lunes, 16 de septiembre de 2019

De las tendencias nacionales a las distritales (1)



Luego de nuestro posteo del viernes pasado se dio a conocer otra encuesta, aunque en rigor esta cerró a fines de agosto, es decir, antes de otras que ya repasamos en este blog (como las más recientes de las consultoras Clivajes, Circuitos, Rouvier & Asociados y CEIS). Se trata en este caso de una medición nacional de Análisis y Tendencias realizada a través de plataformas digitales. En ella, Alberto y Cristina Fernández alcanzan 50,65% de intención de voto  vs 37,4% de Macri-Pichetto (ver datos arriba; click para agrandar). La brecha entre ambas fórmulas es de 13,3 puntos porcentuales, menor que la que hemos visto en encuestas anteriores (con la sola excepción del estudio de Atlas Intel, en el que la brecha es de 10 pp, pero ya observamos por qué no consideraremos ese estudio para el promedio que venimos siguiendo). La performance de Juntos por el Cambio, mayor a la que vemos también en otros estudios revisados, se debe a que en esta encuesta las demás fórmulas caen por debajo del promedio de la serie: Lavagna-Urtubey apenas rozan el 4% y Gómez Centurión-Hotton el 2%, mientras que la izquierda y el Frente Despertar rondan el 1%. De todos modos, aun con estos matices, el estudio perfila una victoria del Frente de Todos en primera vuelta, ya que excede en 5,6 pp el umbral del 45% necesario para imponerse sin necesidad de ballotage. 

Incorporando esta medición a la serie pos PASO quedan 16 en total, con un promedio de 52,1% para el Frente de Todos y 33,5% para Juntos por el Cambio, lo que da una brecha de 18,6 pp. Si tomamos una sola medición de cada consultora (la más reciente), quedan 12 estudios, para un promedio de 52,4% para los Fernández y 33,1% para la fórmula oficialista: 19,3 pp de brecha. La amplitud sugiere que la tendencia es difícilmente reversible, lo cual desplaza parte del interés a las elecciones distritales que se vienen: jefe de gobierno en Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y gobernador en provincia de Buenos Aires (PBA) el 27 de octubre, junto con la elección presidencial, y a fines de este mes la elección de gobernador en Mendoza. Los tres distritos son gobernados por Cambiemos y completarían la saga de elecciones ejecutivas distritales de 2019, junto con la institucionalmente complicada elección de gobernador de La Rioja (luego de algunos vaivenes, votaría el 27 de octubre), Chaco (13 de octubre) Catamarca (también el 27 de octubre) y la elección de gobernador de Salta (primarias previstas para el 6 de octubre y generales para el 6 de noviembre). 



Según la consultora Proyección, la tendencia en PBA amplía la ventaja obtenida por el Frente de Todos en las PASO (ver datos más arriba; click para agrandar): 56,3% vs 32%, lo que consagraría a Axel Kicillof como el próximo gobernador por una brecha de 24,3 pp (recordemos que en ese distrito se gana por simple pluralidad de sufragios, ya que no hay ballotage). El escenario con boleta corta (sin considerar la tracción del tramo presidencial que concurre en la misma fecha) apenas varía: 55,1% para Kicillof vs 34,4% para Vidal (brecha de 20,7 pp; ver datos arriba, click para agrandar). La medición fue realizada entre el 16 y el 21 de agosto pasados vía online, sobre una muestra de 1.149 casos. 



De este estudio se desprende también que la identificación política de los votantes de Kicillof es predominantemente positiva (peronista y kirchnerista; ver datos arriba, click para agrandar), mientras que la de los votantes de Vidal tiene un alto componente negativo (casi un 25% de antikirchneristas; ver datos abajo, click para agrandar).



Para más datos, según Proyección, un incremento de la participación electoral (base de la apuesta del oficialismo de cara al 27 de octubre) no le permitiría achicar las distancias a Vidal, sino todo lo contrario: casi el 52% de quienes no asistieron a las primarias el 11 de agosto votarían por el Frente de Todos, vs casi 29% que se inclinarían por Vidal (ver datos abajo; click para agrandar). 



Por su parte, la Consultora CB realizó un estudio en PBA entre el 1 y el 2 de septiembre pasados, sobre una muestra de más de 2.700 bonaerenses mayores de 18 años vía CAWI (panel digital a través de dispositivos móviles). Esta encuesta arroja 53,1% para Axel Kicillof y 35,3% para la gobernadora María E. Vidal, una brecha de 17,8 pp (ver datos abajo; click para agrandar). En una elección muy polarizada, los otros tres candidatos sumados apenas rondan el 6% de intención de voto. 



Kicillof también aventaja a Vidal en el análisis de potencialidad electoral: su piso es de 45,3% y su techo de 57,1%, con un rechazo de casi el 35% (ver datos abajo; click para agrandar).



En el caso de la gobernadora, su piso es de 27,1% y su techo del 36,5%, con un rechazo del 53,2% (ver datos abajo; click para agrandar). 



Así, el promedio de estos dos estudios da 54,7% para Kicillof vs 33,7% para Vidal; una brecha de 21 pp. Esto insinúa que el 27 de octubre se ampliará la diferencia que vimos en las primarias: el escrutinio definitivo de las PASO había arrojado 52,51% para Kicillof y 34,65% para Vidal, una brecha de 17,86 pp. Como se puede apreciar, la tendencia a gobernador en PBA está muy alineada con el promedio nacional a presidente, lo que indica que el voto en ese distrito, al igual que sucedió en las primarias, se está comportando como buen predictor (en el sentido de proxy) del nacional. 

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