Como se puede apreciar, la tendencia a gobernador en PBA está muy alineada con el promedio nacional a presidente, lo que indica que el voto en ese distrito, al igual que sucedió en las primarias, se está comportando como buen predictor (en el sentido de proxy) del nacional. 

Una brecha que se consolida de cara al 27-O

En un posteo reciente citábamos la encuesta de Rouvier & Asociados que mostraba una ventaja de 12,5 puntos porcentuales entre el Frente de Todos (49,1% de intención de voto) y Juntos por el Cambio (36,6%). La nueva medición de ese consultor estira la ventaja a 16,6 pp con proyección de indecisos: 51,5% para Alberto y Cristina Fernández vs 34,9% para Macri-Pichetto (ver datos arriba; click para agrandar). Lavagna-Urtubey rondan el 8% y la izquierda roza el 3%, mientras que Gómez Centurión y Espert están en empate técnico. La medición se realizó de 30 de agosto al 6 de septiembre sobre una muestra nacional de 1.200 casos relevada de manera telefónica, con un margen de error de +-3,1% para el total de casos. El resultado perfila una victoria en primera vuelta del frente opositor, dado que rebasa por casi 6,5 pp el umbral del 45% necesario para imponerse sin ballotage.  

Similar brecha en torno de los 16 pp surge de la encuesta más reciente de la consultora CEIS: 50% para el Frente de Todos vs 34% para Juntos por el Cambio (ver datos arriba; click para agrandar). La fórmula de Consenso Federal alcanza 6% y el mismo porcentaje se distribuye en partes iguales entre la izquierda, el Frente Despertar y el Frente Nos. Esta medición se realizó del 2 al 5 de septiembre por IVR sobre una muestra de 1.830 casos, con un margen de error es de +-2,3%.  Nuevamente, Alberto y Cristina Fernández se posicionan con chances de imponerse en primera vuelta, rebasando por 5 pp el umbral del 45%. 

Por su parte, en la medición más reciente de la consultora Trespuntozero la ventaja se estira a casi 18 pp: 51,9% vs 34% sobre voto proyectado. Esta encuesta fue realizada del 28 al 30 de agosto de manera online sobre una muestra de 1.500 casos, con un error muestral de +-2,4%. Lavagna-Urtubey rondan el 6%, Del Caño-Del Plá rozan el 4% y el Frente Nos (Gómez Centurión) y el Frente Despertar (Espert) están en empate técnico en torno al 2% (ver datos arriba; click para agrandar). Al rozar el 52%, Alberto y Cristina Fernández exceden en casi 7 pp el umbral del 45% con el que se impondrían en la primera vuelta del 27 de octubre.  

Estos nuevos datos permiten actualizar el promedio con 15 mediciones nacionales posPASO: 52,2% para el Frente de Todos vs 33,2% para Juntos por el Cambio, una ventaja de 19 pp. Consenso Federal queda en 7,4 pp, el Frente de Izquierda en 2,5%, el Frente NOS en 1,7% y el Frente Despertar en 1,5%. No obstante, si recalculamos el promedio dejando sólo la medición más reciente de aquellas consultoras que midieron más de una vez, el promedio se construye con 11 mediciones y queda en 52,5% para el Frente de Todos vs 32,7% para Juntos por el Cambio y la brecha trepa a 19,8 pp: casi 20 puntos porcentuales. Así, la ventaja a favor del binomio opositor se consolida y su caudal se ubica por encima del umbral del 50%, constituyendo una mayoría neta. Con respecto al resultado de las PASO calculado sobre votos afirmativos (49,50%), insinúa un avance de 3 pp, y de 5,3 pp sobre votos emitidos (obtuvo 47,20%). En cambio, Juntos por el Cambio aparece estancado: cede 0,23 pp respecto al resultado de las primarias sobre votos afirmativos (obtuvo 32,93%), en tanto que apenas insinúa un avance de 1,29 pp sobre votos emitidos (obtuvo 31,41%). Así, en el mejor de los casos el oficialismo apenas fideliza el caudal que logró el 11-A, mientras que el frente opositor avanza. 

