La imagen presidencial se sostiene y el 7M pasó sin pena ni gloria

En un posteo reciente plantéabamos que el presidente Alberto Fernández redondeaba el mes de abril con un promedio de 76,1% de imagen positiva, 16,9% de regular y 5,6% de negativa, sobre la base de mediciones representativas del total país. Habiendo transcurrido la primera semana de mayo, si actualizamos el seguimiento de esa variable con las mediciones realizadas durante los últimos días de abril y publicadas al principio de mayo, veamos qué dicen los nuevos datos. Según la "Encuesta de Satisfacción Política y Opinión Pública" (ESPOP) elaborada por la Universidad de San Andrés, sobre una muestra de 1.015 casos relevados en plataforma online del 14 al 21 de abril, el presidente tiene una imagen positiva del 70% vs una negativa del 24%, lo que arroja un diferencial favorable de 46 puntos porcentuales (ver gráfico arriba; click para agrandar). Recordemos que esta muestra, si bien está ponderada por NSE y región, no incluye casos en el nivel marginal (E), que pesa no menos de un 5%. Por lo tanto, en rigor, el estudio no es del todo representativo del total de población, pues incluir al nivel marginal seguramente mejoraría la aprobación del dirigente oficialista. Con todo, se trata de un matiz menor hoy, dado que la coyuntura de cuarentena impide la realización de encuestas domiciliarias, que son las más empleadas para captar a ese NSE. 

Por su parte, la consultora Circuitos realizó del 23 al 26 de abril una encuesta sobre una muestra de 1.416 casos que abarcó Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y ciudades de más de 10 mil habitantes en 14 provincias. Se relevó de manera telefónica (IVR, con opciones de respuesta pregrabadas), con un error muestral de +/-2,3%. De acuerdo al informe, el 67,6% de los electores argentinos tiene una imagen positiva del presidente, con casi 47% de alta intensidad (muy buena) y casi 21% de buena; la regular alcanza 14,3%, al igual que la negativa, con casi 4% de no sabe (ver gráfico arriba; click para agrandar). La calificación de la gestión del gobierno con respecto al coronavirus es aún superior: 70,6% de positiva, con casi 47% de alta intensidad (muy buena), casi 24% de buena, casi 18% de regular, apenas 10,2% de negativa y 1,3% de no sabe (ver gráfico abajo; click para agrandar). 

En tanto, según un estudio de Raúl Aragón & Asociados, la gestión de Alberto Fernández frente a la pandemia tiene un 81,1% de calificación positiva, con casi 67% de  "buena", un 14,2% de "muy buena" y apenas 14,4% de calificación negativa (13,2% de "mala" y 1,2% de "muy mala"); 4,5% ns/nc (ver gráfico abajo; click para agrandar). Esta encuesta fue realizada entre el 28 de abril y el 3 de mayo, sobre una muestra de 3.000 casos efectivos relevados de manera telefónica con asistencia de encuestador (CATI). El error muestral es de +/- 1,8%. 

Finalmente, la encuesta online que realizó la consultora Opinaia sobre una muestra de 1.800 casos arrojó un 89% de evaluación positiva para el presidente. La apertura por voto anterior muestra que entre los electores del Frente de Todos el acompañamiento trepa al 97% (cuasi unanimidad) y que incluso entre los votantes de Juntos por el Cambio Alberto Fernández alcanza 77% de evaluación positiva (ver gráfico abajo; click para agrandar). Por fuera del gobierno, también aparecen con un alto reconocimiento las fuerzas de seguridad y las fuerzas armadas por su actuación en el marco de esta coyuntura. En síntesis, más allá de los matices en las metodologías de medición y las categorías de respuesta con que trabajan (no todas incorporan la respuesta "regular"), el promedio de calificación positiva de la imagen presidencial que arrojan estas 4 mediciones es de 76,9%, con lo cual no se advierte una variación estadísticamente significativa respecto al promedio anterior calculado. Esto puede contribuir a explicar la nula repercusión de la acción opositora convocada ayer bajo la consigna "7M".