sábado, 4 de diciembre de 2010

La oposición en su laberinto


El año parlamentario 2010 muestra a una oposición que no estuvo a la altura de la expectativa generada por el resultado electoral del 2009 y el recambio legislativo de fines de ese año, pues no logró aprobar varios de los proyectos que consideraba clave: en el Senado fracasó en su intento de eliminar los superpoderes, de reformar el Consejo de la Magistratura y de cambiar el régimen de los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU), y en Diputados no pudo habilitar que el tratamiento del Presupuesto volviera a comisión; también quedaron como materias pendientes de su agenda la modificación a las retenciones agropecuarias y la reforma de la ONCCA. En cambio, sí pudo avanzar sobre la reforma del INDEC y aprobar la aplicación del 82% móvil a las jubilaciones (posteriormente vetada por el Poder Ejecutivo).

La gobernadora de Tierra del Fuego, Fabiana Ríos, quien llegó al poder encabezando una fuerza opositora al oficialismo (por el ARI) lanzó recientemente un nuevo partido y destacó que tiene grandes acuerdos con la política del gobierno nacional en lo que hace a un criterio redistributivo y en poner a la política en el centro de la construcción institucional, si bien no acuerda con su estilo y maneras: "Yo tengo una historia política y de militancia que hace que adscriba a sectores de izquierda y no del peronismo, lo que no quiere decir que no reconozca cuestiones política que han significado pasos adelante en Argentina (...) la estatización de los fondos de las AFJP, la estatización de las líneas aéreas, la asignación por hijo que es un salto cualitativo, son cuestiones de la macro política que uno las ha sostenido a lo largo del tiempo desde la militancia".

Ríos criticó además a Elisa Carrió por "invisibilizar el trabajo político" en la provincia del sur, en el lanzamiento de su fuerza, junto a ex militantes del ARI de la provincia de Santa Fe (que en septiembre pasado protagonizaron una ruptura con Carrió) y algunos dirigentes del socialismo, el radicalismo y el GEN. Ríos recordó que su fuerza política en Tierra del Fuego "surgió como la necesidad de construir a un partido que sostuviese a un gobierno que se había quedado sin partido a mitad de mandato: hubo un ARI que había decidido desaparecer en Buenos Aires fusionándose en una Coalición Cívica, sin considerar que en ese mismo momento estaba dejando sin partido a la única gobernación provincial que tenía el ARI", sostuvo. La gobernadora patagónica también planteó que en los últimos años vio "un corrimiento ideológico de Carrió muy fuerte (...) yo no tengo por qué explicar qué hace el diputado nacional Alfonso Prat Gay en una fuerza política en la que yo milito. Yo estaba golpeando con los martillos los bancos y con los muchachos del Frente Nacional Contra la Pobreza, cuando Prat Gay estaba del otro lado con la banca Morgan".

El discurso de Ríos plantea cuestiones interesantes vinculadas a la construcción política desde la oposición y el ejercicio del poder, porque existen dirigentes opositores netamente confrontativos y críticos -y hasta se diría despreocupados- por la cuestión de cómo construir, no digamos ya con vocación de administrar el poder sino el paso previo: construir con vocación de mayoría (lo básico que debe pretender cualquier político que quiera ser gobierno). El caso de Elisa Carrió es quizá el más sintomático, pues fundó el ARI, luego lo disolvió para conformar la Coalición Cívica, se acercó a un sector del radicalismo para formar el Acuerdo Cívico y Social y luego se distanció del mismo... en esos vaivenes, pasó de tener como principal economista a Rubén Lo Vuolo (de centroizquierda) a Alfonso Prat Gay, una suerte de "golden boy" formado en la banca Morgan.

La ex-ARI Ríos tiene responsabilidades como gobernadora y eso le da un diferencial para entender que el ejercicio del poder cuando uno administra es muy distinto al que se pone en juego como opositor neto, y esta cuestión es central de cara al 2011, como ya lo hemos planteado en este blog refiriéndonos a la cuestión gobernabilidad. Sin embargo, no es justo cargar todas las tintas en Carrió, cuando en rigor este tipo de déficit en materia de construcción política aqueja a muchas figuras de la oposición.