Tendencias de cara al 27-O en el reinicio de la campaña

En nuestro posteo del viernes pasado actualizamos el promedio con 13 mediciones posPASO: 52,4% para el Frente de Todos vs 33% para Juntos por el Cambio. Esa brecha de 19,4 pp, que implica, respecto al resultado de las primarias, un avance de 2,91 pp para Alberto y Cristina Fernández y de apenas 0,06 pp para Macri-Pichetto. En ese posteo citamos los resultados de los estudios de las consultoras CB, Trespuntozero, Clivajes y Circuitos, incluidos en el promedio al que hacemos referencia, al igual que otros citados antes (ver datos arriba, presentados sin decimales; click para agrandar). Durante el fin de semana se dio a conocer otro estudio, en este caso realizado por la brasileña Atlas Intel​ entre el 2 y el 3 de septiembre, sobre una muestra de 2.000 casos relevados online, con un margen de error de +/- 2%. Proyecta para Alberto y Cristina Fernández 48,2% vs 38,5% para Macri-Pichetto sobre votos afirmativos, una brecha de apenas 9,7 puntos porcentuales (contra 19,4 pp en la media aritmética), con el Frente de Todos 4,2 pp por debajo del promedio y Juntos por el Cambio 5,5 pp por arriba del promedio. Es decir, avance del oficialismo y retroceso de la fuerza opositora, contrariando todos los estudios que venimos revisando. 

Dado estos desvíos y los desastrosos antecedentes de consultoras brasileñas en las encuestas pre PASO (según BTG Pactual e Ideia Big Data, Macri tenía una ventaja de entre 1,8 y 4 pp; perdió por 16,55 pp, 49,50% vs 32,93% según el escrutinio definitivo; ver datos arriba, click para agrandar), no tomaremos ese dato para el promedio, ya que sesga negativamente y afecta la precisión de la estimación. Según Nate Silver, el simple hecho de realizar una media de todas las predicciones en lugar de fiarlo todo a una sola puede reducir el error entre un 15 y un 20 por ciento de media. Sin embargo, la experiencia de las PASO, que hemos analizado en varias entradas recientes, muestra que los sondeos claramente desviados del resto le quitan precisión a la media, así que por ese expediente metodológico consideramos que el dato de Atlas Intel restaría en lugar de sumar a la estimación que haremos de acá al 27 de octubre.  

Lo contundente de la diferencia a favor del Frente de Todos y la extensión territorial del triunfo en las PASO (ver datos arriba; click para agrandar) perfilan una ventaja que se insinúa irremontable de cara a la elección general del 27 de octubre. La dinámica pos PASO, con una deficiente reacción del oficialismo al resultado y una magra gestión de la crisis, insinúa que la brecha puede ampliarse, dado que los costos del malestar recaen en el gobierno al mismo tiempo que la expectativa positiva se desplaza hacia la fuerza opositora. En este contexto, la más reciente encuesta telefónica de la consultora Reyes Filadoro-Numeral 8 arroja que el 73% de los electores cree que el presidente Mauricio Macri no tiene el control de la situación del país (ver datos abajo, click para agrandar). El estudio fue realizado entre el 1 y 2 de septiembre sobre una muestra de 1.200 casos, con un error muestral de +-2,8%. 

 Según la encuesta más reciente de Clivajes que citamos oportunamente, casi el 67% de los electores responsabiliza a la gestión Macri por la situación económica (ver datos abajo; click para agrandar).

Un resultado muy similar arroja el último sondeo de Ricardo Rouvier & Asociados: el 66,2% cree que el actual gobierno es el responsable de mantener condiciones económicas y sociales estables hasta el 10 de diciembre, contra apenas 22% que reparte las responsabilidades (ver datos abajo; click para agrandar).

Finalmente, el estudio que también citamos recientemente de FGA arroja que el 53,2% responsabiliza a Macri por la crisis recrudecida luego de las PASO (ver datos abajo; click para agrandar). En síntesis, el cruce de diversos datos sugiere que el principal rol asignado al gobierno es el de control de daños hasta el cierre de su mandato en diciembre. 

De la coalición electoral a la construcción de una nueva mayoría (3)

Al cierre del posteo anterior apuntábamos que la polarización más intensa que se insinúa en las encuestas de cara a la primera vuelta se distribuye asimétricamente, pues mientras el Frente de Todos avanza, el oficialismo se muestra estancado, lo que deja una perspectiva preocupante para Juntos por el Cambio hacia el 27 de octubre. Sin embargo, el panorama es aún más desfavorable para el oficialismo de acuerdo a otro estudio reciente. Se trata de una encuesta realizada a través del sistema CAWI (panel digital a través de dispositivos móviles) sobre una muestra nacional de 8.629 casos, cuya robustez arroja un error muestral de apenas +-1,1%. En este caso, los Fernández avanzan hasta 54,3% de intención de voto (4,81 puntos porcentuales más que en las PASO), mientras que Juntos por el Cambio retrocede al 26,6% (-6,34 pp menos que en las primarias; ver datos arriba, click para agrandar). Así, la brecha entre ambas fuerza trepa a 27,7 pp. En este caso, la fórmula de Consenso Federal también avanza 1 pp respecto a su desempeño en las primarias

De verificarse estas tendencias, eso implicaría que el oficialismo se repliega hacia su núcleo más duro, ya que ese 26,6% está en el orden de magnitud del resultado obtenido por Macri en las PASO del 2015 (24,5%). Asimismo, ese 26,6% está en el mismo orden de magnitud de la imagen positiva del gobierno según la encuesta más reciente de D´Alessio/Berensztein, realizada de manera online sobre una muestra nacional de 900 casos: 29% (ver datos arriba; click para agrandar). 

La posibilidad de retroceder en porcentaje respecto a las primarias es, sin dudas, la peor de las perspectivas para el gobierno. Otra, no tan desfavorable pero de todos modos preocupante, es que un incremento de la polarización siga distribuyéndose de manera asimétrica, favoreciendo más al Frente de Todos que a Juntos por el Cambio. Esto es factible de suceder, según el estudio más reciente de la consulta Trespuntozero. Según su último trackeo, Alberto Fernández tendría un 51,9% de los votos, contra un 34% de Mauricio Macri. La brecha entre ambas fuerzas es de 17,9 pp. Sin embargo, cuando se hace foco en aquellos que votaron a terceras fuerzas en las PASO, un 74% de este segmento dijo que mantendría su voto, en tanto que un 11,8% apoyaría a los Fernández y un 8,5% a Macri-Pichetto, lo que de verificarse agrandaría la brecha entre el Frente de Todos y Juntos por el Cambio. Un 5,6% aun no sabe (ver datos arriba; click para agrandar). El estudio fue realizado del 28 al 30 de agosto online, sobre una muestra de 1.500 casos. 

Una tercera encuesta reciente confirma al Frente de Todos en ascenso y a Juntos por el Cambio estancado. Según la consultora Clivajes, los Fernández alcanzan 52,62% de intención de voto, vs 32,54% de Macri-Pichetto; una brecha de 20,08 pp. Lavagna-Urtubey avanzan al 9,36%, la izquierda roza el 3% y los frentes NOS y Despertar están en empate técnico (ver datos arriba; click para agrandar). El estudio fue realizado del 1 al 5 de septiembre vía online, sobre una muestra de 1.267 casos. Recordemos que esta consultora fue la que tuvo la mejor aproximación al resultado de las primarias del 11 de agosto pasado. En la misma línea, la última encuesta nacional de Circuitos ubica al Frente de Todos rozando el 53% y a Juntos por el Cambio cerca del 34%, lo que da una brecha de 19,1 pp. En este estudio, el binomio de Consenso Federal roza el 8%, proyectando sobre votos afirmativos (ver datos abajo; click para agrandar). En este caso, la medición fue realizada vía IVR del 2 al 5 de septiembre, sobre una muestra de 1.450 casos tomados de 14 provincias, con un error muestral de +-2,3%. 

Así, actualizando el promedio con 13 mediciones posPASO, tenemos 52,4% para el Frente de Todos vs 33% para Juntos por el Cambio; una brecha de 19,4 pp, que implica, respecto al resultado de las primarias, un avance de 2,91 pp para Alberto y Cristina Fernández y de apenas 0,06 pp para Macri-Pichetto. Esto sugiere que lo que la gestión de la crisis por parte del oficialismo está, en el mejor de los casos, apenas reteniendo el caudal previo (fidelizando), o incluso retrocendiendo y replegándose hacia su núcleo duro en las mediciones más desfavorables (como es el caso de la encuesta de CB Consultora). Es decir, la fuerza opositora se consolida como mayoría neta, mientras que el oficialismo retrocede hacia la posición de minoría electoral más intensa. Este es el panorama previo a la reanudación de la campaña electoral, a partir de mañana 7 de septiembre.