Julio Cobos, por ejemplo, que para el sistema de medios opositor al kirchnerismo era hace 2 años el candidato "puesto" del radicalismo, no deja de perder posiciones en las encuestas y en la interna de la UCR, mientras sigue pendiente una definición respecto a si pedirá licencia, si renunciará a su cargo de vicepresidente o si se lanzará como candidato presidencial conservando su actual lugar en el Ejecutivo (situación institucional probablemente insólita en los anales de la política mundial). El cobismo viene de fracasar en su intento de desbancar a Gerardo Morales de la presidencia del bloque radical en el Senado, pero anunció la creación de un sub-bloque que tendrá otra conducción, con lo cual termina por debilitar la posición política e institucional del radicalismo en su rol de opositor al gobierno. Las fricciones en el Senado se gatillaron luego de que en la Cámara baja el alfonsinismo obtuviera la mayoría y desplazara de la conducción del bloque al cobista Oscar Aguad, para colocar en su lugar a Ricardo Gil Lavedra, cercano a "Ricardito".

El radical Ricardo Alfonsín, de la mano del socialista Hermes Binner y Margarita Stolbizer (GEN) es el opositor que hasta ahora muestra una mayor vocación de construir una coalición en condiciones de enfrentar al oficialismo, tratando de amortiguar las tendencias centrífugas asociadas a la ruidosa salida de Elisa Carrió del Acuerdo Cívico y Social (de difícil vuelta atrás, si se consideran sus posteriores acusaciones a los radicales de pactar con el oficialismo), las dudas de Julio Cobos y los cruces internos en los bloques de Diputados y Senadores. Alfonsín trata de darle un sello progresista a ese frente, para prevenir también los intentos de seducción del socialismo que periódicamente ensaya Fernando "Pino" Solanas, de Proyecto Sur. Alfonsín es también el opositor más consciente de que difícilmente se puede ganar la elección presidencial en 2011 si no se capta una parte del voto filo-PJ.

No la tiene fácil "Ricardito", porque la interna radical por las candidatura presidencial se complicó más con la insistencia del mendocino Ernesto Sanz de especular con un lanzamiento de su propia postulación, pretensión que el cobismo y el alfonsinismo salieron a cruzar (la puja pone en un brete a la mesa de conducción del Comité Nacional radical en el que Sanz operaba como una suerte de árbitro entre los dos grupos). Desde lo positivo, "Pino" Solanas ha admitido en algunas oportunidades que ve "coincidencias" con el socialismo, con el GEN y con el sector del radicalismo que encabeza Ricardo Alfonsín, dejando de alguna manera la puerta abierta a un "gran acuerdo" de cara a las elecciones de 2011, aunque por otro lado ha confirmado el lanzamiento oficial de su candidatura a presidente.

Por su parte, el Peronismo disidente (Federal) viene sufriendo sucesivas tomas de distancia (por parte de Carlos Reutemann, Felipe Solá y Marios Das Neves) mientras el ala dura liderada por Eduardo Duhalde, los Rodríguez Saá, Ramón Puerta y Juan Carlos Romero no acierta a definir una estrategia ni un candidato de unidad, en tanto que Mauricio Macri depende fuertemente de una estructura política que lo mira con recelo. Respecto del jefe de Gobierno de la Capital, Duhalde ha dicho que "en el supuesto de que se haga un frente lo podría acompañar, pero ya no voy a elegir ni apoyar a nadie"; sin embargo, hasta ahora el bonaerense mantiene su pretensión de lanzar su propia candidatura a presidente.

No puede de todos modos descartarse un acercamiento final entre Duhalde y Macri, probablemente forzado por el hecho de tener que definir un nombre para enfrentar a un gobierno que, en términos de opinión pública, ha salido sin dudas reforzado después de la muerte del ex presidente Néstor Kirchner, como lo han admitido ya incluso referentes opositores (el más reciente de ellos, el macrista Federico Pinedo, al decir que la situación política "cambió sustancialmente porque la Presidenta con la muerte de Kirchner aumentó 20 puntos").

Poliarquía, consultora que en el 2009 trabajó para la oposición, realizó una encuesta en la que imagen positiva de la presidenta Cristina Fernández llega al 57% (una suba de 21 puntos porcentuales) y sólo 17% la califica de manera negativa. Además, la proyección electoral de la primera mandataria hacia 2011 es del 46% de los votos, contra 19% de Ricardo Alfonsín, 15% de Mauricio Macri y 10% de Pino Solanas. Medida contra Julio Cobos como candidato radical en lugar de Alfonsín, Cristina treparía al 48%, contra 19% de Cobos, 13% de Macri y 11% de Solanas. Mientras tanto, el 75% de los encuestados evalúa de manera regular o negativa al conjunto de la oposición partidaria al Gobierno.

6 comentarios:

  1. Me parece que con su conducta Carrió es funcional al kirchnerismo, ya que divide el voto opositor y facilita las chances de Cristina de ganar en primera vuelta en 2011. Al parecer, en enero lanza su candidatura presidencial en Mar del Plata. Si bien todavía se desconoce el nombre de quién la acompañará a Carrió en la fórmula presidencial, se dice que el candidato a vicepresidente también está definido.

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  2. Gracias, Anónimo! Es posible... sin embargo, lo que me parece preocupante es la dispersión de la UCR porque la institucionalidad argentina necesita de una oposición constructiva y viable. En Ámbito se publica hoy una nota que da cuenta de que la Convención radical se empantanó en medio de definiciones claves para avanzar con la interna, como la plataforma partidaria unificada que, como se anunció desde el Comité Nacional, debía ser reconocida por todos los candidatos presidenciales como plan de Gobierno; el marco de alianzas que la UCR manejará en 2011; una modificación a la Carta Orgánica para adecuarla a la reforma política que hizo votar el Gobierno y la discusión sobre el adelantamiento de una interna a marzo para definir candidato presidencial, una idea oportunamente lanzada por Sanz y que apoyaron Gerardo Morales y el alfonsinismo. En todos esos puntos quedó patentizada la peligrosa división que vive la UCR. Está claro que Cobos y Alfonsín (no se sabe Sanz) no tienen la misma visión sobre cuál debería ser el plan de Gobierno que el radicalismo debe llevar a las elecciones.

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  3. Yo que lo sigo muy de cerca a Pino, debo aventar algunas dudas con respecto a Alfonsín. Los respetos, incluso elogios no significan guiños para buscar ningún acuerdo ya que está claro que Proyecto Sur viene sosteniendo hace tiempo la necesidad de romper el bipartidismo, el verdadero corralito político de la Argentina y como siempre afirma que hay mucha gente valiosa en ambos grandes partidos que deberían sumarse a un nuevo Proyecto Nacional, para ser consecuentes con los verdaderos significantes del Radicalismo, el verdadero movimiento nacional de la 1º parte del siglo XX y del peronismo, idem de la 2º mital del siglo. Es tiempo de buscar una nueva síntesis que exprese la vocación soberana de nuestros pueblos para el siglo XXI.
    Pero posibilidad de alianzas de Proyecto Sur con alguno de los dos partidos no hay ninguna.

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  4. Gracias por tu aporte, Fabián! A todo esto, ¿qué pensás que hará Pino si Macri decide adelantar las elecciones en Capital Federal -distrito donde Pino hizo una buena elección en 2009 y que le sirve de proyección? Sylveste escribe hoy que la jugada política de Macri reacomoda el escenario porteño de cara al 2011 y plantea que si las elecciones se adelantan, Fernando Pino Solanas jugará la doble candidatura; es decir, a jefe de Gobierno porteño y a Presidente de la Nación (imitando la especulación de Macri) y agrega que en el Pro miran a la figura política de Solanas y reconocen que es un adversario de temer (según dicen, hay encuestas que dan apenas un punto de diferencia entre Solanas y Michetti).
    Espero tu comentario de respuesta, saludos!

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  5. Pino recibe insinuaciones (para no decir presiones) "atractivas" respecto de su candidatura a jefe de gobierno de Buenos Aires. En varios programas le han preguntado lo mismo, y él admite que sería lo mas fácil, dada la prtesente situación, aunque la "herencia" de la Ciudad de B.A. que Macri le dejaría no sería simple de remontar. Yo creo que las cosas son como las han anunciado publicamente, ya estamos jugados para que Claudio Lozano (que es un grán economista) sea el candidato por Proyecto Sur y aliados. Además hay procesos de consulta interna. Pino, aun que las decisiones son propias y de su entorno (Brunati y Alcira principalmente), no se descuelga de sus bases como suelen hacer Juez y Carrió. Y hemos priorizado el crecimiento del Proyecto a nivel nacional, y si Pino se mete en el "nicho" de Capital, ese crecimiento puede "amesetarse" o incluso decaer. Entendemos que el kirchnerismo muestra demasiadas incógnitas como para creer que tienen la pelota dominada hasta octubre, no olvidemos el pequeño detalle de que estamos en Argentina, o sea nada es 80% predecible, lo cual es muy bueno para muchos, aun que no para el establishment.

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  6. Gracias por tu aporte, Fabián! Me permito chicanearte un poco: la herencia de la ciudad de Baires que dejaría Macri es menos simple de remontar que la herencia de CFK en el país (esto sería un reconocimiento implícito a la gestión nacional, me parece, o es un desliz? Por otra parte, no te parece que sería bueno que Pino demuestre capacidad de gestión en un distrito donde tiene más chances de ganar la elección que a nivel nacional?

    Gracias por tu entusiasta participación!

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